Gaby
Pasaron alrededor de dos semanas y me estaba dirigiendo a la casa de mis padres, el día de hoy se iba a realizar la pedida de mano, es decir que hoy conoceré a mi futuro esposo.
Claro que estoy nerviosa, porque no sé que me espera de hoy en adelante, pero de lo que estoy segura es que nada sera facil.
Durante estos días mamá ha estado llamando a mi celular para preguntar diferentes cosas con respecto a los preparativos, pero no tengo ni las ganas ni mucho menos la emoción porque se que este matrimonio solo será por conveniencia que a ambos involucrados nos beneficiará.
Estoy bajando del auto, llevo puesto un vestido al cuerpo color palo rosa y tacones a juego con accesorios de color plateado, seguido tocó la puerta y es la nana quien me abre y me recibe cariñosamente, me dirijo a la sala y veo toda la decoración que está, en el que se reflejan flores blancas y rojas, pienso y digo se nota que no conocen cuales son mis favoritas.
Mamá llega a la sala y me saluda, me indica que en media hora llegará la familia Viteri, tomo asiento en uno de los muebles y siento como en mis ojos se acumulan lágrimas, me giro bruscamente a limpiarme con la mano, no les quiero dar de que hablar al verme tan vulnerable.
Después de media hora mi familia ya se encuentra en la sala y en eso escuchamos el timbre de la casa, nana es quien se dirige a la puerta para dejar pasar a los invitados.
Me fijo en qué ingresa una pareja de edad seguido de 2 chicos y chicas, entonces pienso que uno de ellos será mi prometido y si es así no está mal, porque ambos son guapos uno con ojos de color celeste y el otro con un negro profundo.
Después de las presentaciones conozco los nombres de cada uno, nana llega al salón a indicar que podemos pasar a la mesa y la cena ya esta servida .
Todos se ponen de pie y van avanzando hacia la mesa, mientras me levanto siento un fuerte mareo, me dije a mi misma que es toda la tensión y que el levantarme tan rapido me está pasando factura.
Suspiro profundamente y me dirijo hacia la mesa, cada uno ya se encuentra en sus respectivos asientos, cenamos en total silencio y de vez en cuando se entabla alguna que otra conversación.
Eran alrededor de las diez de la noche, cuando siento que un objeto es golpeado, levanto mi mirada y me fijo en que papá está llamando la atención de todos con una copa en sus manos, de inmediato supe lo que se venía, se pone de pies y dice las siguientes palabras.
-Buenas noches con todos, ambas familias sabemos el porque de esta reunión y es para llevar a cabo el compromiso de nuestros hijos y fucionar las empresas.
Seguido a ello se levanta el señor Leonardo quien va a ser mi suegro, recuerdo su nombre por las presentaciones.
-Buenas noches, lamento informarles que recibí un mensaje de mi hijo indicando que no podrá asistir a la reunión porque le salio una emergencia en una de las sucursales, pero me indico que te entregará el anillo Gabriela y que podemos llevar a cabo la organización de la boda ---dijo todo aquello mientras me pasaba una cajita de terciopelo negro.
Abro la caja y me fijo en un hermoso rubí con una piedra de color rojo, está lindo me dije. Pero sentí un sabor amargo al darme cuenta como se están llevando las cosas, claro que se que no hubo ninguna emergencia sino que el involucrado no quiso asistir. Todo esto me lleva a pensar si antes que le indicaran sobre este matrimonio el tenía una vida ya hecha o tendría alguna novia.
Casi ya iban a tocar las once de la noche todos nos despedimos, fijando que la fecha de la boda será en dos semanas y que ambas madres se encargarán de la decoración que conlleva todo esto.
Lorena se me acerca y me da un fuerte abrazo y me dice en el oído ---solo tenle paciencia y verás que el se va a enamorar de tí. Solamente la mire y sonreí, porque sabía que aquello iba a hacer mentira, no creo que vaya a existir mas que una amistad, solo espero que durante la convivencia no nos querramos matar.
Seguido me despedí de todos y salí rumbo a mi casa, en el trascurso le llamé a Andrea y le dije que vaya a dormir conmigo que quería conversar con ella, tenía pensado contarle la verdad de este matrimonio, nadie más que no sea de la familia sabía de esto, porque ante la prensa tenemos que mostrarnos como un romance solido y que nos encontramos sumamente enamorados.
Llegué a casa, subí a mi habitación y me puse mi pijama, después de unos veinte minutos el timbre sonó y sabía que había llegado mi amiga, baje y le abrí y me di cuenta que había traído chucherías, esto siempre pasaba cada que dormíamos juntas, olvidabamos completamente las dietas.
Subimos a la habitación y dejamos buscada una película en Netflix, respire profundo y le dije ---Nena me voy a casar en dos semanas.
Ella me miró como si estuviera loca y se empezó a reír ---esta buena la broma.
Seria le respondí ---es verdad, te lo estoy contando para que me acompañes en esta aventura, porque no quiero estar sola y se que solo cuento contigo ---le dije entre lágrimas
Me abrazó y estuvimos conversando, le dije todo lo que había pasado y porque llegar hasta estás circunstancias, me abrazó y lloramos juntas, porque desde pequeña nuestro mayor deseo era encontrar un hombre que quisiera bajarte la luna y solo vea por tí, pero todo había cambiado bueno solo para mí, porque ella en estos momentos está con mi hermano que se que daría la vida por ella.
Nos dedicamos a ver la película mientras comíamos helado de chicle, era mi preferido, alrededor de las dos de la madrugada nos acostamos a dormir, pues mañana era lunes y debíamos regresar a nuestros trabajos.
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Era lunes a eso de las ocho de la mañana ya me encontraba arreglada para ir al trabajo pero tenia que pasar dejando a Andre por su casa, asi hicimos.
Llegué a la empresa y me dedique a revisar unos documentos porque a las dos de la tarde teníamos una reunión con la junta, llegado este momento me levanté para dirigirme a la oficina donde iba hacer la reunión, pero mientras caminaba sentía cansancio en el cuerpo y de momento la vista se me nublo, pestañee varias veces hasta volver a la normalidad.
Me dije mentalmente que debía visitar al médico, pues ya me ha pasado en algunas ocasiones, yo le atribuía que era el estrés que estaba mostrando consecuencias en mi cuerpo, pero ya van reiteradas veces que ocurre lo mismo.
Ingrese a la oficina y ya todos estaban presentes, se dió inicio a la reunión y pautamos lo que íbamos a mostrar en la próxima gala que se iba a dar en un evento en la ciudad, en el que asisten varias empresas de diferentes paises.
Se hizo la hora de salida y me retire a casa, en el transcurso revise el nombre del doctor Rodríguez y le dejé un mensaje, tenía pensado visitarlo mañana para que me haga un chequeo.
Luego de media hora recibí un mensaje con la cita agendada y la hora, y es así como me sumergí en un sueño hasta el día de mañana.