Narra Damián.
Es sábado y estoy aburrido no sabía qué hacer ni con quién salir, pues no tenía amigos. Reviso mis contactos y veo el nombre de "Machito" al principio no recordaba quien era "machito" pero luego de un rato recordé habérselo pedido a una niña peli negra de la Universidad, reí al recordar a esa niña. No era el número de la peli negra sino el de su amiga, tambien le pedí la dirección de esa niña cómo se llamaba... Ah sí Shakira.
Me bañé de manera rápida y me vestí en menos de 10 minutos no era mucho lo que llevaba puesto pero sí que era necesario mi chaqueta negra, me encanta esta chaqueta. Salí de mi casa directo a la casa de la "Machito" quería salir y la única cercana en estos momentos era ella. Llego a su casa y antes de tocar su timbre prefiero escribirle.
Damián
•¡Hola, Machito!
Río ante el mensaje que acabo de enviarle, sé que sabrá de quien se trata por ende no le escribo quien soy.
Machito
•¿De dónde sacaste mi número? Tarado.
Definitivamente sabía quien era el que envió ese mensaje.
Damián
•Deja de ser tan agresiva mi machito. Tu amiga Luz me lo dio.
Creo que era así como se llamaba su amiga.
Machito
•Ay ajá ¿qué deseas?
Ella siempre tan tierna.
-Acaso no puede sacar su lado femenino o es que nunca lo ha tenido- lo digo mirando su casa.
Damián
•Primero que me guardes en tus contactos y segundo que salgas de tu casa.
Ojalá y salga no quiero que me deje plantado.
Han pasado varios minutos y no me responde esa niña.
-Nunca una mujer me había rechazado, bueno tú Machito no eres exactamente una mujer, así que no me ofenderé todavía- digo sólo para mí y le vuelvo a escribir.
Damián
•Sal rápido, ya quiero verte.
Estás palabras funcionan con todas las niñas. Espero que ella no sea la excepción.
Escucho un grito que viene de los adentros de la casa de la Machito y son de alegría decía "Quiere verme" lo escuché en un tono felíz, supongo. No creo que me haya equivocado pero con ella no se sabe. Al no obtener respuesta de ella le envío otro mensaje.
Damián
•Ya te escuché sal rápido Machito.
No le escribí más y a decir verdad ya me estaba aburriendo el estar esperando a Shakira o no sé cómo se llama en realidad. Al poco rato la puerta de su casa se empezó a abrir muy lento y de ahí sale una niña algo tímida, supongo que se apena por estar tan desarreglada, pero aún así se ve hermosa. Ella queda mirándome como si estuviese embobada con mi presencia. Por un momento pensé que le gustaba pero sabemos que es imposible.
-Te gusta lo que ves- lo digo para que quite esa cara de boba que trae y caiga en cuenta que ya debería de saludarme.
-Pues si, me encanta lo que veo- en ese instante mi corazón comenzó a latir con mayor frecuencia y no entendía el porqué de esto, alzo las cejas y ella continua -Hablo de la moto por supuesto- comienza a reír y yo no sé qué hacer pero mi sonrisa se esfuma.
Trato de disimular lo que causó en mi.
-No le veo la gracia Machito- Bingo, acabo de eliminar su sonrisa, aunque se ve más bella con ella claro.
-¿Qué haces aquí? Damian- lo dice con total fastidio.
-Como pensé que estarías sin hacer nada me dije a mi mismo "Hey Galán porque no vas por tu amigo y lo sacas a dar un paseo, digo A-MI-GA" y fue así como vine- digo con total convicción.
-Acaso Luz también te dijo mi dirección?- pregunta indignada de que su amiga soltara tal información tan fácil.
-Te dije que todas quieren a este hombre, solo le sonreí y ella me soltó toda la información deseada- dobló los ojos ante lo que he dicho, río en mis adentros.
- No pues que haremos con Don Galán, el súper sexy.
-Gracias preciosa pero ya vámonos. Sube rápido- lo digo seguro de que vendrá conmigo. Tiene cara de querer salir
-No más porque estoy aburrida. De no ser así ni te abriría mi puerta- dice y parece segura de si, por lo menos colaboraré con su aburrimiento - ya vuelvo- se va y supongo que se cambiará de atuendo.
Solo han pasado ocho o nueve minutos desde que se fue y ya está aquí, aún con el poco tiempo que e dedicó para sí misma se ve hermosa, ¿Cómo es posible que no le gusten los hombres?
-En serio que es notorio que no eres niña. Es la primera vez que espero tan poquito a que una mujer se arregle. Aunque acepto que tú eres hermosa sin hacer nada.
Porque he dicho si, fluyó sin pedir permiso, ella está roja, supongo que no está acostumbrada a este tipo de tratos, agradezco que haya abierto su boca para irnos, ya no sabía que decir.