Capítulo 2. No es fácil olvidar

Teddy Lupin

Agosto, 2008
" Mi pequeña, dulce e inocente pelirroja, desde el primer día que te vi, después de haber nacido y yo tener diez años, sentí una conexión especial, tenías pequeños mechones de cabello rojo sobre tu pequeña cabecita, tu piel rosada, cachetes gorditos, que hasta ganas de comerlos daba, abriste tus hermosos ojos, que resultaron ser una combinación de verde y ámbar, me miraste y lo primero que hiciste fue sonreír, al instante mi pelo se volvió rojo cuando tú lo tocaste, eso es lo que provocas en mí."

Recuerda ese día como si fuera hoy.

Desde pequeños fueron inseparables.

Pero eso se terminó, después de lo que hizo.

Dejarla sola...

Sabe que no tiene perdón por haberse separado de ella de la forma en la que lo hizo y lamenta haberlo hecho, pero fue lo mejor para evitar que le ocurriera algo.

Sin embargo, ella sufrió las consecuencias de sus acciones.

Lily Potter

Aunque fuera sencillo amar, era imposible olvidar.

Tanto tiempo sin verlo y todavía seguían con lo mismo, tratar de evitar a las personas. Eso la convierte en una cobarde, debería de enfrentar los hechos, sólo que le duele mucho aún después de tanto tiempo.

—Amor, ¿En qué estás pensando? Te he perdido por un segundo.

—Lo siento Scorp, sólo estoy un poco cansada, no he podido dormir mucho —comenta mientras Scorpius se pone detrás de la cama y empieza a masajearle los hombros.

—Estás muy tensa, relájate y cuéntame que es lo que te preocupa.

—Es un paciente —mencionó mientras agacha la cabeza, no estaba mintiendo del todo.

—Sí? Y ¿Qué le ocurre?

—Este paciente es sólo un pequeño de tres años que sufre de Viruela de Dragón, presenta sarpullido en toda su piel y parece no mejorar. Para empeorar las cosas ha tenido que estar en cuarentena, porque sólo con un simple estornudo se contagia. En verdad me preocupa, este pequeño no ha podido tener una vida como cualquier otro niño, y para rematar, sus padres apenas pueden pagar la consulta Scorp.

Estaba nostálgica, no era fácil tratar con pequeños a menudo solía desarrollar lazos con los pacientes, pero sentía que esa era su vocación, tratar de encontrar la forma en la que se mejoraran.

Scorpius Malfoy

—Lil —dijo mientras la abrazaba, desde ayer que llegó la ha visto muy melancólica.

—Ese niño desde pequeño ha estado en el hospital, es muy vulnerable su sistema inmunológico a enfermar. Me temo que ya no le queda mucho tiempo de vida —terminó afligida mientras suspiraba y se sentaba en la cama.

—Y no hay alguna cura? —pregunta al mismo tiempo que se sienta detrás de ella, envolvía sus brazos en su cintura y apoyó su cabeza en el hombro de ella.

—Parece que la enfermedad se resiste y se encuentra muy débil.

—Debe haber algo Lil, yo sé que lograrás ayudarlo.

—De verdad que me encantaría que tus palabras se volvieran real —dijo mientras lo vio con ojos llorosos.

Lily siempre ha sido muy susceptible con los niños desde que tenía memoria.

—Lo lograrás, confío en que si lo harás.

—Gracias, Scor —dijo mientras se volteaba y lo abrazaba.

—Sabes, te tengo una sorpresa, terminamos de comer lo que he preparado y te lo doy —le dijo sin separar el abrazo, mientras veía que se le empezaba a formar una pequeña sonrisa.

—No sólo me proteges y me haces feliz, sino que también me preparas la comida, no sé qué hice para merecerte —Lily alzó la cabeza al decirlo.

—Ser amable, humilde, paciente, tener un corazón hermoso con las demás personas y hay muchísimas más cualidades que me enamoraron, pero creo que esas son las principales.

—Te amo mucho, me alegra que al fin regresaras —apretaba aún más el abrazo.

—Yo también te amo, no tienes idea de cuánto ansié el momento en que regresara a ti.

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A la mitad de la comida, alguien tocó el timbre de su casa.

En ese momento se levantó, sabía que la persona que le traería la sorpresa ya había llegado.

Abrió la puerta rápido y metió la caja de regalo que estaba en la puerta.

Se volteó para entregarle la caja a Lily.

Lily Potter                                       

No tenía idea de que era lo que estaba dentro de la enorme caja, sólo se dio cuenta que tenía unos cuantos huecos en los lados y que al parecer era un poco pesada.

—Este es un regalo adelantado de nuestro sexto aniversario de pareja, sé que no tuvimos mucho la oportunidad de vernos estos últimos dos años, pero en todo este tiempo contigo me he encariñado y enamorado de ti. Espero que en este tiempo que tendré más libre me permitas crear aún más buenos recuerdos contigo. Te amo y espero que te guste el regalo —le entregó la caja.