No te perderé de nuevo

VIAJE DE REGRESO

Son aproximadamente las 8:00 P.M., por fin hemos terminado de planificar todo lo relacionado a la documentación y a la audiencia. Nos hemos despedido y deseado feliz noche. El abogado me ha preguntado si tengo como regresar a casa y también he mentido, no quiero que se preocupe por mí o se ofrezca a irme a dejar, ya es una persona mayor y trabajar hasta esta ahora, ya debe ser muy cansado para él. 

Tomo mis cosas y salgo a la calle, he pensado en llamar un taxi, de las dos opciones, me parece las más segura, cuando escucho una voz a mis espaldas. - Por mas independiente que sea una dama, estas horas no son adecuadas para andar sola y en transporte público-. Es Tony que se acerca a mí. -No quise molestar, por eso preferí regresar sola a casa,-. -Vamos Aydee, yo te llevaré a casa-. Me quedo parada y él me toma del brazo, una corriente de energía corre por todo mi cuerpo; es la segunda vez que ésto me sucede desde que he vuelto a ver a Tony. Trato de parecer segura y recuperarme de lo que acabo de sentir y camino a su lado en silencio. 

-¿Donde está la motocicleta?- Veo la confusión en el rostro de Tony, se queda parado y trata de reaccionar. -Ya no uso motocicleta Aydee, desde hace muchos años-. Estoy completamente segura que vinieron muchos recuerdos a su cabeza. Ya no insistiré en hacer más preguntas que puedan hacerlo sentir incómodo.

Llegamos a su vehículo y abre la puerta del copiloto para que ingrese, luego se dirige a su lugar en el puesto del piloto. Durante el camino a casa, estuvo en completo silencio, hice varias preguntas relacionadas con el trabajo y contestó con monosílabos; por lo que renuncié a continuar tratando de entablar conversación con él. 

Hemos llegado a casa y ya me siento bastante molesta, no entiendo la razón por la que se ha ofrecido a llevarme a casa cuando no puede comportarse un poco amable, además tengo volando en mi cabeza una pregunta que me ha traido el resto de la tarde, quebrandome la cabeza. 

Coloco un pie fuera del auto y le agradezco por haberme traido, él asiente; sin embargo inmediatamente coloco mi pie nuevamente en el carro y digo - Gracias de nuevo por traerme, sin embargo hubiera sido mejor que no lo hubieras hecho, para evitar ver tu descontento durante todo el camino-. Bajo inmediatamente y no giro para ver su reacción.

 

 




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