No me vendo por dinero.

Al llegar a casa estaba destrozada, no sabia que hacer, por primera vez en mi vida extraño ser la Noa de antes, la que no tenóa amigos, la que no hablaba con nadie, ahora por lo menos no estare sola, tendre a mi bebe por siempre.
- Hija, ya se lo que tu madre te dijo, trate de avisarte pero saliste corriendo.
- Lo siento papá, pense que mamá nos ayudaría.
- Ya princesa, tengo una solución aunque no te va a gustar mucho.
- Por que.
- Hable con mi amigo, el padre de Liam, nos iremos a vivir con él, ya sabe de tu embarazo y esta dispuesto a darme trabajo y a ti te pagara todo lo referente al bebé.
- Pues no se, yo no conozco a ese señor.
- Es un poco dificil, Liam no se lleva bien con el, por eso no quiere que le pidas ayuda, además cambias de aires no estaría mal, estare trabajando duro para comprar una casita más despues.
- Y las deudas papá.
- No hija vendiendo la casa,  el carro y perdiendo la empresa nos quedaremos sin nada pero tambien sin deudas.
- Hay papá, ya habia pensado en casarme con Sebastian para que el pague todo asi conservar la casa y la empresa.
- Hija, tu no eres mercancía ni nada de eso, primero muerto a que tu hagas eso, si lo amaras no me importaría, sería el primero en apoyate, pero tu no lo quieres ademas no eres ni la primera ni la ultima que es madre soltera, que lo que digan las viejas chismosas del pueblo no te afecte, tu eres mi hija y no te abandonare de eso ten por seguro.
- Hay papá gracias.
Me abrazo, por fin una solución aunque no me agrada irme de aqui, pero aveces toca tomar desiciones dificiles.
- Nos vamos después de la graduación, ya esta hablado, viviremos con el papá de Liam, tu pasaras en casa todo el embarazo después el mismo dijo que te daria trabajo y asi podrias estudiar  la universidad.
- De verdad, me gustaría mucho eso.
- Si aunque estudiarias por internet tienes un bebe que cuidar, eso debes poner primero.
- Si papá.
Subi a mi cuarto a descansar, le escribi una carta a Liam ya que no me quiere recibir sera mejor despedirme de el.
Mientras escribia lloraba, no le quise decir donde me iba tampoco que iba hacer, pero si que me dolia su forma de ser, el debio apoyarme y no quiso, prefirio que me casara con otro al hacerce cargo pero eso ya paso ahora aunque no me guste iremos de arrimados a la casa de ese señor, pero prefiero eso a casarme sin amor.
Pasaron los dias y la graduación llego, estaba emocionada ya que ahora ya no seria una chica sino una señora con hijo y todo. Estaba sentada al igual que todos, nombraron a estudiante con mejor nota y fui yo, todos mis compañeros murmuraba que si Tania estaría viva sería ella no yo, en parte tenian razón, Adriana ybSebastian eran los primeros en comentar eso, recibí mi diploma a la mejor, no quería recibirlo pero lo hice, no quise decir nada y eso fue lo mejor. Luego de la ceremonia decidí recorrer los pasillos de la escuela fue ahí que encontre a Sebastian no queria verlo pero el me llamo y no me quedo de otra que enfrentarlo.
- Hola preciosa, te has puesto mas linda desde la ultima ves que te vi.
- Gracias Sebastian pero tus halagos no me impresionan.
- Primer lugar,  claro Tania tuvo que morir para que eso pasara.
- No quiero tus burlas Sebastian.
- Es la verdad que te ofendes./ Me di la vuelta para irme y el me sorprendio con algo..
- Tu padre ya vendio la casa.
- Asi es.
- Ahora es mía, fui su mayor oferta, estaba tan desesperado por dinero, que lástima que ahora no tengas casa.
- Ese no es tu problema.
- Debiste haber aceptado casarte conmigo.
- No Sebastian, has cambiado mucho, no quiero a alguien como tu en mi vida.
- Que quieres, a un asesino como padre de tu hijo, sabes que eres una tonta, Adriana se casara conmigo ahora, tendra todo lo que tu desperdiciaste.
- Que te aproveche, eres un idiota, tu eres guapo puedes esperar a alguien que te ame.
-Guapo, lo dices tú que preferiste andar con un desconocido, después ese desconocido te trata mal y te acuestas con otro desconocido te deja embarazada y ahora estas sola con ese estorbo de bebe, mientras yo iba a olvidarlo todo, me iba a olvidar que siempre me rechazaste por otro, iba a reconocer a ese niño solo con tal de tenerte aunque sea por un maldito contrato.
- Tú nunca me hablaste, siempre te juntaste con los populares y yo......
- Yo siempre que me acercaba corrias como si yo te quisiera hacer algo, por eso me acerque a Tania, por eso tambien me burlaba de ti, tú nunca lo viste hasta que llego Agustin, a él si le hiciste caso enseguida y despues Liam a él tambien le hiciste caso, ahora creo que todo lo que te pasa te lo mereces, por tonta y por ciega.
- Lo siento Sebastian yo nunca me di cuenta,perp tampoco debes hablarme así.
-Sabes has lo que quieras, pero no vuelvas a buscarme, yo quiero estar lejos de ti, ahora estoy comprometido con Adriana, ella tendra lo que pudo ser tuyo solo te deseo suerte y ya que decidiste luchar por tu cuenta, mucha suerte y sobre todo, no dejes que a ese angelito le pase algo, adios.
Se fue no pude evitar sentirme mal, Sebastian siempre ha estado enamorado de mi y no lo pude ver, siempre fijandome en mi estupida vida, ahora es muy tarde para regresar el tiempo. Sali de la escuela y fui directo a mi casa, mi padre se habia adelantado y Azucena estaba ahi con el arreglando las cosas.
- Amiga ya esta por llegar el carro de la mudanza.
- Gracias por ayudar a papá.
- De nada ya sabes que para ayudarte estoy, cuidate y cuida a mi sobrino, estaré pendiente de Liam, y cualquier información te avisaré.
- Esta bien.
Nos abrazamos y fue inevitable no llorar, aqui vivi toda mi vida ahora se que nada es para siempre.
- Estas bien hija.
- Si papá es solo que me siento triste por todo lo que he pasado.
- Tranquila hija, veras que todo a de pasar.
- Si papá, estamos juntos y eso es lo que en realidad importa.
Fueron algunas horas de viaje hasta ese nuevo pueblo era mas grande que donde viviamos, y parecia tranquilo, ahora solo faltaba llegar a la casa de padre de Liam. Fueron unos minutos mas cuando llegamos a una casa que más bien parecia una mansión, salieron unas chica, las empleadas de la casa y tomaron nuestas cosas y nos ayudaron.
- ¿ Donde esta tú amigo?.
- No se, sabia que llegabamos hoy, capaz y esta en alguna reunión.
- Puede ser.
Entramos y la casa era muy linda, aqui es que vivia Liam ojala me vaya bien en mi nueva vida. Estando en la sala llego una chica y dijo que el señor nos esperaba en el comedor me asuste un poco pero seguimos a la chica  que nos llevaría donde estaba el señor.
Al llegar saludo a mi padre con entusiasmo pero a mi me quedo viendo de arriba a bajo, aún no sabia el nombre del señor hasta que papá lo llamo José, luego se acerco a mi.
- Buenos días muchacha, asi que tu eres la mujer que me va a dar un nieto.
- Buenos días señor.
- Sientense, ustedes son mis invitados.
- Gracias amigo, desde cuando empiezo con el trabajo.
- Hoy es viernes, asi que desde el lunes, hoy dedicate areglar tus cosas e instalarte bien, conocer el pueblo, despues de tantas cosas mereces distraerte un poco no crees.
- La verdad si, han sido muchos días dificiles.
- Entiendo.
El resto de la comida fue en silencio ya habiamos terminado de comer cuando don Jose me hablo.
- Noa aun no te vayas necesito hablar contigo.
- Esta bien./ Caminamos a la biblioteca y era bien grande, tenía muchos libros interesantes estaba por tomar uno cuando el señor hablo.
- Mira muchacha, a mi no me engañan asi de facil, en cuanto nazca ese bebe lo someteras a una prueba de ADN, entendiste.
- ¿ Por qué haria eso?
- Soy un hombre muy desconfiado, y a decir verdad, tu antes andas con el muchachito ese que mi hijo mato, por tú culpa asi que debo estar seguro nada más eso.
- Pues si no me cree ni modo.
- Pues entonces le quitare el trabajo a tú padre y se largan de mi casa, si es cierto que es mi nieto, no tendras nada que temer, yo soy el desconfiado, asi que esta en tus manos.
- Yo estoy esperando un nieto suyo, Liam me cree por que usted no.
- Yo soy diferente, no te estoy juzgando, solo quiero una prueba para dejarle todo a mi nieto, sea varón o mujer, pero que sea mi nieto legitimo, tú mientras tanto recibiras una mensualidad para tus gastos, y debes cuidarte mucho nada de hacer trabajos ni esfuerzos.
- Es su nieto, pero solo por el apoyo que nos dará aceptare eso, pero tambien quiero que cuando se compruebe que es su nieto me pedira disculpas públicas
- Soy muy orgulloso pero asi sera cuando tenga los resultados me disculparé contigo.
- Esta bien.
Sali de ahí un poco enojada, no puedo creer pero esto es mejor que casarme sin amor, aqui por lo menos estoy libre con mi bebé y no con un esposo que no quiero, subi a la que seria mi habitación, era bastante grande y linda, me di un baño, luego me acoste a dormir, estaba muy cansada.
Por la noche me despierto, escucho que estan discutiendo, salgo en silencio para ver quien es, veo anuna chica rubia que discute con don José, pero por lo que escucho no esta feliz de tenernos aqui, por descuido hago ruido y voltean hacia mi.
- Perdón, no fue mi intención interrumpir.
- Parece que a esta niña no se enseñaron que es de mala educación escuchar conversaciones ajenas./ Dijo la rubia imponente.
- Ya dije que no fue mi intención.
- Noa te presento a Kendra, mi esposa ella te comprara las cosas que nesecites para tu bebé.
- No se  moleste señor, mi padre me ayudará.
- No, él gana su dinero para él,  tu mensualidad es para tus gastos de mi nieto me encargo yo, claro siempre y cuando si sea mio.
- Ya hablamos de eso don José.
- Si, bueno las dejo tengo que ir a la biblioteca./ Se fue dejandome con Kendra esta mujer no me cae nada bien.
- Asi que tú eres la mocosa responsable de que Liam este en la cárcel, eres una maldita no debes estar aqui.
- Yo tampoco quiero pero me vas a tener que aguantar.
- Nadie te dijo que me hables de tú.
- Tú lo haces porque yo no.
- Soy mayor que tú mocosa insolente.
- Si, con cuantos años 2 o 3, la verdad eso me tiene sin cuidado, ahora si me permites me tengo que ir al comedor tengo hambre y antojos.
La deje y su mirada reflejaba odio, esta sera la piedrita en el zapato que no necesitaba y justo ahora, llegue a la cocina y al abrir la refri vi todo lo que deseaba, tenia mucha hambre asi que saque todo lo que necesitaba para hacerme una hamburgesa, tenia mucho antojo el día hoy, estaba comiendo y veo a mi papá parado en la puerta viendo como comía parecia que nunca habia probado una hamburgesa.
- Papá que haces ahi.
- Viendo como te estan afectando los síntomas.
- Pues creo que esto es normal.
- Si tu madre era igual cuando estaba embarazada.
- La extrañas?.
- Un poco, pero ya no es la misma.
- No ya no es la misma.
- Pero no hablemos de eso, mejor come tu hamburgesa.
- Quieres.
- No solo con verte comer ya me lleno.
Nos reímos y conversamos, estabamos sonriendo despues de todo lo que heemos pasado, solo espero que Kendra no sea la piedra en el zapato que no nesecitaba en estos momentos.