Capitulo 94

La mujer en la cama comenzó a ahogarse intentando respirar por su cuenta, las alertas a su alrededor se activaron y la habitación se llenó de enfermeras y médicos rápidamente.

El hombre corrió por el pasillo del edificio hasta la sala de juntas donde un hombre visiblemente mayor estaba hablando de manera acalorada hasta que vio al hombre de gafas oscuras entrar.

—señor, ella despertó —murmuro al oído de su jefe y este solo sonrió.

—bien, señores, esta reunión se acabó —el hombre mayor intento decir algo, pero las palabras murieron en su boca viendo como el dueño de la compañía salía de la habitación junto a su asistente.

—¿Cómo está? —pregunto apenas entraron al elevador ellos solos.

—no lo sé, el doctor me acaba de llamar diciendo que se despertó de golpe —el hombre miro a su asistente con una ceja levantada.

—bien, vayamos a ver cómo está la cuñadita —al salir del ascensor se dirigieron directamente al auto rumbo al hospital.

Habían pasado tres semanas desde que Layla había sufrido el accidente, le avisaron antes de la cena de un incidente en la frontera sur, de dos autos que explotaron y solo quedaba una sobreviviente.

Dominico se había puesto en contacto con su asistente Frey para mencionarle que su familia necesitaba protección de Claus Makris, pero no solo su familia, la mujer que sin querer acabo en las manos de Claus, Layla.

La historia por increíble que le pareciera no le hacía entender porque Claus se había obsesionado con tal mujer al punto de que esta acabaría en peligro por su paranoia.

Estaba al tanto de la vida del hombre que una vez fue su amigo, pero solo eso, sabia las historias que contaba la gente, incluso gente mala que él tuvo que dar asilo por conveniencia y cuando se aburría simplemente los sacaba de su vida.

Averiguo todo lo que necesitaba de Layla gracias a su celular y vida en línea, su español oxidado le hizo comprender que la mujer no tenía una vida tan difícil como para acabar en manos de Claus, había escuchado los audios, las conversaciones y mirado las fotografías que tenía en el celular, le sorprendió que fuera encantadora pero aun veía la inocencia en los ojos en las fotos.

Noto que ella no tenía muchas fotos de ella después que se involucró con Claus y lo que lo termino de mantener interesado fue el hecho de ver un rostro familiar en las fotografías y videos.

Un gran perro de pelaje negro y ojos de diferente color.

Hades.

El perro se veía viejo y cansado, pero cuando Layla lo llamaba aun movía la cola y sonreía sacando la lengua, descansando en el regazo de la mujer o encima de la cama de la misma. Se veía el cariño que la mujer le tenía al perro incluso en los videos donde se bañaba con el mismo colocándole un gorro de tina mientras estaban dentro de un jacuzzi con demasiada espuma y ella bebía de una copa de vino.

Lo que le parecía extraño es que de fondo de pantalla tenía una foto con otro hombre abrazados y este lucía mayor que ella y ella muy hermosa con un vestido de flores azul con apertura en la pierna.

Su asistenta abrió la puerta del auto despertando de sus pensamientos a su jefe.

Cuando subieron hasta la habitación donde habían pasado a la mujer el doctor estaba saliendo de allí con una expresión preocupada en su rostro.

—Doctor, como esta nuestra paciente —el hombre que había sonreído se le borro la sonrisa cuando vio la expresión del doctor, su rostro se volvió serio.

—lo siento señor Vasile… pero no creo que ella le pueda decir algo ahora —Stefan entreabrió la puerta viendo como la mujer miraba el vendaje de su brazo y se quejaba bajito, cuando intentaba levantar el brazo para tocarse la pequeña venda en su cabello largo.

—¿Qué tiene?

—no recuerda nada —el doctor hizo una pausa y Stefan sabía que algo más diría que él ya estaba pensando —desde hace un año

—¿todo un año? —miro con incredulidad al doctor.

—sí, todo un año desapareció de su memoria, y solo está preguntando por un Enzo Venturi —Stefan miro a su asistente y luego volvió a mirar por la pequeña rendija de la habitación para cerrar la puerta.

—consigue a ese hombre y a este —Frey asintió cuando si jefe saco de su saco el celular con el forro naranja y vio la foto del hombre junto a la mujer de fondo de pantalla, para luego alejarse.