Capítulo 21: No pretendía hacerla mía

Dante
No pretendía hacerla mía, pero no pude resistir verla desnuda, fue algo mucho más grande que yo, deberíamos haber hablado antes, pero ahora que más da. La veo dormir a mi lado, parece un ángel, sonrío con ese pensamiento en mi cabeza, ya sabía que no era Clarisa, pero después de este momento me queda más que claro. Ella abre un poco los ojos y me mira
- Estás bien?- Le pregunto, no sabía que ella nunca había estado con alguien, pero me alegra mucho haber sido el primero
- Si, muy bien- Dice sentándose en la cama, acaso después de esto piensa seguir fingiendo ser Clarisa?
- Sigue durmiendo, ya casi amanece, ven aquí - Le digo y la atraigo a mi pecho, está algo tensa
- Dante
- hablamos mañana, no te preocupes- Digo y le doy un breve beso en la frente.
Esta chica me hizo sentir demasiadas cosas desde el principio, desde que me miró por primera vez supe que no era Clarisa, pero por qué finge serlo? Quién es esta chica? Y cómo se llama de verdad? Siento que la amo con todas mis fuerzas, pero no la conozco de nada, acaso eso puede ser posible?
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Alison
No era mi intención estar con él, ahora qué hago? Cómo actúo? Seguramente se dio cuenta de que nunca había estado con un hombre, por lo que ahora debe saber que no soy Clarisa, y si está decepcionado, y si no quiere volver a verme? Creo que no podría soportar su rechazo.
Sin dejar de pensar bajo las escaleras hasta llegar hasta la cocina, ni siquiera me había dado cuenta de donde estaba hasta que me fijé mejor
- Despiertas temprano- Dice una mujer que ahí está
- Hola- Es lo único que digo y esta me mira, pone pequeños los ojos y se acerca a mí, parece confundida
- Sabes quién soy?
- Lo siento, no- respondo porque es la verdad y ella sonríe aunque aún parece confundida
- Soy Joset, la nana de Dante, ya veo a que él se refería
- con qué?
- Olvídalo muchacha, toma, un jugo de fresas, está muy rico
- Gracias nana - Dice Dante a mi espalda luego de que cojo el baso, no me había dado cuenta de que ahí estaba y no lo miro, comienzo a tomar la bebida- Puedes dejarnos solos?
- Claro hijo- Dice la señora mayor y Dante se para frente a mí
- Te escondes?- pregunta y yo niego con la cabeza sin mirarlo- qué sucede? Háblame, acaso no te gustó lo que...
- No es eso- Le interrumpo y miro sus ojos- Dante, eso no debió pasar nunca- añado y veo que mis palabras le han dolido
- Lo sé, no fue mi intención hacerte mía, pero estoy enamorado de ti
- No Dante - Le digo subiendo la voz y puedo sentir las lágrimas en mis ojos- No me amas a mí, no me conoces, no sabes nada de mí, no soy Clarisa, Dante, solo fingía y entenderé si me odias- No puedo continuar de hablar del nudo en mi garganta, limpio un poco mis lágrimas
- Pensé que nunca me lo confesarías- su respuesta no me lo esperaba y le miro confundida
- Cómo?
- Qué ya lo sabía, desde la primera vez que me miraste, esa mirada no era como la de Clarisa, luego tus actos, la forma en que tratabas a las personas, después te mandé a seguir, visitabas personas desconocidas, lugares que Clarisa nunca visitaría, esa vez con ese niño en el parque, ese día que trataste bien a esa empleada y le diste dinero- él coge mis manos y estoy más que consternada por sus palabras - siempre supe que no eras Clarisa, puede que el físico sea el mismo, pero en verdad son muy distintas, de ella nunca me hubiese enamorado, de eso puedes estar segura.
- Si lo sabías por qué no dijiste nada?
- Porque quería que tú me lo dijeras, quería escucharlo de tu boca, pero nunca me dijiste, no sé por qué no lo hiciste y ya no puedes negarlo, me di cuenta de que eras virgen y además, te estás tomando ese jugo de fresas, Clarisa es alérgica a las fresas - Yo miro el baso casi vacío y luego lo miro a él
- Estaba asustada, pensé que te habías enamorado pensando que era Clarisa
- y aun así no me dijiste la verdad, por qué?
- Es complicado Dante- Digo separándome de él
- Cuéntame, acabamos de dormir juntos, quiero saber quién eres, cómo te llamas, quiero saberlo todo de ti, incluso por qué finges ser quien no eres
- No puedo decirte - Digo luego de unos segundos, él me mira incrédulo
- Por favor, no me hagas esto
- Dante, no puedo, nunca debí dormir contigo, me dejé llevar por mis sentimientos, pero fue un error, yo, solo no puedo decirte - Camino hacia la salida, pero él me alcanza y sujeta mi mano
- No voy a dejarte ir hasta que no me digas al menos tu nombre- Me pierdo en esos ojos verdes que reflejan su enfado y desconcierto
- Amor, he llegado- Me suelta al entrar Asli por la puerta con una enorme sonrisa, hasta había olvidado que tenía novia
- Asli, qué haces aquí? - Le pregunta sin dejar de mirarme a mí
- teníamos que hablar
- No tenemos nada de que hablar, tú y yo ya terminamos Asli
- Lo sé Dante, pero tenía que darte una noticia que te va a alegrar - Ella nos mira a ambos, pero Dante solo tiene la vista fija en mí - Deberíamos hablar a solas
- Di lo que tengas que decir - Le dice este mirándola por primera vez- y hazlo rápido Asli
- No creo que quieras que Clarisa escuche, por lo que veo ha dormido aquí
- Yo ya me iba
- Habla Asli - Grita Dante sujetando mi brazo
- como quieras amor, estoy embarazada - suelta como si nada, Dante suelta mi brazo y yo, yo siento mi corazón partirse dentro de mi pecho- y el hijo, claramente es tuyo- anuncia, yo abro la puerta y salgo corriendo.