Capítulo 69

- Hyung, ¿estás bien? - Beomgyu detuvo la música en cuanto Taehyun dejó de bailar.

Heeseung también se detuvo, girando a ver a su amigo. Aunque había notado que sus movimientos eran un poco torpes, supuso que el de cabello ceniza sólo estaba teniendo un inicio difícil. Sin embargo, ahora que estaba de cuclillas mientras presionaba su estómago con fuerza, se sintió mal por haber dejado pasar su cambio.

- Me duele mucho. - Dijo de manera lastimera. - Lo siento mucho, chicos. - Y les miró tristón.

- Eso es porque tú sigues comiendo mal durante el almuerzo. - Lo regañó Beomgyu, ayudándolo a levantarse.

- ¿Deberíamos llevarte a enfermería? - Heeseung se dirigió a su bolso, comenzando a guardar sus pertenencias. - Vamos, quizás tengan algo ahí.

- ¿Qué dices? Estamos fuera del horario escolar, ella ya debió terminar su turno. - Rió, quejándose cuando Beomgyu disimuladamente le dió un fuerte codazo. - ¡Ah! - Gimoteó. Heeseung giró a verle preocupado. - Yo... creo que mejor volveré a casa por hoy, ¿sí?

- Está bien, te iré a dejar a tu casa. - Heeseung levantó ambos bolsos. Beomgyu negó rápidamente con la cabeza.

- Hyung, tienes que trabajar hoy, ¿no? - El pelinegro frunció su ceño.

- No, cambié mi turno para estudiar más tarde con tu hermano. - Lo tranquilizó con una sonrisa. - Iré a dejar a Taehyun y luego volveré, ¿sí? - Intentó tomar el brazo de su amigo.

- ¡Ah! ¡¿Pero qué pasa si te atrasas?! - Beomgyu se echó hacia atrás, aún sosteniendo a Taehyun. - No te preocupes, hyung, yo llevaré a Taehyun y pasaré a una farmacia para comprar algo para el dolor, ¿sí? Y cocinaré algo para él también, ¡necesita comer algo sano! - Heeseung comenzó a vacilar. - ¿Podrás hacer todo eso con tu tiempo disponible?

- Supongo que no. - Admitió. - Pero, Beomgyu, ¿no tenías que ir con tu hermano y Huening Kai después de esto?

- ¿Hmm? No importa realmente, lo tuyo es por mucho una prioridad. - Le miró con empatía. - Hyung, estabas diciendo que tenías dudas respecto a unos problemas, ¿no? Quizás deberías ir donde mi hermano ahora y preguntarle, ¡de paso le avisas que no podré ir al ensayo de hoy!

- Beomgyu... - El castaño reunió rápidamente sus pertenencias, llevando su bolso a su hombro para luego arrebatarle el de Taehyun a Heeseung. - Tú estás muy preocupado por él, ¿no?

- ¡Mucho! - Giró a ver al de cabello ceniza que parecía querer golpear su cara contra una pared. - Hyung, ¿debería llevarte en mi espalda?

- Beomgyu-ah, ¿al menos me dejaras algo de orgullo? - Beomgyu sonrió como un niño caprichoso, tomándolo del brazo para ayudarlo a caminar. - ¡No me estoy muriendo!

- Heeseung hyung, estudia mucho, ¿sí? - Le dedicó una breve mirada. - Te avisaré cuando Tae esté sano y salvo en su casa.

Heeseung abrió la boca, queriendo como mínimo agradecerle por su preocupación, pero Beomgyu ya se encontraba arrastrando a Taehyun lejos del lugar. Cuando ambos chicos estuvieron fuera de la vista del pelinegro, Taehyun no tardó en empujar al castaño para luego quitarle su bolso.

- ¿Qué es eso? ¿Por qué acabas de actuar como si fuera a tener un bebé? - Le golpeó con su bolso deportivo, comenzando a caminar hacia las escaleras.

- ¿Jesús viene en camino?

- Realmente... - Se quejó, mirándole como un fenómeno. - Tú no necesitabas ser tan dramático, ¿sí? Si preocupas demasiado a Hee, él terminara por dejar sus estudios de lado sólo para ir a comprobar que yo esté bien.

- Pero estás en buenas manos. - Beomgyu bajó rápidamente las escaleras, adelantándose para voltear a verle con una gran sonrisa. - Esto es genial. ¡Es primera vez que iré a comprar un regalo para un amigo con alguien más!

Taehyun le miró fijamente, sonriendo enternecido al reparar en la dicha en sus ojos. Pasó por su lado, golpeando ligeramente su brazo para que le siguiera e ignoró los latidos de su corazón que rogaban por más. Eso estaba bien, ellos estaban bien de ese modo. Él definitivamente aprendería a ser sólo su amigo. Después de todo, sólo ser el amigo de Beomgyu ya parecía un puesto por mucho excepcional.

- De todas formas, ¿crees que puedan tener las chaquetas de aquí a la próxima semana? - Taehyun rió ligeramente, envolviendo su brazo.

- Creo que debes saberlo mejor que yo, ¡con un poco más de dinero definitivamente se hacen milagros!

- De hecho... - Beomgyu sonrió de soslayo. - Ojalá que Heeseung hyung tenga un buen cumpleaños. - Miró hacia el frente. - Mañana irás con Yeonjun a su casa, ¿no? Espero que tengan suerte con su madre.

Taehyun asintió suavemente, observando el camino con cierto malestar. De verdad necesitaría de toda la suerte del mundo.

***

Huening Kai observaba su reloj antes de volver a las piezas del piano. Aún quedaban 50 minutos para que la práctica de Beomgyu acabara y, considerando el tiempo perdido en los vestuarios, posiblemente no le vería hasta dentro de una hora. Suspiró y frotó sus ojos, un tanto somnoliento, y alzó la vista cuando escuchó una puerta abrirse. Soobin cargaba una bandeja con 3 tazas y él se obligó a sí mismo a no sonreír cuando el pelimorado le extendió una en su dirección.

- Café negro sin azúcar. - Dijo. - Pensé que lo necesitarías. - Era simplemente horrible la manera en que lo conocía tan bien.

Huening Kai recibió la taza, llevándola prontamente a sus labios, y el pelimorado depositó la bandeja en un escritorio mientras miraba hacia todas partes.

- ¿Mi hermano aún no llega? - Soobin tomó su taza, sentándose junto al menor.

- Soobin, creo que te adelantaste una hora. - El mayor giró a verle rápidamente, consternado.

- ¿Cómo que una hora? - Revisó su reloj de pulsera. - He quedado con Heeseung para estudiar después de esto, ¿entonces a qué hora lo he citado? - Comenzó a hacer cálculos mentales, cada vez más confundido.

- Ash... - Huening Kai dio un golpecito en su sien, llamando su atención. - Andas demasiado distraído estos días. ¿No estás trabajando demasiado? - Soobin sonrió suavemente, negando con la cabeza para luego llevar la taza a sus labios. - ¿Por qué sonríes de esa manera?