Nosotros: Tú y Yo

Capitulo 25

*Odette*

- ¿Qué tal si vamos a un café? - dijo Gianna al lado de mi-

-Mmm… creo que estaría bien- dije con pocos ánimos-

-Oye Dania… tengo una duda ¿Nicolas es como tú y Aiden? - dijo Gianna nerviosa y reí, por días había estado completamente en penumbras-

-No, supongo que a él le atrae la muerte pero no es como nosotros- dije viendo al cielo mientras caminábamos hacia la cafetería-

- Dania no quiero sonar como una molestia pero…- dijo Gianna pero la interrumpí-

-Se lo que dirás, se que quieres que Aiden y yo hablemos las cosas pero así no es como somos, a Aiden no le importan las consecuencias, no le importan las personas y yo no soy la excepción- dije mientras abríamos la puerta de la cafetería-

- ¿Y cómo eres tú? - dijo Gianna mirándome fijamente-

-Yo…- dije pero fui interrumpida-

-Niñas- dijo el alcalde en dirección a su hija y a mi-

-Buenas tardes alcalde- dije sonriendo, él había pasado por tanto después de la muerte de su hija, no podía pensar en cuanto sufrimiento debe de pasar este pobre hombre día con día al ver que tiene a una copia exacta en su mismo techo-

-Papá- dijo Gianna con una sonrisa-

- ¿Que hacen aquí tan tarde? No deberían salir a esta hora- dijo el alcalde mientras tomaba la mano de Gianna con suavidad- por que no las llevo a casa ¿mejor? - dijo el alcalde viéndonos fijamente-

-Papá queríamos tomar café- dijo Gianna y el alcalde volteo a ella apretando fuertemente su mano logrando que Gianna hiciera una mueca de dolor-

-Creo que es mejor otro día- dijo el alcalde hacia Gianna y ella palideció ¿Qué carajos estaba pasando? -

-Esta bien- dije interrumpiendo al alcalde mientras alejaba a Gianna de él-

-Bien suban- dijo el alcalde y ambas salimos de la cafetería, Gianna se subió en copiloto y yo en la parte detrás de ella- ¿Cómo va la universidad? - dijo el alcalde hacía mi-

-Bien, supongo- dije sonriendo cortes mente, algo estaba demasiado extraño-

-Supe que entraste a unos cursos de medicina básica junto con cirugía hace menos de dos años ¿has terminado con ellos? - dijo el alcalde y me removí incomoda ¿Cómo lo sabía?, eso era un secreto entre los chicos y yo-

- ¿Cómo sabía eso? - dije incomoda –

-Soy el alcalde, no hay nada que no sepa de las personas de este pueblo, nada- dijo sonriendo hacia mi ¿Por qué me sentía amenazada en este momento? ¿acaso el sabía más de mí? No me gusta… en absoluto-

-tío basta- dijo Gianna-

- ¿Tío? - dije sorprendida-

-Soy el tío de Gianna Frederick Zabel, y como bien debes de saber ahora… él gemelo de Frank Zabel, el alcalde- dijo orgulloso de su hermano y yo permanecí callada... del alcalde podía comprende que supiera de los secretos de las personas de él pueblo pero él… ¿Qué sabe sobre mí? – Voy a reunirme con mi hermano más tarde por lo que te llevaré a tu casa Dania- dijo él sonriendo ya algo dentro de mí me decía que me alejará-

-Creo que estaré bien- dije sonriendo fingidamente y él negó con la cabeza-

-Claro que no, yo te llevaré a tu casa- dijo despreocupadamente-

-Pero realmente no…- dije pero fui interrumpida-

-YO TE LLEVARÉ- gritó golpeando con fuerza él volante y me paralice- disculpa, disculpa… con todo esto de Tabitha estoy algo paranoico, por favor déjame llevarte- dijo y por unos segundo dudé- por favor- dijo y asentí con duda-

Llegamos a la casa de Gianna y ella lo despidió con la mano, me miró unos segundos y me hizo una inclinación de cabeza-

-Pasa para enfrente- dijo aún sin mover el automóvil-

- ¿Cómo? - dije nerviosa y tragué en seco-

- dije que te pases para enfrente- dijo y abrí la puerta con manos temblorosas, saqué mi teléfono del bolsillo y Frederick Zabel abrió la puerta que golpe logrando que mi celular saliera volando directamente en el piso logrando que este se rompiera contra el suelo- Una disculpa- dijo el señor Frederick Zabel con una sonrisa en su rostro… él no lo lamentaba en absoluto-

- Creo que puedo caminar desde aquí a mi casa- dije levantando mi celular y guardarlo en mi bolsillo del pantalón-

-No lo creo- dijo Frederick Zabel justo detrás de mi ¿en que momento había salido del automóvil? -

- ¿De qué…? - dije pero en un movimiento rápido tomó mi cara con fuerza poniendo un pañuelo sobre mi boca y nariz, forcejeaba para poder apartarlo pero nada funcionaba, toque con fuerza mi brazalete con intención de presionar el botón de ayuda que enviaría una señal a Aiden y a Bruno-

-POR FIN, ERES NUESTRA- gritó eufórico mientras ponía más fuerza de su mano que sostenía el pañuelo, mis sentidos comenzaron a nublarse y mis parpados se iban cerrando poco a poco y mis extremidades se iban haciendo cada vez más pesadas-

Forceje un poco más hasta que mis ojos se cerraron por completo

Por favor… alguien… sálveme… quien sea… solo salvenme




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