No somos iguales

Capítulo 38: Ella es solo una copia de mí

Clarisa
Me arreglo bien como siempre o mejor dicho estoy perfecta como siempre, camino hacia la salida, hoy empieza mi plan en marcha, hoy voy a demostrarle a Dante que puede amarme a mí al igual que a ese doble mío que anda por ahí.
- Vas a salir hija?- pregunta mi madre desde la escalera, yo volteo a verle
- Tengo cosas importantes que hacer, no me esperes temprano
- Sigues con esa locura en la cabeza?
- de cuál locura hablas Casandra? 
- De matar a tu hermana- Dice con algo de tristeza
- Oh dios mío, acaso te duele eso? pero iré a seducir a Dante- pregunto sorprendida y comienzo a reír
- Claro que me duele, Alison también es mi hija
- Casandra, abandonaste a tu hija de bebe y deseabas que muriese, eres un monstruo incluso mayor que yo y sé que no te arrepientes de nada así que deja de sentir y vuelve a ser la de antes madre- Le digo y salgo.
No puedo creer que ahora le duela lo que pueda hacerle a esa tonta, ella nunca debió haber nacido, pero haré que sufra primero por quitarme el amor de mi hombre, y para eso debo quitárselo yo a ella.
Antes de comenzar con mi actuación voy al apartamento donde tengo escondido a Anthony, no puedo dejar que el estúpido se me escape y menos que muera
- Vienes a visitarme, que placer- Dice cuando entro, está en la cocina preparando algo
- Deberías estar en cama para mejorar
- preocupada por mí?- pregunta enarcando una ceja
- estoy preocupada por nuestro acuerdo, entre más rápido mejores más rápido lo haremos
- Gracias por siempre ser tan preocupada por el bienestar de los demás
- Anthony, tienes que mejorar pronto, hicimos un acuerdo y tienes que pagar el favor que te hice al salvar tu vida y esconderte de los policías
- Cumpliré Clarisa, no te preocupes, a donde vas tan bonita?
- Iré a ver a Dante, hoy separaré a esos dos tórtolos 
- No creo que lo logres- comenta sin darle mucha importancia
- Claro que voy a lograrlo, consigo todo lo que quiero y nadie se resiste a mis encantos, soy perfecta Anthony
- Dante se resiste a tus encantos, él no es tonto ni superficial como yo, no ama lo físico, ama al alma y a ti no podría amarte porque no tienes alma- expresa mirándome fijamente y yo solo le doy la espalda para no explotar, no voy a dejar que él me eche a perder mi perfecto día, dibujo una sonrisa en mi rostro y camino hacia mi auto con paso firme como siempre cuando una mano me coge del brazo y termino impactada contra un pecho firme, miro hacia arriba a esos ojos que me miran fijamente
- Estefan
- Hola Clarisa, hacia mucho que no nos veíamos- Me dice con una gran sonrisa y yo finjo estar feliz de verle y le sonrío. Estefan es otro de los hombre tontos que han caído a mis pies, siempre me ha querido y lo sé.
- Ya nos estamos viendo
- Sabes a lo que me refiero, cuando pasábamos bien un rato juntos- expresa y me roba un beso
- Estefan, nunca te importó que estuviera casada y eso lo se, pero recuerdo que la última vez que nos vimos me dijiste que no volveríamos a tener sexo porque amabas a alguien
- Preciosa, eso lo dije porque estaba enfadado, tú seguías con tu esposo y yo, yo te quería mucho- Me dice y sonrío
- Crees que soy tonta Estefan? - Le pregunto separándome de él y me mira bastante confundido
- Por qué dices eso?
- Eres el primo de Dante y yo soy enemiga de este
- Clarisa, eso tampoco nunca me importó, además sabes muy bien que Dante y yo estamos mal, nuestra relación no es la mejor, ya que al chico no le gustan mis negocios turbios
- Muy bien, y por qué apareces ahora Estefan? No entiendo que es lo que quieres
- Solo te echaba de menos, quería pasar un tiempo contigo antes de irme de la ciudad, pero dime, que hacías aquí? 
- Tengo un apartamento ahí, se lo pagaba a alguien
- un amante?
- Si, algo así, pero ya él no está 
- Quieres invitarme a subir?- Me pregunta con esa sonrisa que tiene, el chico es bastante guapo, ojos verdes como Dante, pero él es rubio, es bastante alto, con hombros anchos y en fin, tiene un cuerpo perfecto, desearía decirle que si, pero Anthony está ahí y tengo otros asuntos
- Hoy no puedo mi amor, quizás otro día, hoy tengo unos asuntos que resolver
- Ok. Pero voy a estar esperando tu llamada mi amor, por cierto, conocí a tu hermana, son iguales, me sorprendió
- No somos iguales Estefan - Digo bastante enfadada por ese comentario - Ella es solo una copia de mí- añado y subo a mi auto.
Me alejo de ahí y miro por el retrovisor como Estefan se queda mirándome, lo que no entiendo es como sabía que estaba ahí, ¿acaso me sigue?, diablos, estoy paranoica últimamente, debo dejar de pensar así. No puedo negar que él me atrae, pero Dante, lo que siento por Dante es otra cosa, es amor y lo quiero para mi.
Llego en poco tiempo a la casa de Dante, me arreglo un poco y toco la puerta, una empleada me recibe
- Señorita Alison
- Hola, qué tal?- finjo gran interés como mi hermana hubiera hecho y converso unos segundos con la sirvienta, luego subo a la habitación y entro, Dante esta de espaldas, no lleva camisa y lo abrazo fuerte
- Mi amor, me extrañaste?- Le digo con ternura y dejo un beso en su cuello
- pensé que tardarías más mi amor- expresa y se da la vuelta, yo miro su precioso rostro y lo acaricio
- No podría alejarme mucho de ti - Le digo y él mira mis ojos y sonríe, me vuelve loca y me acerco a sus labios, quiero besarlo, voy a besarlo, pero cuando estoy a punto de hacerlo él pone su mano en mi cuello y me detiene
- No soy estúpido Clarisa- Me dice con una gran sonrisa y me quedo atónita, ¿cómo supo quien era?¿cómo diablos es posible eso? No entiendo nada y se forma un nudo en mi garganta, por primera vez en mi vida siento miedo, mucho miedo de la reacción de este hombre que tiene una mirada de odio.



#752 en Novela romántica
#282 en Otros

En el texto hay: secretos, amor, niño

Editado: 07.12.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.