Capítulo 5: Eritrocitos

La siguiente clase era de historia, no me podía resultar más aburrido, después de desayunar nos dirigimos hacía el mismo salón del comienzo e ingresamos, al entrar allí ya había una persona con un vestido de seda negro, tan largo que se arrastraba por el suelo, este tenía dos colas largas con bordes blancos, el vestido cubría todo su cuello y brazos, ajustado a su esbelto cuerpo. Me di cuenta que me quedé más tiempo de lo necesario observándola así que me dirigí nuevamente al mismo asiento en el cual me había sentado en la clase anterior. Ella miró a todos en silencio y esperó que todos estuvieran sentados, el color negro hacía que su piel se viera mucho más pálida, sus ojos azules se mantuvieron apacibles, entonces noté que en su frente había una gema roja, su cabello negro parecía confundirse con su vestido, era tan lacio y largo que parecía que llevaba un hiyab.

—Soy la instructora encargada sobre la historia y teoría de nuestro nuevo mundo —su sonrisa era taimada—, mi nombre es Freesia y soy un oficial de categoría N24. Preséntense.

Tras su breve saludo todos nos presentamos como anteriormente lo hicimos con el entrenador Luke, ella sonrió satisfecha luego de escuchar los nombres de cada uno.

—Bueno ya todos sabemos cómo empezó todo, una lluvia que trajo la tragedia a un mundo que vivía sin límites. Entonces ahora estamos nosotros, 293 años después, intentando solucionar aquellas invasiones que acabaron con la vida de millones de personas alrededor de todo el mundo.

Entonces ella se dio la vuelta y empieza a escribir en la pizarra, Vyroodian, Calidyan y Axtyll.

—Antes de que la lluvia cayera había casi un total de 7.700 millones de humanos alrededor de todo el mundo, luego de la lluvia se redujo la población hasta casi un 56% y luego la caza empezó y los humanos más débiles murieron, durante años los humanos que fueron adquiriendo sus habilidades defendieron a aquellos que seguían siendo débiles, y los más fuertes renombraron los continentes —ella se detuvo y agregó con una sonrisa—, ¿alguien sabe cuántos continentes había antes?

—Seis —alguien del fondo respondió rápidamente.

—¿Y cuáles eran sus nombres? —volvió a preguntar.

Pero la persona se quedó callada, yo también me mantuve en silencio, pero como nadie respondía, cerré los ojos y di mi respuesta:

—América, Europa, África, Asía, Antártida, Oceanía —mencioné cada uno.

—Aunque en esos tiempos ni ellos mismos sabían cuántos continentes tenían —ella se ríe—, unos decían que tenían cinco, seis y otros siete. Pero eso es el pasado y actualmente ya no nos importa. Nosotros estamos en el continente Vyroodian quién fue nombrado y fundado por Victoria. Nuestro escudo es una mariposa cola de dragón cruzada con dos agujas, nuestros uniformes la llevan con orgullo. Victoria decidió que una pequeña mariposa representara la vida que sobrevivió, luego del desastre, mostrando que, aunque tuviera la vida más pequeña e insignificante también era valiosa. Después está el continente de Calidyan quien fue fundado por Shakot, su escudo tiene un tigre que en su boca carga el corazón de un legído. Y por último está el misterioso continente de Axtyll que fue fundado por Lutbrel, su escudo posee un íbice con ojos de serpiente. Muchos dicen que es una cabra, pero no lo confundan son totalmente diferentes.

Entonces ella levantó su mano y aplaudió, el sonido fue tan fuerte que mis oídos dolieron.

—Por favor no se duerman en mi clase —lo dijo acompañado de una sonrisa—, ahora viene la parte más interesante.

Ella escribió en la pizarra su nombre tal cual como se presentó.

Freesia Oficial categoría N24

—Me imagino que todos habrán notado esto, se los explicaré para que ninguno sea un impetuoso preguntón —ella subraya “oficial categoría” —, cuando alguien se presenta y dice esto, es para demostrar su posición, ahora les voy a traducir, Mi nombre es Freesia, claramente, soy un oficial, eso significa que mis habilidades están activas y mi categoría es N24, que en resumen sería que estoy en el puesto Nacional 24.

—¿O sea que entre el número sea menor más fuerte es? —la voz de Antonie atrajo la atención de ella quién sonrió.

—Claramente lo es —dice ella y luego agrega—, existen otras clasificaciones, pero por ahora no son necesarias explicarlas.

Luego borra todo lo que escribió y escribe “Criselum”.

—Los Legídos son criaturas muy peligrosas, después de tantos años aún siguen apareciendo. Originalmente nuestro mundo tenía otra forma de proveernos luz, a lo que ellos llamaban “energía”, tal energía ya no existe, cuando los Legídos llegaron todas las formas existentes de esa maravillosa energía se extinguieron. Actualmente sabemos que los Legídos se alimentas de esa energía y por esta razón nadie puede salir cuando está lloviendo y más cuando lo rayos iluminan el cielo.

Ella colocó una mano en la gema de su frente.

—Esto que ven aquí, este pequeño cristal rojo —quitó su mano y se sentó sobre la mesa dejando caer su vestido de forma delicada—, es lo que se conoce como criselum, todos los oficiales poseen uno, además de ser una identificación bastante sencilla, nos protege de la contaminación y evita ciertos accidentes.

—¿Contaminación? —preguntó una voz femenina que se escuchaba bastante sombría.

—Así es —sonríe ella—, los legídos son peligrosos, unos feroces asesinos claramente, pero estar junto a ellos nos ponen en riesgo, los legídos tienen un aura bastante toxica para nosotros, pero como oficiales podemos resistir hasta cierto punto, el criselum se encarga de avisarnos antes de que nuestro nivel de contagio sobrepase nuestra resistencia.

—¿Es por eso que había barreras de protección en algunos lugares? —pregunté al ver que ella guardo silencio.