Capitulo 5

—¿Solo fue eso lo ocurrido verdad?

—Sí, así fue pequeña, ¿Qué te parece si nos vemos hoy a las 4:30 PM en el quiosco del parque?

—Ahí estaré, eso es muy seguro mi amor, ¡ahí te veo!

—Adiós pequeña.

—Adiós mi amor.

Fin de la llamada

Me fui a bañar para ir a visitar a mi amiga Romí, aún era temprano y quería ir de compras con ella, escogí mi atuendo antes de bañarme el cual constaba de una falda corta guinda con varios cuadros negros, unas calcetas negras, una blusa blanca de tirantes y unas zapatillas negras.

Estaba bañándome cuando recordé algo muy importante de lo del día anterior, ¿por qué mi ropa estaba rota?, tal vez me caí pensé, no lo creo o si será posible.

Salí de ducharme me vestí, tomé dinero y mi celular. Mientras iba en el transporte saque mis audífonos de una de las bolsas de mi pantalón, escuchar música mientras llegaba a mi destino hacía que se redujera el tiempo más fácilmente para mí, la casa de Romí estaba lejos así que se reprodujo la primera canción de mi lista la cual es "Ahora lloras tu" de Anna Mena.

Se terminó la canción y empezó algo desconocido para mí era una nota de voz de un hombre y eso no es lo peor, yo nunca grabe eso, no conozco a la persona que lo grabo y habla de cosas sin sentido y otras que podrían tener cierta razón en él, lo que decía la nota es:

Nota de voz

Hola dulce, soy Neith vengo de otro planeta y estoy destinado a no volver a mi forma humana así que te protegeré de quien sea, yo soy Galletita tu querido gato...

Tu novio no es lo que aparenta ten cuidado el trato de abusar de ti el día de ayer por la noche entre las 8:40 PM - 9:00 PM cuando te encontrabas en el antro.

P.D Neith

Me dio pánico escuchar esa nota porque efectivamente si había estado en un antro, "¿alguien me ha estado persiguiendo?", lo cual también se me hizo muy raro que la nota dijera que trataron abusar de mí. Por otra parte, se me hizo muy ridícula la parte que decía que él era mi gato.

Me quede pensando en sí debería de tomarle importancia o no.

Narra Neith

Posteriormente de haber salido con ella de casa me acosté al lado de ella en uno de los asientos me quede dormido por un momento, cuando me desperté note que Dulce tenía su mirada como si hubiera visto un espíritu, roce mi mano con la de ella para que no adquiriera más temor. Ella dirigió su mirada había a mí y me abrazo, estaba demasiado cómodo entre sus brazos que no quería que me soltara.

Bajamos del transporte y ella toco el timbre de la casa de su amiga Romi.Enseguida abrió Romí la puerta.

—¡Hola! ¿Cómo estas Dulce?

—Estoy muy bien solo un poco desconcertada —hablo con temor.

—Antes que nada, primero pasa Dulce —sonrió y entro hasta el final—.

—Ahora si, dime, ¿por qué dices eso? ¿qué paso?

—Encontré una nota de voz extraña en mi teléfono

—¿Nota de voz?

—Sí, deja te muestro, espera deja el encuentro.

Comenzó a buscar en su teléfono, me di cuenta que hablaba de mi grabación o ¿qué más podría ser?

—Ya la encontré, escucha...

—Wow, ¿Qué es todo eso? ¿acaso es una broma? —dijo Romí después de escuchar el audio.

—Eso no es lo peor.

—¿Entonces qué es lo peor?

—Estuve en un antro con Christian, tome solo agua porque no quería embriagarme, pero al parecer termine embriagarme y al día siguiente amanecí en mi cuarto con la ropa desgarrada, esas son las horas de las cuales no tengo conciencia, la verdad es que no recuerdo si es verdad lo de la nota o no, además Christian no sería capaz de abusar de mí, pero... ¿quién tomo mi teléfono y grabo eso?

—Siento lo que voy a decir, pero...estas en lo incorrecto, si dices que estuviste con mi hermano en el antro el único que pudo tomar tu teléfono fue el.

—¿Estás diciendo que crees que tu hermano me tendió una broma?

—Así es, mejor termina con mi hermano, él no te merece.

—También pensé lo mismo que tú.

—¿Qué de todo de lo que hablamos?

—Que Christian me hizo una broma muy pesada.

—Deberías de hablar con él.

—Tienes razón, por la tarde tendré una cita con el así que poder hablar seriamente de esta broma de mal gusto

Sabía que sus pensamientos eran muy erróneos, pero, me agradaba la idea de que ella empezara a desconfiar de él porque así podría quitárselo ella misma de encima sin ningún esfuerzo de mi parte.