Capitulo 75

—¿tu novia? —el cerebro de Layla quería explotar ¿Por qué esa mujer quería matar a Claus? ¿trabaja sola? Vera quería decir más, pero no logro hacerlo.

—ex novia —fue como un recuerdo de que su situación con el hombre a su lado es seria.

—Vera trabajaba para tu ex —Claus la miro y se notaba que no le creía.

—no lo entiendo… no creo eso de ella. Escuchaste mal —Layla suspiro, sus sospechas confirmadas y ahora ella también tenía una pequeña duda en su mente.

—créeme si hay algo que no hice fue escuchar mal, ella lo menciono —refuto pues no dejaba de escuchar en su mente las palabras de Vera igual que las de Cecilia en su momento.

—pues te mintió —Layla frunció el ceño.

—no lo hizo… fue mi amiga —me mantuvo firme apretando los puños sobre la mesa.

—pues tu amiga te mintió —Layla le miro un momento más antes de apartar la mirada.

—ella no quería que yo muriera —quería creer en Vera, no le había mentido, lo vio en sus ojos cuando se dio cuenta que Layla podía leerla mejor de lo que ella creía, la conocía.

—¿a no? —la sonrisa en los labios de Claus se extendió.

—su plan era que yo estuviera allí, tal vez ellos me llevarían con ella —dijo lo que en su mente durante dos días pensó, la pequeña posibilidad de ser secuestrada solo para atrapar a Claus.

—te iban a secuestrar —el gruñido llego incluso de Hades a su lado quien solo los miraba a ambos sin siquiera ladrar.

—saben que sientes algo por mí —hubo un largo silencio en el cual Layla no sabía si sentirse aliviada o dolida.

—y aun así quieres seguir saliendo de esta casa —le reprocho viendo como Layla se levantaba de la silla.

—¿vas a encerrarme aquí de nuevo? —pregunto sorprendida.

—si con eso te mantengo a salvo, si —Layla lo miro sin creerlo.

—no le crees a Vera ¿cierto? Que tu ex este detrás de esto —y de nuevo un largo silencio, Layla tomo su plato de comida y se lo coloco a Hades en el suelo, este cuando ella lo soltó comenzó a comerlo rápido.

—Emilia no es capaz de eso

—es capaz de golpearme en el hospital y en una joyería, pero no es capaz de intentar matarte quien sabe porque —la mirada de incredulidad de la mujer lo hizo dudar, pero volvió a mantenerse firme.

—Alonzo solo quiso crear una distracción.

—dios no me estas escuchando, ella sabía que iba a morir —Layla se quedó callada y Claus lo supo, no le estaba diciendo todo, ella se giró para irse.

—que más te dijo ¿te enseño a mentir? —Layla ofendida se giró y volvió a acercarse rápidamente, Claus sorprendido por lo enojada que lucía la mujer se removió en la silla.

—si quieres saberlo, me dijo que me fuera de aquí… —Claus la miro sorprendido —nos mataras a todos Claus, todo por tu terquedad — la mujer tomo una cesta con frutas de la mesa y se marchó, Hades solo ladro y se quedó al lado de su amo.

—¿tu estas de su lado? —el perro solo lo miro y movió su cabeza colocando la pata sobre el muslo de su amo.

Claus le acaricio la cabeza.

—chico… lo que ella dice no tiene sentido, Emilia es muy presumida ¿tú le crees Mateo? —el hombre salió de entre las sombras.

—averiguare que es lo que trama y si la Señorita Ortiz tiene razón…

—si la tiene, entonces Emilia no trabaja sola —Mateo solo hizo un asentimiento y volvió a desaparecer.

Hades se quedó recibiendo caricias de Claus.