Quien diría que así terminaría, no? Los dos viéndonos fijamente mientras personas desconocidas pasan con maletas a nuestro alrededor, la típica escena cliché de las películas románticas.
-Ye iras sin decir nada?
Fue lo único que pudo salir de mi boca mientras que lagrimas resbalaban por mis mejillas, ella solo me dio una sonrisa sincera y tan dulce que no me lo podía perdonar, mi corazón se rompia cada vez más