Nuestro Destino |abo|

Capitulo 20: Confía en mi

Noviembre – 2001

La relación entre ZhanYu y Hendery florecía como nunca, los dos primeros meses juntos habían sido un bálsamo para ambos. Cada día aprendían algo nuevo el uno del otro, fortaleciendo el vínculo que parecía irrompible. Sin embargo, los almuerzos, antes privados, se habían vuelto más concurridos.

Ese día, como de costumbre, Jian se sentó junto a ellos, Qiang Hao también lo hizo, aunque no sentía agrado por Jian necesitaba estar ahí para proteger la relación de su mejor amigo, aunque Hendery mismo no se diera cuenta aún. WenJun llegó poco después, con su típica energía relajada y una sonrisa que prometía travesuras.

La conversación tomó un giro inesperado cuando Jian, con su característico tono directo, dirigió su atención hacia Hendery.

—Hendery, ¿ya presentaste a ZhanYu con tus padres? —preguntó con una sonrisa que a simple vista parecía inocente, pero Qiang Hao y WenJun, percibieron su intención.

Hendery levantó la mirada, sorprendido por la pregunta. Se removió en su asiento, sintiéndose como si acabara de ser puesto bajo un reflector.

—No… todavía no —respondió en voz baja, evitando mirar a Jian directamente.

—Oh, ¿En serio? —Fingió sorpresa, Jian sabía que no porque ZhanYu nunca le contó nada al respecto— Pensé que sí, ya saben, las parejas serias hacen ese tipo de cosas. Lo digo porque ustedes son una pareja seria y sé que estarán mucho tiempo juntos.

Hendery no supo qué responder al respecto, el tema de presentar a ZhanYu con sus padres era algo complicado. Qing Hao se mordió la lengua, no iba a derramar veneno tan temprano en el almuerzo.

—Creo que eso no es algo que debamos preguntar, ellos saben lo que hacen en su relación —Dijo WenJun alzándose de hombros.

—Lo mencioné porque me importan -realmente no- Yo, por ejemplo, que soy solo amiga, llevo años conociendo a los padres de ZhanYu. Somos tan cercanos que prácticamente soy parte de la familia —Añadió Jian esta vez sonríen de verdad.

—¿Parte de la familia? —repitió con una sonrisa burlona, ya no pudo seguir mordiendo su lengua—. Claro, Jian, porque visitar la casa por temas de “amigos” es igual a ser la hija adoptiva.

Jian le lanzó una mirada fulminante, pero Qiang Hao continuó sin inmutarse.

—Aunque, pensándolo bien, tal vez sea tu destino eterno, ¿no? Eso explicaría tu relación tan especial con los padres de ZhanYu. Eres como la mascota…

—¡Hao! —Hendery interrumpió a su amigo regañándolo.

—… Como la hermana de ZhanYu —Termino de decir volteando los ojos.

La burla arrancó una carcajada de WenJun, quien no perdió la oportunidad de desordenar el cabello de Qiang Hao suavemente.

—¡No empieces WenJun! —exclamó Qiang Hao, intentando arreglarse el cabello, mientras lanzaba una mirada fulminante hacia WenJun.

—No te enojes, se te encrespa el pelo —A WenJun le gustaba molestar a Hao, era entretenido para él.

—¿Y tú, ZhanYu? —preguntó Jian, retomando su tono aparentemente despreocupado—. ¿Ya llevaste a Hendery a conocer a tus padres?

ZhanYu negó con la cabeza con tranquilidad.
—No todavía. No es algo que hayamos discutido.

—Es curioso —dijo Jian, recostándose en su silla con aire triunfal—. Siempre pensé que eso sería una prioridad en su relación.

Qiang Hao soltó otra risa breve.
—Claro, Jian, porque tú eres la experta en relaciones.

Jian ignoró la indirecta, pero ZhanYu reflexionaba en silencio. Aunque Hendery nunca había preguntado por sus padres, tal vez ahora era un buen momento para invitarlo a conocerlos. Era un paso importante, y ZhanYu estaba seguro de sus sentimientos.

Por otro lado, Hendery sentía que el aire en la mesa se volvía más pesado con cada segundo que pasaba. La idea de presentar a ZhanYu a sus padres era un territorio que prefería evitar. Sabía que no aceptarían su relación, y el solo pensamiento le hacía doler el pecho.

La conversación siguió, pero ZhanYu notó que Hendery estaba inquieto, su atención estaba puesta más en la comida que en lo que sucedía a su alrededor. Su corazón se apretó ligeramente; sabía que algo estaba molestando a su novio, pero decidió no presionar.

Cuando terminaron las clases, ZhanYu, como siempre, pasó por el salón de Hendery. El Omega recogía sus cosas en silencio, con los hombros un poco tensos.

—¿Listo? —preguntó ZhanYu, apoyándose en el marco de la puerta.

—Sí —respondió Hendery, intentando sonar más tranquilo de lo que se sentía.

—Oye Hendery —Le llamo Qiang Hao, que estaba sentado detrás de él, en voz baja —En serio, ¿Estás bien?

Hendery suspiro y asintió, aunque Hao no le creyó.

—Eres muy testarudo, ¿Ya te lo dije? —Hao se paró de su asiento tomando sus cosas —llámame si necesitas hablar al respecto.

—Claro, gracias.

ZhanYu y Hendery caminaban juntos hacia la casa del rubio, disfrutando del momento tranquilo tras el ajetreo del día escolar. Sin embargo, en la mente de ZhanYu aún rondaba el comentario de Jian sobre conocer a la familia. Después de un rato de silencio, se decidió a preguntar.

—Hendery, ¿alguna vez has pensado en presentarme a tus padres?

El Omega se detuvo por un instante. Su cuerpo se tensó, y sus ojos celestes evitaron los de ZhanYu mientras jugaba con el borde de su mochila.

—Yo… no lo sé… —murmuró, nervioso, sin saber cómo continuar.

ZhanYu frunció el ceño ligeramente al notar su incomodidad. Con suavidad, colocó una mano sobre el hombro de Hendery.

—¿Estás bien? No tienes que responder si no quieres, pero… pareces preocupado.

Hendery suspiró profundamente, debatiéndose entre decir algo o guardarlo como siempre. Finalmente, habló con voz vacilante.

—Es que... mis padres... ellos... —Hizo una pausa, sintiendo el nudo en su garganta, apretarse aún más—. No sé si aceptarían nuestra relación.

ZhanYu lo miró con calma, esperando pacientemente.

—No es por ti, gege. Es que... ellos tienen algo contra los Alfas. Siempre han tenido esa idea... —Hendery apretó los labios, sin querer decir más. No podía confesarle lo mucho que temía que sus padres rechazaran su relación.




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