Capitulo 22.

-Espera, espera¿Cómo que bastarda?¿A caso os podeis reproducir los elfos y las hadas?-Lety me pone ojos de "¿Tienes 3 años?" y rueda los ojos.

-Wen, obviamente, tu misma eres mitad humano, mitad demonio-Levantó las manos- Cosas de la magia ¿Atiendes a alguna clase de historia?

-¿A las de humanos? Siempre me paso las clases de historia leyendo libros-Me encongí de hombros mientras ella suspiraba.

-Tus malditos humanos, pues ese es el tema, este palacio tiene uno de mis recuerdos más bonitos pero tambien tiene todos los peores.-dijo volviendo la mirada a las criaturas-Si supieras la vida que lleva un bastardo... fingir una sonrisa mientras escondes el dolor de la última paliza de la gente pura, por eso los elfos son tan secretos, parecen regios y con habilidad de dialogo entre especies en el ministerio pero son de las criaturas mas crueles entre los suyos, tienen una gran habilidad de engaño frente al consejo pero los eruditos saben como son, los he visto cuando visitaban el castillo.-Vi como una lagrima se iba resbalando por su mejilla.

De tan solo pensar lo que habia vivido dentro de estas paredes me dio un sentimiento de querrer protegerla, de que fuera una hoja marchita que en cuando la toques se desintegrará por eso cuando corri a abrazarla lo hice lo más delicadamente posible, dejandola soltar todo lo posible y más, no podemos quedarnos mucho más aqui, los recuerdos empezaran a devorarme hasta volverme uno de sus recuerdos, es un acto de defensa del cerebro ante una intrusa sensorial y astral como yo.

-Lety, tenemos que volver, tu cerebro empieza a darse cuenta de que estoy aqui, y lo siento pero me gustaría seguir viviendo un poquito más.

-Claro, si, vamonos de este lugar-Diciendolo con un tono de desprecio, alzó sus ojos por última vez hacia el balcón-Y gracias Wen, esto es algo que no queria que supiera nadie, es como mi secreto, yo y claymore y aparte la oscuridad y la humedad del castillo acompañandome mientras estaba sola pero sobretodo te prohibo que le digas nada de esto a Claymore, él no sabe nada y me gustaría que siguiera siendo feliz en la ignorancia.

-No te preocupes hadita-dije guiñando un ojo- todo el mundo tenemos un "pequeño" secreto.

-Tu amor por los mundanos no es un secreto.

-Shhhhh... ellos no lo saben, es suficiente.-La tape la boca con el dedo riendome por lo bajo- ellos son felices ante la ignorancia de este mundo de locos.

-Que poética estas tú ultimamente...-me encojo de hombros por su respuesta.

-Estoy descubriendo muchas cosas en muy poco tiempo.

-Y el amor... y demonios que parecen angeles buenorros...-Dijo mirando y rodando los ojos intentando disimular.

-¡Lety! Tan solo intento averiguar por que sabe tanto de mi.-La cogí de la mano y la guié hacia la salida, pasando por el pasillo y por la zona del castillo olvidada-Bien, dame las manos.-me hizo caso y cerró los ojos como otras veces habia hecho para practicar.-Recuerda que tienes que concentrarte en donde estabamos, la biblioteca de Beelzebub.

-Sonará extraño pero hecho de menos a ese Sebastian, no le viste en el limbo Wen... parecia un caballero y todo, ese cuerpo de nefilim fué lo mejor que le podia haber pasado.

-Intento concentrarme-Musité.

-¿No te puedes concentrar si hablo de él o por que hablo simplemente?

-Callate-Empecé de nuevo a recitar los conjuros, pidiendo permiso para salir, que forcé al ver a Lety más concentrada con mi vida amorosa que con ganas de salir a la vida real <<Astral et integrum relinqueret obumbratio>>-Repite el conjuro conmigo anda, si no no va a servir de nada.

Seguimos repitiendo el conjuro hasta que por fin Lety pudo volver, odia los viajes astrales y por eso intentaba distraerse pensando que podría sacarla facilmente sin su ayuda, algo de lo que no he hablado todavia es que la magia no es infinita, un mago puede acabar agotado si usa muchos conjuros seguidos o manteniendolos un largo tiempo, y yo acababa de sacarlos del limbo y mantenido en un viaje astral por lo menos 10 minutos reales, los que serían 2-3 horas astrales asi que más les vale que me esten preparando con una cama bien hecha o un helado de kilo.

Cuando salimos nos encontramos las caras preocupadas de Asderel y ..¿Beelzebub? ¿el segundo demonio más fuerte preocupado por una mestiza y una maga cualquiera? Pero parecian estarlo de verdad, mire a mi alrededor y seguiamos en la biblioteca, Lety tumbada en una mesa mientras que yo estaba en el suelo mirandola desde abajo, ella me dio una sonrisa radiante y nos reimos bastante al ver la situación después de la charla sobre mis amorios y como habia acertado en todo.

-Señoritas ¿Que las hace tanta gracia?-Dijo una voz que provenia de detrás de los chicos, que se mostró con cara preocupado-¿Sabeis con que emergencia me han llamado estos estúpidos?

-¡TROY!-Grito Lety abalanzandose a sus brazos-No te puedes imaginar lo que te he echado de menos.

-Hey maguito, no te acostumbres a esos tratos o Sarah se pondrá celosa.-Troy se puso rojo como un tomate y despues carraspeó.

-Ya veo que estas perfectamente Wen, después de que este amiguito tuyo -Dijo señalando a Sebastian- Me llamará para ver que os pasaba, os encontré en un simple viaje astral, venia preocupado joder, avisa a la gente a tu alrededor antes de meterte en la cabeza de alguien.

-Perdón, papi....-Dije poniendole ojitos-Pero era de vida o muerte, Lety no se despertaba y no sabia que hechizo habia hecho o como me habian engañado-Solté al aire claramente refiriendome el Beel.