—mami... mami... el abuelo no despierta —Layla miro preocupada el rostro de su hija quien parecía estar al borde de las lágrimas.
Layla le había pedido a Claus que buscarán al hombre mayor para hacerlo vivir con ellos al menos una larga temporada, ya había pasado un mes de año nuevo y planeaban llevarlo al hospital para un chequeo de rutina.
Apagó el fuego de la cocina y corrió escaleras arriba, cuando llegó a la habitación donde estaba el hombre este se veía tranquilo, con el pánico subiendo por su garganta de acercó a la cama.
—mami... el abuelo está frío —rompio en llanto Davida quien había estado intentando despertar al hombre desde temprano, pero por consejo de su madre no lo había echo.
Layla tocó la mano del hombre y luego puso dos de sus dedos en el cuello, pero solo podía sentir sus propios latidos acelerados; colocó esos mismos dedos frente a la nariz del hombre pero no había nada.
—llama a tu padre —dijo intentando no mirar a su hija.
—mami...
—Llama a Claus ahora! —grito en tono autoritario haciendo que la niña corriera en busca de su padre.
—abuelo... abuelo... —Layla lloro sintiendo el cuerpo rígido del hombre bajo su tacto.
Desde su última conversación había tenido el mal presentimiento de que tal vez ya no había tiempo con el hombre. Esa también fue una de las razones por las cuales lo trajo a casa, era su deber después de todo, cuidar a su suegro y más si tenía la posibilidad.
Los pasos pesados de Claus llegaron rápido a la segunda planta viendo a su esposa tomando la mano de un hombre que claramente había muerto.
Había visto muertos durante mucho tiempo y solo de verlo lo sabía.
—lo siento linda —Claus abrazo a una confundida Davida quien correspondió al abrazo llorando con fuerza mientras venia a su madre taparle con la sabana la cabeza a su abuelo.
La casa se sumergió en silencio las siguientes horas, dónde una ambulancia había llegado a recoger el cuerpo del hombre.
—yo me haré cargo del resto —murmuro en la oreja de su esposa apenas sacaron el cuerpo.
—mami... —lloro Davida corriendo a abrazar a su madre quien solo le regreso el abrazo con fuerza.
Un auto se detuvo y de este se bajaron Stefan y Tabitha, al ver la escena ambos de preocuparon, haciendo que Tabitha corriera dentro de la casa viendo a la familia en la puerta.
—¿Dav? —Layla solo extendió su mano y la niña de unió al abrazo.
—¿que paso? ¿están todos bien? —pregunto preocupado Stefan viendo que arriba estaban los trillizos y gemelos y abajo ambos padres.
—el abuelo... —fue todo lo que pudo decir Claus haciendo que Stefan soltará un suspiro fuerte.
Había pensado lo peor apenas escucho que una ambulancia estaba yendo a la casa de Claus.
—lo siento mucho Lila... Dav —murmuro apenas acariciandole los cabellos a una niña inconsolable.
...
El día del entierro tuvieron que moverse a Italia, para hacer el descanso del hombre junto al resto de su familia.
Esa fue la primera vez que Davida vio la lápida de su padre.
La familia en el cementerio junto a algunos primos lejanos de la familia D'Luca se sorprendieron de ver a la mujer y la única hija de Niccolo allí.
—te... habíamos dado por muerta —dijo una de las mujeres mayores a lo que Layla solo suspiro con pesadez.
—lo lamento mucho, yo...
—asi que el viejo hacía esos viajes por... —miraron a Davida —su nieta —Layla pensó que la atacarían pero la mujer sonrió con nostalgia. —tienes los mismos ojos de tu padre ¿te lo han dicho? —Davida sonrió y la mujer se despidió de ambas.
A lo lejos un hombre con gafas oscuras miro la figura familiar vestida de negro cerca de la lápida de su difunto amigo, pero cuando un hombre mucho más alto que ella la hizo girar junto a la pequeña a su lado lo confirmó.
—¿Layla? —intento seguirlas, pero con la distancia solo las vio subirse a un auto negro y marcharse.
—tia... ¿quien era la mujer que se fue? —Pregunto Enzo al acercarse a la la tía de su difunto amigo, quien ahora su padre de uniría a él del otro lado.
—pues... la viuda de Nick ... me sorprendió verla con vida, pero... es bueno saber que mi hermano pudo conocer a su nieta —la mujer mayor no se pudo quedar más tiempo hablando pues una de sus nietas mayores se la llevó.
Enzo siguió pensando en la figura que había visto a la distancia, ambas figuras femeninas de cabello largo, pero la niña con la piel pálida.
Intento buscar en linea el perfil de Layla, pero no encontró nada, ni su antigua cuenta de Instagram, ni facebook.
Pensativo durante un buen rato busco el nombre de su amigo y el nombre que le había puesto a la niña, dando como resultado una cuenta privada pero en la foto de perfil estaba un rostro joven, adorable y tierno de una niña, la manera en que sonreía en la imagen le recordó a Layla, siempre solía hacer caras, decidido a saber la verdad, le envío una solicitud, pero a los pocos minutos el perfil ya no aparecía.
—asi que... si es ella —se dijo así mismo viendo la captura de pantalla que había tomado de la foto de perfil; ojos verdes, cabello negro, piel pálida y lunares en la cara, mejillas gordas y nariz perfilada. Sin duda era una versión miniatura de Nick y Layla.
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Editado: 20.08.2024