M E L O D Y
–No entiendo qué es lo que le ven a su columna, es una copia barata de Gossip Girl–refunfuñé mientras dejaba caer mi espalda en el respaldo del sofá.
A mi lado, Janet puso dos dedos debajo de su barbilla, adquiriendo un aire pensativo, como si lo que le estuviera diciendo en verdad fuera de su interés.
–Mmm, ¿adolescentes, chismes? No lo sé, Mel, no voy a tu escuela y a mí también me interesaría leer su columna–respondió sin voltearme a ver, su mirada estaba centrada en la televisión, donde Mulán aparecía en su versión live action. Mi hermana hizo una mueca–. Odio demasiado esta película.
–Entiendo, a todos nos gustan los chismes, de acuerdo, pero ¡yo nunca le dije que su trabajo era soso, y demasiado grosero!, ¿sabes cuantas vidas ha arruinado con su columna? Quizá no sean muchas, pero muchos chicos si se han sentido demasiado expuesto, y ¿han cancelado su columna? ¡Claro que no!, ¿por qué? Porque desgraciadamente es lo que mantiene con vida al Periódico–me hundí más en el mullido cojín y me crucé de brazos, haciendo un puchero–. Si tanto la odias, ¿por qué no la quitas? –me giré a verla.
La chica me miró sólo un segundo, se encogió de hombros y regresó la vista a la pantalla.
–Quería darle una oportunidad, Rose es fan de Mulán, este año, en Halloween pretende disfrazarse de ella, y su fanatismo es tan grande, que ni siquiera se decepcionó al ver esto–señaló la televisión–. Ha intentado muchas veces que la veamos, pero no me han gustado las versiones que ha hecho Disney de sus películas de princesas, y–se encogió de hombros–. Tal vez sólo quiera verla para saber qué es lo que le gusta exactamente a Rose. Pero hasta el momento no encuentro nada. Ni siquiera cantan, a ella le encantan los musicales, yo los odio.
Janet y Rose era casi dos mundos completamente diferentes; mientras que a mi hermana le encantaban las películas dramáticas, con toques más siniestros y realistas, su novia era fiel creyente de las comedias románticas, sobre todos los clásicos lanzados durante los 80’s y 00’s, a mi hermana le gustaba la música alternativa, a Rose el rock and roll de los 50’s, Janet prefería la comida salada, ella la dulce, mi hermana odiaba las películas en donde la mitad de los diálogos eran cantados, Rose amaba los musicales, incluso se sabía cada letra de las canciones, con coreografía y todo el rollo. Pero a pesar de todo eso, mi hermana se toma un tiempo para escuchar los grupos rockabilly favoritos de Rose, comer una tarta dulce, y ver una comedia romántica con una escena cantada y coreografiada cada cinco minutos.
Supongo que de eso va a ser la pareja de alguien, aceptar sus gustos, por más extraños que sean, y probar algo nuevo de vez en cuando. ¿Eso es lo que Nolan haría por mí? En un plano hipotético donde fuéramos novios… Pero que estoy diciendo, ya lo ha hecho. Aunque no se inscribió al Periódico escolar por mí, aún así, a pesar de que lo expulsaron, regresará, para ayudarme, y no porque le guste, no hace gestos de fastidio cuando habló de ello, como hacen los demás, y sólo se queda en silencia, escuchándome, viéndome y espera para darme su opinión del asunto y no de forma sarcástica, como acaba de hacer mi hermana, sino de forma sincera, como si en verdad le importara.
«Es algo que a ti te encanta, y me gustaba escucharte hablar de ello». Es lo que él había dicho, y en su momento me lo tomé como algo en broma, ya sabes, lo que dices para que la otra persona se sienta querida y apreciada, para ganar puntos con una chica, pero, mientras más analizaba todo lo que había hecho, más me daba cuenta de que Nolan en realidad no mentía, sino que lo estaba diciendo en serio.
–Oye sobre lo que hablamos hace un rato en la cocina–la miré–, eso de que si eres o no novia de Nolan–agregó al ver que no le entendía–, mira, no era mi intención… Nuestra intención hacerte sentir mal, es que ustedes, bueno, actúan como una pareja de verdad, ¿sabes? –fruncí un poco el ceño–. Lo que quiero decir es que no es normal ver a dos personas que apenas si están conociendo tan así, de juntos, acaramelados. Los veo y digo: «Carajo, pero que acaramelados son». Nunca había estado así con alguna chica, coqueteamos, pero son cosas ligeras, y las primeras citas siempre son para conocernos, quizás haya uno que otro roce y un beso, pero… Lo que quiero decir es que ustedes parecen como si llevaran toda una vida juntos–reorganizó su discurso al darse cuenta de que se estaba alejando un poco de la idea original–, la forma en cómo se miran, ¡no había visto que ningún chico viera a su no novia con tanta intensidad como lo hace Nolan! Hasta me hace sentir celos porque nadie me ha visto de esa forma.
¿Qué no todos actúan así? No tengo que volver a recalcar el hecho de que Nolan es el primer chico con el que he llegado demasiado lejos, después de todo fue mi primer beso, pero ¿no se supone que esto es así? Actuar tan acaramelados, que todos lo odian, hasta que la relación escala a otro punto… Bueno, para ser honesta, siento que con nosotros dos siempre se va a quedar en un mismo punto, no es que me haya puesto a pensar cómo sería si… Pero ¿qué las parejas de adolescentes no actúan así? Bueno, claro que lo hacen, ¡en la ficción! No el maldito mundo real, hay veces en las que olvido que esto no es una película adolescente de los noventas, donde la chica ha estado esperando su corta y patética vida a que su vecino se dé cuenta de que siempre fue ella y no la capitana del equipo de porristas que solo le quería porque era mariscal de campo, mientras que ella lo hacía reír, lo entendía y siempre estuvo para él… Dios, debería dejar de ver las recomendaciones de romcom que Rose me hace porque me están dañando un poco el cerebro y la visión del mundo.