Nuestra Segunda Oportunidad. Saga: Nyc N° 3

Capítulo 11

Ehan decidió alejarse de Hanna por lo que restaba de la velada; el sabia lo impactada que debía de estar y le quería dar tiempo antes de tocar el tema de sus hijos.

Él ya había hablado con sus abogados y tenía todo lista para realizar el trámite para reconocerlos. Sabía que no sería fácil pero no se rendiría. Además de tener listo un nuevo contrato para Hanna, solo debía encontrar la forma de que las cosas salieran bien.

Todos en la empresa parecían satisfecho con el nuevo jefe y ahora ya no tenían ese mido de perder sus trabajos; claro, debían demostrar su importancia en la empresa.

La fiesta termino y todos se empezaron a retirar; Sarah decidió quedarse hasta el final y probar suerte con su nuevo jefe; ella está feliz porque él había demostrado interés en ella, no podía creer que ese adonis rubio la hubiera notado.

— ¿Quieres acompañarme al tocador?— le preguntó Sarah a Hanna, ella quería ir a revisar su maquillaje y hablar con su amiga.

—Ve, cariño. Te esperare aquí— dijo Sebas cariñosamente.

Hanna acompañó a Sarah, pero en el baño se encontraban varias de sus compañeras.

—Y aquí viene la futura señora Hilton— dijo Carly, una chica e contabilidad.

Hanna se quedó de piedra al escuchar ese comentario pero noto la mirada de todas posadas en su amiga.

—No exageren chicas— Sarah rodó los ojos pero la sonrisa no se apartaba de sus labios.

—No exageramos. Todos se dieron cuenta del interés del jefe en ti; a mí apenas y me tendió la mano y a ti hasta te beso como todo un caballero— dijo soñadora Vanessa.

Hanna permanecía en silencio; ella no quería opinar nada sobre esa situación. Se sentía molesta con Ehan, él no era el tipo de hombre fiel y definitivamente no era un hombre para su amiga.

"Estas celosa" le repetía su subconsciente una y otra vez, pero ella se negaba en creerlo.

—Vanessa tiene razón, Sarah. De seguro te asigna como su nueva secretaria.

— ¿Creen que lo haga?— menciono con una sonrisa pero en el momento lo pensó mejor— no lo creó chicas.

—Muy pronto lo sabremos— dijo Carly— bueno, debo irme, nos vemos el lunes chicas.

Carly y Vanessa se retiraron dejando solas a Sarah y Hanna.

Esta última trato de evitar la conversación y se colocó frente al espejo para arreglarse, Sarah la observó y le preguntó.

— ¿Tú crees que el jefe de verdad esté interesado en mí?, sé que solo fue un gesto de caballerosidad pero esta sería la primera vez que un hombre que realmente me gusta este interesado en mí.

Hanna la observo evitando demostrar sus emociones; le quería decir que no estaba interesado en ella y que se alejara de él, pero eso ni ella lo sabía.

Ehan había regresado a su vida y seguía soltero, él podía salir con cualquier mujer que quisiera.

—No lo sé Sarah, solo...ten cuidado con él. No posee una buena reputación en lo que respecta a relaciones amorosas así que...mantén tu distancia.

Sarah lo pensó un momento y asintió con cuidado. Las dos se arreglaron y salieron listas para marcharse.

Pero al volver al salón se encontraron con una escena que las dejó confundidas.

Mientras ellas estaban en el tocador, Ehan se había acercado a Sebas para hablar con él.

Él quería medir en terreno y conocer al hombre que posee a su familia, no lo aceptaría pero uno de los motivos para comprar BiTec fue para hacerle la vida imposible a ese hombre. Pero debía de reconocer que no podría.

Por mucho que Ehan lo odiara, él no tenía la culpa de todo lo ocurrido, no podía desquitar su enojo con un inocente. El segundo motivo para comprar la empresa fue por Hanna, el pensar que ella y sus hijos no tenían lo suficiente para vivir no lo dejaba dormir por las noches y de esa forma él se encargaría que ella obtuviera lo mejor.

Ehan le pregunto directamente a Sebas sobre algún problema que haya surgido en la empresa últimamente en su área, el ere el jefe de seguridad y debía aceptar que era un hombre humilde y trabajador.

El contesto todo con profesionalidad; Sebas estaba contento porque Ehan parecía un hombre íntegro y honesto, por eso se sentía seguro respecto a su empleo y al de su esposa.

—Me alegró que la empresa posea personas muy bien capacitadas— dijo Ehan observando a Hanna volver al salón; el notó a su amiga al lado y decidió poner su plan en marcha lo antes posible.

—Ya estoy lista cariño; podemos irnos— dijo Hanna tomando del brazo a Sebas.

—Sí, no hay problemas— el giro hacia Ehan— fue un gusto conversar con usted señor Hilton, pero debemos retirarnos.

—No hay problema; lo comprendo, esperó verlos el lunes— dijo Ehan con amabilidad pero no podía engañar a Hanna; ella lo conocía muy bien y sabía que se encontraban tenso e la presencia de Sebas.

Ello se despidió y se alejaron dejados solo a Ehan y Sarah. Él se mostró coqueto pero respetuoso; si quería que todo saliera bien necesitaría la ayuda de esa chica.



#625 en Novela romántica
#245 en Chick lit

En el texto hay: hijos, celos, amor

Editado: 07.02.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.