Nuestra Segunda Oportunidad. Saga: Nyc N° 3

Capítulo 16

Nick escupió su bebida y empezó a toser sin poder detenerse.

Ehan lo observaba con diversión mientras que Alex lo veía de forma extraña.

— ¿De que estas hablando?— pregunto Nick una vez se logró calmar.

—Soy padre de un par de gemelos de cuatro años— Ehan metió su mano en su bolsillo y extrajo una foto de sus hijos para enseñárselas a sus amigos.

— ¡Joder!...— dijo Nick.

—Definitivamente son tuyos— respondió Alex.

Ehan le explico todo; desde el principio; como conoció a Hanna, y que por que nunca se las presentó.

—Ahora entiendo por qué nunca aparecías los viernes — le dijo Alex.

— ¿Así que... gemelos?— pregunto Nick sin poder creerlo— y yo que creía que el ultimo en sentar cabeza serias tu; porque obvio que te casarás con la madre de los gemelos ¿Verdad?

Ehan se quedó callado y bajo la mirada.

—Ehan, ¿Acaso ya no la amas?— le preguntó Alex con tacto.

—La amo, chicos— declaró levantando el rostro— nunca la deje de amar; por eso sufrí tanto cuando creí que se había acostado con Marco. La he tratado de olvidar y nunca lo logre y ahora...ya no puedo hacer nada...

—Pero sus hijos lo unirán para siempre ¿Por qué no se dan otra oportunidad?

—Por qué ella está casada.

Alexander y Nick guardaron silencio; esa situación era horrible y el simple hecho de pensarlo hacia que ellos tuvieran pena de Ehan.

Amar de esa forma a una mujer; y conocer el daño que uno como hombre le ha hecho es un castigo. Pero es mucho peor cuando el daño fue a propósito por una estúpida mentira.

— ¿Y qué piensan hacer con los niños?— pregunto Nick.

Ehan les explico lo que hablo con Hanna y les explicó la compra-venta de BiTec.

Sus amigos también lo tacharon de loco, pero comprendieron el motivo, ellos en su lugar tal vez hubieran hecho lo mismo.

—Te entiendo pero no estoy de acuerdo— le dijo Alex— Hanna se ha de sentir amenazada, tu eres su jefe y el de su esposo. Posees completo control sobre ellos.

—Pero jamás ocuparía ese poder para coaccionarla Alex, todo lo que he hecho es para ayudarla. Quiero darle una vida mejor...la vida que se merece.

Después del almuerzo Ehan se sentía mejor por haber hablado con sus amigos.

Ellos lo apoyaron de que luchara por su familia y así lo haría.

Pensó un momento en ir a la empresa pero no tenía ánimos de trabajar; pero si de ver a sus hijos.

Una idea se formó rápidamente en su cerebro y le hablo a Hanna para ver cómo estaba.

—Buenas tardes; presidencia BiTec.

—Hanna, soy yo— le dijo Ehan únicamente.

Después de que él le dijera que no llegaría ella no esperaba que la llamara en todo el día.

—Digan señor Hilton. En que le pudo ayudar.

Ehan sonrió al escucharla; Hanna era una luchadora empedernida y jamás aceptaría lo que ocurre entre ellos.

—Tienes la tarde libre; no llegare así que te puedes ir ya.

— ¿Qué?

Hanna sospecho de esa orden; Ehan Hilton era un hombre calculador y no había nada que el hiciera sin una doble intención.

—Lo que escuchaste; la empresa se encuentra a dos cuadras de central Park; tal vez podrías llevar a los gemelos a jugar un tiempo.

Y ahí estaba lo que sospechaba.

— ¿Que estas tramando Hilton?— lo acuso.

—Estaba pensando encontrarlos ahí y así poder jugar con mis hijos un momento. Pero si no estás de acuerdo los puedo ir a recoger yo mismo a la empresa para traerlos al parque.

—Ni se te ocurra Ehan; todos empezarían a pregunta el por qué te los llevaste y yo no sabría qué decir.

—Por lo que veo no tienes alternativa.

Ehan colgó dejando a Hanna con una réplica en la boca.

Ella sabía que si no lo hacia él era capaz de presentase y llevarse a los niños; guardó todo rápidamente y apago su computadora; en ese instante le entro una llamada.

—En 15 minutos te recogeré en la esquina de la empresa; ahí no hay cámaras y no habrá problema con tu esposo.

— ¡Estás Loco!— le dijo Hanna.

—Loco por ti cariño— y con eso volvió a cortar dejándola todavía más enojada.

Tenía suerte de no estar frente a ella porque tenía grandes deseos de golpear su hermoso rostro.

Hanna decidió mandarle un mensaje a Sebas sobre que Ehan le había dado la tarde y se iría con los niños a casa; él le contesto con un frio “ok”

Ella debía hablar con él y aclarar esa situación.

No podían seguir así por más tiempo, ellos se aman y tienen una familia.

Tomo su bolso y se encamino hacia los ascensores; muchos la observaron con curiosidad pero a Hanna no le importaba, lo único que quería era evitar que Ehan se acercara a la empresa.

Bajo por los pequeños y rápidamente le explicó a Jenny que había salido antes; se despidió y llego a la esquina tres minutos antes del tiempo.



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En el texto hay: hijos, celos, amor

Editado: 07.02.2019

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