No soy esa mujer

❦ ✿ CAPÍTULO 3 ❦ ✿

MATTHEW.

—Con que Tara, veremos si me aguantas, en unos días te irás huyendo de Corporaciones DECLA —sonrió.

Me vuelvo a sentar para así seguir con mi trabajo…

—Señor —dice entrando mi chófer. —Ya deje a la señorita Bower, en el apartamento que me dijo, le dije que pasaré por ella mañana —Asiento.

—Ya sabes que hacer.

—Señor yo no puedo hacer lo que usted me pide.

—Es una orden Henry, quiero ver que tan responsable es la señorita Bower, solo eso, mañana te ocuparas de otra cosa.

—Está bien señor, con permiso.

Tomo mi saco y salgo de la oficina, creo que esta noche seré juicioso…

Al llegar a mi apartamento me despojó de mi ropa y me meto a la ducha. Para minutos después preparar mi cena, al terminar me siento frente al ordenador, tengo que seguir trabajando…

Al día siguiente me levanto temprano para hacer mi rutina matutina, después de hacer ejercicio me preparo para ir al trabajo, quiero ver como se las arregla la espía qué envío mi padre para llegar a la oficina.

Subo a mi auto y conduzco al edificio donde esta ubicada corporaciones DECLA. Al llegar al estacionamiento me dirijo a mi oficina.

Ya le he pedido al seguridad que le de una cálida bienvenida a la intrusa. Espero pacientemente por ella hasta que el teléfono suena.

—Si —digo al tomarlo.

—Señor ya llego —alejo el teléfono de mi oído al escuchar el escándalo.

Con toda la paciencia acomodo mi saco y voy al elevador, bajo hasta la planta baja, miro mi reloj, tiene cinco minutos de retraso. Las puertas se abren y lo único que se escucha son voces.

—Soy Tara Bower, la nueva…

—Lo siento señorita, pero no se nos fue anunciado la llegada de ningún gerente, por lo tanto no puedo permitirle el paso —le comunica Iliam el seguridad. —Señorita por favor es mejor que se retire.

—No me voy, quiero hablar con el CEO.

—Señorita por favor se lo vuelvo a reiterar si algún nuevo gerente hubiera sido nombrado nosotros seríamos los primeros en enterarnos.

—Así es señorita.

—No me interesa si son los primeros o los últimos, comunicate de inmediato con el CEO, Matthew Declan —es exigente la mujercita y tiene temperamento.

Camino hacia la recepción creo que ya es suficiente escándalo por la mañana.

—No es necesario que lo hagas Leisy —miro a la mujer que me mira fijamente.

—Supongo que es usted el CEO.

—Llega diez minutos tardes, señorita Bower, pensé que el señor Ackerman, mandaría a alguien eficiente, puntual, responsable y comprometido con su trabajo —ella sonríe.

—Por supuesto señor Declan, le debo una disculpa por mi ineficiencia y mi impuntualidad, pero esto no hubiera pasado si al menos el dichoso chófer qué mando ayer me hubiera dado la dirección y me hubiera evitado un dolor de cabeza si no se hubiera comprometido en recogerme a cierta hora, pero no le voy a culpar le aseguro que esto no pasará nuevamente.

—Estoy en duda, pero como es su primer día y el cambio de horario todo eso perjudica le daré un voto de confianza.

—Oh se lo agradezco mucho señor Declan, le estoy muy agradecida por ese voto de confianza —dice con cara de pocos amigos. —se que no me quiere aquí y créame tampoco quiero estar aquí, pero al parecer al señor Ackerman, le pareció buena idea así que tendrá que soportarme —habla de forma ozca.

—Espero que su estancia sea placentera —mencionó para que sienta más agravio.

—Ya lo está siendo, será que me muestra mi área de trabajo o también debo entrar en pleito con alguien más —creo que será una buena batalla.

—Oh cómo lo olvide por favor sígame —extiendo mi mano hacia el ascensor, marco el último piso, al llegar las puertas se abren, salgo primero. —por aquí —le indico. —Esta será su oficina, usted disculpe el desorden, pero como fue tan repentina su llegada no tuve tiempo de pedir que le ordenarán la oficina.

—Por supuesto era de esperar —dice haciendo ademanes con su mano. —No espere una cálida bienvenida de su parte, recibí su mensaje señor Matthew —saca las carpetas de un bolso y las tira contra el escritorio. —usted haga su trabajo que yo me encargo del mío —me mira sería y cruza sus manos a la altura de sus pecho.

—Bien, será mejor que se instale, en media hora la quiero en mi oficina necesito discutir ciertos detalles con usted.

—Como usted diga señor —salgo de su oficina.

Sonrió al salir, será una excelente batalla…

TARA.

Casi no dormí absolutamente nada, y cuando no duermo bien soy un desastre y mi humor es de un ogro, me preparo para ir a Corporaciones DECLAN, bajo a la planta baja y espero por el chófer que según venía por mí.

Llevo más de tres minutos esperando y el hombre nada que aparece, en mi móvil busco la dirección de Corporaciones DECLAN, al tenerla detengo un taxi, lo que más detesto es esperar. Al llegar a paso directo a recepción.

—Buenos días, soy Tara Bower la nueva gerente —la chica me mira de pies a cabeza.

—¿Nueva gerente? —pregunta confundida.

—Sí —estoy tratando de ser amable, aunque mi genio matutino y de descansar bien quiere salir a flote.

—Lo siento señorita pero no tengo nada de alguna Tara y mucho menos de algún nuevo gerente.

—Sucede algo Leisy —pregunta un hombre que al parecer es seguridad.

—La señorita aquí presente creo que se confundió de empresa, dice que es la nueva gerente —habla con tono de burla.

—¿Acaso esta no es Corporaciones DECLAN? —levanto la voz por la irritación que me cargo encima.

—Sí lo es.

—Entonces no hables con ese tontito de burla, que no estoy perdida ni mucho menos me estoy inventando nada —le hablo sería, mi termómetro de irritabilidad esta llegando al tope.

—¿Cómo dijo que es su nombre? —pregunta el hombre.

—Soy Tara Bower, la nueva… —no me deja terminar.

—Lo siento señorita, pero no se nos fue anunciado la llegada de ningún gerente, por lo tanto no puedo permitirle el paso —me comunica el hombre.




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