⭐ Capitulo 36 ⭐

Mark

La imagen que señaló, la señora esa, es de un mafioso desconocido completamente por mi. Ya le pedí a mi ingeniero informático, información sobre el.

No puedo creer que todo esté tiempo Mari a vivido con mentiras, una tras otra.

Me restriego los ojos, por la frustración que siento en este preciso momento, quiero hacer algo para mejorar todo, pero no tengo ni idea de lo que tengo que hacer.

Apoyo mi cabeza en mis brazos que se encuentran cruzados sobre mi escritorio, y cierro los ojos, de un momento a otro me quedo de dormido.

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Mi pequeña entra a mi despacho y lleva puesto un vestido corto con flores, mi mirada se centra en sus piernas largas y blancas, luego mi mirada sube por todo su cuerpo hasta que conectamos miradas y ella tiene una gran sonrisa en su rostro.

Camino hacia ella lentamente, como un depredador que quiere cazar a su presa, ella no borra la sonrisa de su rostro y cuando estoy junto a ella, junto sus labios con los míos en un beso lujurioso, lleno de deseo, ella me lo corresponde al instante y la sujeto de la cintura para luego levantarla, ella enreda su piernas en mi cintura, y yo camino hasta mi escritorio para depositarla sobre el.

Nuestros labios se separan en busca de aire, pero antes de que ella pueda reaccionar beso su cuello y de su boca sale un gemido que hace que mi erección presione más por salir .Mis  Manos suben por sus muslos, acariciando suavemente su piel blanca y suave,luego mis manos llegan a su intimidad y la acaricio sobre la tela de sus bragas y todo su cuerpo tiembla por la sensación nueva que siente, otro gemido se escapa de sus labios pero está ves con mi nombre,al escucharla no aguanto más y junto nueva mente nuestros labios, mientras mis manos le siguen dando placer ha ese punto dónde quiero llevar mi boca y luego mi polla.

Sus bragas están mojadas, termino el beso y me separó un poco de ella, su respiración está acelerada y en su cara puedo ver el placer que está teniendo, con solo la fricción de mis dedos en su intimidad, subo mis manos un poco más y llegó al elástico de sus bragas, sujeto el elastico con mis dedos y bajo lentamente sus bragas, hasta que se las quito por completo, las olfateo y luego las guardo en mi bolsillo.

Mi pequeña junta sus piernas en un movimiento instintivo, lentamente con ambas manos se las separó y me arrodilló, lentamente subo por su pantorrilla dejando besos húmedos, siento como tiembla, llegó a sus muslos y dejo más besos húmedos, subo mas y mi boca llega a ese punto dónde quería estar hace tiempo, dejo un casto beso sobre su clítoris y ella suelta un pequeño gemido, luego comienzo a hacerle sexo oral lentamente, y voy incrementando la velocidad , mi pequeña me agarra el cabello y comienza a jalar de el, y no para de gemir.

—Mark... Por favor.... — dice en medio de los gemidos

—¿Por favor que?— pregunto

—Porfavor.... Mark.... No pares...— gime y haciendo caso a su petición, comienzo a aumentar cada ves más la velocidad, sus gemidos no cesan, su respiración se acelera cada vez más, y su cuerpo comienza a temblar, «Creo que está apunto de alcanzar el climax» pienso y aumento más el movimiento de mi lengua

—¡Mark!... ¡Mark!.... Por favor... ¡MARKKKKK! — grita cuando alcanza el climax y se arquea sobre su espalda, no despegó mi boca de su intimidad hasta beber todos sus jugos, ella sigue teniendo pequeñas combulciones por culpa del orgasmo.

Comienzo a desabrocharme el cinturón y luego bajo el cierre de mi bragueta, bajo mis pantalones con mis boxers y dejo salir mi erección, la tomo entre mis manos y comienzo a masturbarme mientras Mari se recupera del orgasmo.

Luego de algunos minutos conectamos miradas y le ofresco una mano para ayudarla a levantarse, ya parada a mi lado, ella se arrodilla y toma mi polla con sus pequeñas manos, tomándome totalmente por sorpresa, sus manos suben y bajan por todo mi miembro, me observa y en su rostro ya no veo nada de la timidez de antes, solo veo a una pequeña traviesa con ganas de jugar con fuego y quemarse; de un momento a otro mete mi miembro en su boca y comienza lento, me observa y sonríe «Me gusta esta nueva etapa de ella »

—Pon tus manos detrás de tu espalda— le ordenó y inmediatamente cumple mi orden, sujeto su cabello en un puño y luego comienzo a follarle la boca. Suelto gruñidos de placer. «carajo... Voy a correrme»

—Pequeña detente, voy a correrme— le advierto pero hace caso omiso

—Pequeña por favor— le advierto de nuevo

—Ahhhgggg —

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—¡MARK!—  gritan y me despierto de golpe, veo a mi pequeña con cara confundida

«Carajo solo fue un sueño, paracio tan real »  pienso cuando la veo parada mirandome extrañada, ella me sigue mirando como si buscará una explicación.

—¿Que?— le pregunto porque no deja de mirarme extraño.

—Estabas diciendo el apodo que me pusiste y luego hiciste ruidos raros— explica Y yo trato entender todo lo que me dijo.

—Estaba soñando contigo... Fue un sueño muy placentero a decir verdad— le cuento y ella me mira dudosa pero asiente.

—Okey, yo solo venía a traerte la comida, ya que no fuiste a comer ahora— me comenta mientras deja una bandeja de comida sobre mi escritorio

—Gracias— respondo sorprendido por este momento.

—No hay de que, mañana quiero hablar contigo y con Alex, y es muy importante. — dice y yo asiento

—Buen provecho—dice y sale de mi despacho son decir otra palabra, estoy sumamente sorprendido por todo en este preciso momento. No puedo creer que haya soñado que Mari y yo teníamos sexo. Suspiro y comienzo a comer.

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¡Holaaaa!!!! Cómo están espero que estén muy bien y sino que todo pueda mejorar.