No te esperaba

Capitulo 215

—mami ¿estas bien? —el tono de voz preocupado sumado al ladrido de Kay hizo sobresaltar a Layla, se habia despertado adolorida de la cintura para abajo y apenas podía con el dolor de ir al baño a hacer pis.

—si, estoy bien —dijo con una sonrisa sin percatarse que en ese momento un liquito tibio comenzó a

—mami… te orinaste —Tabitha se rio, pero la expresión de Layla era de asombro, aun faltaban dos semanas para que la internaran en la clínica para la cesarea, no podía romper fuente ahora.

—llama a Claus —dijo con urgencia intentando mantener la calma sin querer moverse.

—papi acaba de salir… —Dijo confundida Davida mirando el semblante de su madre

—pues llama a al tio Frey o al tio Mateo ¿si? —Tabitha entendio la urgencia y salio corriendo.

Kay comenzó a olfatear las sandalias de Layla y luego cerca de la entrepierna, el gran lobo sabia que algo pasaba.

Los pasos rapidos de Stefan se escucharon por toda la casa hasta que apareció por el umbral de la puerta con ojos preocupados mirando el pequeño charco de sangre.

—¡el auto! —le grito alguien a sus espaldas y luego corrió hacia Layla tomándole las manos. —¿estas bien? ¿sientes dolor? —Layla negó varias veces y Stefan la cargo rápido.

—¿Qué tiene mami? —Pregunto ahora asustada Davida al ver la situación.

—nada malo cariño, pero tus hermanitos van a nacer —Davida abrió los ojos con sorpresa, una de las empleadas apareció rápidamente mirando la situación. —Cuida de las niñas —La mujer solo asintió y las pequeñas solo vieron como su tio se llevaba a su madre en brazos hacia afuera.

—pero… quiero ir —Davida intento correr, pero la mujer la siguió tomándola de la mano y luego a Tabitha.

—tranquilas, su mamá estará bien —intento consolarlas, pero las niñas solo vieron como Stefan se llevaba en el auto rápidamente a su madre.

En el auto Layla solo se acaricio la barriga sintiendo a los bebés inquietos, asi como su corazón.

—¿en serio estas bien? —Layla respiro hondo.

—me…mejor baja la velocidad, me estas asustando —Stefan no queria hacerlo, pero deshacelero poco a poco llamando desde el tablero del auto a Claus que contesto rápidamente.

—¿Qué sucede? —pregunto con voz llena de fastidio, apenas habia salido hacia un par de horas en la casa para encargarse de asuntos de su empresa

—Layla rompió fuente —hubo un silencio corto al otro lado de la línea dándole tiempo a Layla de sentir la primera ola de dolor.

—¿Qué pasa? ¿Dónde están? —ahora si estaba preocupado, se levanto de su silla caminando rápido hacia la puerta, Mateo que venia entrando se quedo en shok al ver el semblante de su jefe.

—esta dando a luz —le dijo a Mateo haciendo que este tirara las carpetas sobre el escritorio del asistente afuera de la oficina corriendo tras su jefe al elevador.

—solo rompió fuente —le aclaro Stefan intento el tampoco romperse, pero era obvio que estaba perdiendo el control.

—¿y eso que escuche que fue? —Layla luego de calmarse sintió que podía hablar.

—fue mi primera contracción, tal vez —no estaba segura de nada, solo queria que dejaran de conducir tan rapido

—estoy llegando a la clínica, las niñas están solas en casa —notifico haciendo que Claus mirara a Mateo a su lado quien ya habia escuchado todo.

—bien, Mateo se ira para alla, voy en camino —y asi fue como se dividieron las tareas rápidamente.

Una vez que se estaciono lo mas calmado que pudo la puerta del copiloto se abrió y con ayuda de un enfermero Layla se sento en una silla de ruedas sintiendo demasiada presión en su vientre.

—no, esto no esta bien… —murmuro preocupada dejando de sentir las patadas constantes de los bebés.




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