Hola, mi niña:
Dios, no puedo creer todo lo que me estoy perdiendo por culpa de mi trabajo.
Mi pequeña, lo que estás sintiendo es un nuevo sentimiento que está creciendo en ti, no debes preocuparte por ello.
Me gustaría saber más de ese pequeño que hace que tengas mariposas en el estómago.
Te contestare otra de tus preguntas. Papá no está triste ni nada de eso, no debes de preocuparte cariño, es solo que me extraña, ya lleva mucho tiempo que no me ve. Es por eso que está así (él mismo me lo dijo).
¡Adiós, estoy impaciente por ver tu próxima carta!