Capítulo III

No es por halagarme pero mis hamburguesas habían salido muy ricas la verdad, hace mucho tenía ganas de comer alguna comida con mucho cheddar. Era uno de mis quesos favoritos pero que no comía con frecuencia.

Luego de levantar la mesa, mientra mamá lavaba los platos y mis hermanos jugaban a un juego de mesa junto con papá, me dirigí a mi habitación para ya poder acostarme y charlar con mis amigas, había pasado solo un día desde que no las veía y ya las extrañaba demasiado, estamos juntas en la misma clase pero por razones obvias no nos sentábamos en grupo, según nuestros profesores hablábamos demasiado y nunca prestábamos atención pero sin embargo nuestro promedio no era el peor, nuestro grupo consistía, en Kate; pelirroja con ojos color verde extraordinariamente buena y simpática y obviamente mi mejor amiga. Michelle Anderson; la típica chica que tiene a todo el  mundo a sus pies, viste de lo mejor y dedica su vida al baile, también está Gina, la mejor amiga de Michi, son muy unidas bueno al menos cuando no se trata de hombres, Ella&Erin eran gemelas, eran parte de nuestro grupo pero no compartían lo suficiente con nosotras cómo para llamarlas mejores amigas, eran muy discretas y muy cerradas con todos.

Hablando de amigas debería contarles de aquél chico que me crucé, era lindo pero tampoco para sacar suspiros, se me hacía bastante conocido. Me quedé el resto de la noche pensando en ese chico, ¿Quien era?. Estaba muy hundida en mis pensamientos hasta que escuché un grito, probablemente Isaac. Bajé corriendo las escaleras y me encontré con mamá y papá con escobas? sí efectivamente eran escobas, entre tantos gritos escuché la palabra rata y no dudé ni un segundo en subirme a la mesa, no hay nada peor que las ratas ¡Diug!.                                          

  Era muy gracioso ver cómo trataban de atraparla y más cuando se le acercaba papá ya que este salía corriendo o gritaba, pobre rata pensé debe de haber quedado sorda. igual que dios la tenga en la gloría por que le pegaron una paliza y salió corriendo por el patio.                       

Después de dicho espectáculo subí a mi cuarto para ya ir a dormir, estaba cansada de literalmente no hacer nada en todo el día.

Qué linda manera de despertar un domingo, los gritos de mamá eran una buena alarma.

-Crystal ¿puedes levantarte? Necesito ir a comprar trampas para roedores y también veneno- Dijo con simplicidad. Que cruel pensé.

-Es muy temprano, déjame dormir.- Dije tapándome la cabeza con la sabana otra vez.

- Son las doce del mediodía, ¡es mucho más que tarde!.-Exclamó .

- Dame cinco minutos y me lavanto.

Bueno me daré una ducha, me arreglaré un poco, total iba al supermercado no a un desfile de moda.Camino hacia el supermercado vi una perrita con sus cachorros, decidí bajarme y comprobar que estén bien.

Después de hacer una fila de aproximadamente 15 minutos para pagar volvimos a casa con todo lo necesario para atrapar a la pobre rata. Colocamos las cosas en la mesada para empezar a poner las trampas, pero antes de colocar la primera trampa escuchamos a Daniel llamándonos desde el patio.

-Encontré la rata, bueno las ratas mejor dicho- Dijo apresurado.

Fuimos corriendo hasta el patio trasero y nos encontramos con dos ratas gigantes, en la piscina, ahogadas. Me dieron mucha lástima pero a la vez asco, mi hermano las saco con el recojehojas e hicimos dos pequeñas tumbas para enterrarlas de forma digna.

Comimos, jugamos unos cuantos juegos de mesa e hicimos un típico domigo familiar.

El resto de la semana pasó bastante rápido. así por finalmente  llegando al fin de semana. Había quedado con kate para ir a su casa para preparnos para ir a la fiesta, ya tenía mi bolso para el resto del fin de semana, junto con mí maquillaje y demás.Iba camino a casa de mi mejor amiga, estaba escuchando one direction, iba cantantando y bailando en mi asiento hasta llegar a nuestro destino.

Abracé a mi mejor amiga en forma de saludo para así luego pasar a su casa y subir a su cuarto, la verdad me gusta mucho su casa, me siento muy cómoda pero sus padres no me agradan mucho, mejor dicho su padre. Es el típico hombre machista y homofobico que todo le parece mal, Marilla es una mujer muy simpática y con buen sentido del humor.

Subiendo las escaleras ví al hermano de kate, Ethan realmente era muy lindo pero no era mi tipo, un golpe me sacó de mis pensamientos. Me había tropezado con un escalón por mirar a Ethan, que vergüenza. Me estaba mirando, lo único que pude hacer era dedicarle un sonrisa, así que eso hice, hice una sonrisa bastante tímida y forzada.

- Tu hermano ha cambiado mucho en estos últimos tiempos-dije adentrándome a la habitación.

-¿Te gusta mi hermano Crystal?- preguntó horrorizada.

- ¿Qué? NO.- Abrí mis ojos en señal de asombro.

Me miró como si hubiese visto un fantasma, finalizando la charla con un bueno bastante confuso. 

 Empezamos a probarnos oufits para la noche mientras nos sacábamos fotos para luego decidir que nos pondríamos. Estuvimos aproximadamente dos horas entre maquillajes y peinados hasta que por fin decidimos que nos ibamos a poner. Empezamos por el maquillaje y luego seguimos por los vestidos.

Estabamos a punto de salir para dirigirnos a la fiesta hasta que suena mi celular, era mamá.

-Hola hija ¿ya están yendo a la fiesta?- preguntó.

- Hola ma, justo estabamos por subir al auto.¿ pasa algo?..

-No, solo quería saber la dirección y de quien es la fiesta.

- Es es Ethan un chico de la escuela y es en mismo lugar de todas las fiestas mamá.

- ¿Donde es el mismo lugar de siempre Crystal?- dijo un poco enojada.

- Blowell street 678 mamá.-contesté un poco irritada.

- Está bien hija cuidense.- Dijo despidiendose, eso me dió señal de que ya debía cortar, así qué me despedí con un chau mamá y corté la llamada.