Horas después cuando Lia y Jen fueron examinadas, las pusieron juntas en la misma habitación. El parte de lesiones para Jen dictaminó que estaba muy golpeada, pero por suerte no tenía nada roto aunque estaría muy adolorida durante un tiempo. En cambio Lia, además de los diversos cortes que tenía en la cara, Carl le había roto la nariz y le había luxado la clavícula izquierda. También contaba con un par de heridas en la cabeza que tuvieron que coser, al igual que su amiga, también tendría bastante dolor por una buena temporada.
A Lia le habían inyectado calmantes para mitigar el dolor y se quedó dormida. En cuanto a Jen, seguía despierta tratando de asimilar todo lo que había pasado durante aquel día. Ethan y Josh se quedaron con ellas hasta que sus amigas y la familia de Jen aparecieran.
—Chicos, me tengo que ir—comentó Josh—Espero que paséis buena noche y…Ánimo, ya pasó lo peor—se dirigió a Jen.
—Muchas gracias por ayudarnos—susurró la chica con lágrimas en los ojos—Te debemos la vida.
—A mí no tienes que agradecerme nada, todo fue idea de Lia—sonrió. No quiso quedarse más tiempo en la habitación, esa chica tenía algo que llamaba su atención—Nos vemos.
Josh salió mientras Ethan observaba las vistas desde la ventana.
—Es simpático tu amigo y un poco raro—apuntó Jen.
—No es amigo mío exactamente, aunque nos conozcamos de toda la vida, es mi vecino—le aclaró Ethan.
—¿Él sabe a lo que te dedicas?—señaló a Lia con la mirada.
—No, que yo sepa.
—¿Por qué fuiste con él? Pensaba que Lia y tú ya no eráis amigos.
—Era lo menos que podía hacer por ella—resopló, aquel interrogatorio de Jen lo estaba poniendo nervioso—Cuando la conocí, jamás hubiera imaginado que fuera tan valiente.
—¿Por qué has anulado el encargo?—quiso ser directa con él—Si ya Lia no es asunto tuyo ¿Por qué sigues aquí?
—No me siento cómodo haciéndolo. Ella me ha ayudado mucho a mí y a mi familia, se ha ganado mi amistad y mi respeto. Los mismos que perderé en cuanto sepa la verdad, he llegado a apreciarla y mucho, como comprenderás no podía seguir con esa farsa—se acercó a su cama y comprobó que seguía dormida—En cuanto se recupere le contaré todo porque yo ya no puedo más con esto.
—Pues imagínate como me siento yo—trató de incorporarse—Me salva la vida y llevo engañándola todo este tiempo. Ojalá algún día nos perdone—levantó la mirada y la clavó en Ethan que aún seguía observando a su amiga—¿Te puedo hacer una pregunta?
—¿Has dejado de hacerlo?—bromeó—Claro, pregunta lo que quieras.
—¿Por qué te dedicas a esto? No quiero ofenderte pero por lo poco que conozco de ti, me pareces una buena persona. No eres frívolo, prepotente y me queda claro que no eres interesado porque si no, no hubieras renunciado al dinero.
—Es una larga historia—se acercó hasta Jen y se sentó en una silla—Pero te lo puedo resumir en que necesito el dinero y haciendo lo que hago lo consigo fácil y rápido.
Escucharon mucho alboroto en el pasillo, Ethan se asomó y se dio de bruces con Kate y Lou.
—¡Dios mío Jen! ¿Estás bien?—Lou fue hasta ella para abrazarla.
—Shh, baja la voz—le indicó su amiga—Lia necesita descansar.
—¡Madre mía! ¿Qué le ha pasado?—Kate se acercó a ella y le acarició la cara con cuidado.
—Gracias a ella podemos contarlo las dos. También Ethan y su amigo nos ayudaron mucho—le sonrió al muchacho.
—Pensaba que habías renunciado—comentó Lou—¿Qué haces aquí?
—Cuidar de ellas hasta que llegara alguien—no le gustó el tono en el que aquella chica le estaba hablando—Soy humano después de todo.
—No sabía que las personas como… tú, sintieran algo más que amor por el dinero.
—¡Lou!—la riñó Jen—Te has pasado muchísimo, no le hables así. No ha hecho otra cosa que ayudarnos.
—Déjalo Jen. Ella tiene razón, soy lo que soy y punto—no era la primera vez que lo juzgaban por su modo de ganarse la vida—No me ofende.
—Creo que deberías marcharte, nosotras nos encargamos de ellas, muchas gracias.
—No os preocupéis, me marcho—se rindió—Espero que vaya todo bien—salió de la habitación sin apartar su mirada de Lia. Pero no se fue, se quedó en la puerta pensando en cómo volvería a verla sin que sus amigas se le echaran encima.
—Lou ¿Por qué te portas así con él? No ha hecho nada malo.
—No quiero que se vuelva acercar a Lia. Tú no sabes lo mal que lo ha pasado, entre eso y que tú no aparecías…Ha estado haciendo de las suyas otra vez…
—Si sabes que es más culpa nuestra que de él ¿Verdad?—intervino Kate—Fuimos nosotras quien lo trajo a su vida. Ethan no hizo nada que nosotras no le dijéramos.
—Es que la idea era que la entretuviera, no que la enamorara—confesó Lou—Y si yo puedo evitar que siga sufriendo, lo haré.
—Lia ni siquiera se ha dado cuenta pero es así. En esto apoyo a Lou, hay que alejarlo de ella.
—Pues yo no estoy de acuerdo—apuntó Jen—Lo que tenemos que hacer es hablar con Lia contarle todo y que ella decida lo que quiera hacer.