No Soy De AquÍ

NO SOY DE AQUÍ.

El cielo nunca fue un lugar para Lucas Blake. No hay espacio para dioses, ángeles ni milagros en la realidad que él conoce. En su mundo, las reglas son simples: el dolor es una constante y la única forma de sobrevivir es seguir adelante, sin esperar que alguien, ni siquiera un ser celestial, venga a salvarte. La vida le enseñó que nadie más que uno mismo puede salir del agujero profundo donde se queda atrapado.

A los 30 años, Lucas ya ha conocido el peso de la pérdida, la rabia de la traición y la oscuridad de un vacío que ni la luz más brillante podría llenar. Su vida es una serie de decisiones tomadas a la fuerza, una existencia política y calculada que gira alrededor de la protección de su hermana menor, el único lazo que queda de su familia. De día, es el hombre que todos esperan que sea: responsable, serio, profesional. Pero de noche, en los rincones oscuros de su mente y de la ciudad, es otro. Ahí es donde se permite ser quien realmente es: implacable, distante, lleno de rabia contenida. Un hombre que prefiere que el mundo le dé la espalda a confiar en algo o alguien.

Sin embargo, el destino tiene sus propios planes, y para Lucas, el suyo está marcado desde el momento en que se dio cuenta de que no está solo. No es solo la sombra que lo sigue, ni las voces calladas en su cabeza. Hay algo más, alguien que lo observa desde un lugar que ni siquiera él entiende.

Pagan no es un ángel. No es un demonio. No es la respuesta a sus dudas, pero es parte de ellas. Un ser de entre los mundos, un guardián que lo conoce de formas que Lucas no puede recordar, pero que ella sí. Y aunque él está seguro de que nada más allá de él mismo puede tocar su vida, Pagan está allí. Y con ella llega la verdad: que Lucas Blake no es tan humano como cree, ni su destino tan simple como parece.

El juego entre ellos es inevitable, pero lo que él no sabe es que el mayor desafío no será resistirse a ella, sino entender por qué el universo lo eligió a él, por qué su alma está tan entrelazada con la de Pagan y cómo sus destinos están conectados por algo mucho más antiguo que cualquier creencia o religión. El tiempo no se mide en horas, sino en vidas, y Lucas ya ha vivido muchas antes.

Lo que está a punto de descubrir es que no todo se trata de lucha, ni de resistir lo que no se puede ver. A veces, lo peor que uno puede hacer es no aceptar la verdad.

Y Pagan está aquí para asegurarse de que lo haga.

________________________________________________________________

Hola! Les presento mi nuevo proyecto. Es la primera vez que me animo a escribir algo de este estilo y la verdad espero que les guste.

QUEDA TERMINANTEMENTE PROHIBIDA SU COPIA O ADAPTACIÓN.

Deseo de todo corazón que disfruten la lectura.

Besos.

Pau.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.