Era hora de una historia diferente.
No fueron sus ojos ni su atractivo lo que me llamó la atención; más bien, lo que me divirtió, y lo que sentí al conocer a ese abusador que me acosaba, cuando era niña, fueron sus voces. Eran chicos: delicados, tiernos, pero seguros, varoniles y tiernos. Nunca pensé que alguien pudiera interesarme tanto simplemente repitiendo el pasado de mi madre con sus voces atentas, con algo tan sencillo. Quizás fue porque era lo único a lo que tenía acceso desde las cuatro paredes de diferente color de mi habitación, lo que creaba la combinación perfecta de circunstancias. ¿Habrá algún día momentos juntos, amistad, peleas, risas, lágrimas, secretos que saldrán a la luz y una heredera... habrá amor?
Me llamo Milagros Nathalia, a quien antes llamaba "Mila". He tenido que lidiar con muchas aclaraciones por eso. Mi nombre por sí solo es motivo de conversaciones incómodas. La historia de mi madre es impactante a pesar de su corta edad. Nunca imaginé que su desastrosa vida daría un giro inesperado. Estaba embarazada de su exnovio, Tristán, y su padre decidió echarla de casa. Ya te puedes imaginar cómo ha sido mi vida.
Me llamo Milagros Nathalia, a quien llamaba "Mila". Era mi madre, pero falleció un año después de que le diagnosticaran cáncer. También perdí a mi abuelo repentinamente. Estaba decidida a dejar atrás su pasado porque íbamos a regresar a Filipinas.
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💌 Gracias por estar aquí. Este es el comienzo de un viaje lleno de emociones: amor, dolor, amistad, secretos y errores que casi destruyen lo que más apreciamos. Acompaña a Mila en cada paso del camino.