Sí, murió, sin final feliz, y sin lo que esperabas.
Ya solo veo gris, y no sé quién murió.
No sé que hago aquí, no sé de qué hablo. ¿Quién coño eres tú, y qué haces aquí?
Mi alma desvaneció, y yo ya me voy, entre toda la gente a bailar, con mi celular sonando y sonando, pero la música de la disco opaca el sonido de la llamada.
Y por primera vez en todo este cuento....
Ya no ves al ángel, no ves al asesino, ni me ves a mí.
Adiós.
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“Man is condemned to be free; because once thrown into the world, he is responsible for everything he does.” Jean Paul Sartre