Sebastián
Llegamos a casa después de la fiesta que se efectuó a las afueras de la ciudad, había tomado varios tragos para relajarme, mi familia había tomado la decisión de que por ahora nuestro hogar sería mi apartamento, tenía entendido que las pertenencias de ella ya se encontraban aquí.
Durante el camino nadie dijo nada, íbamos en total silencio, pero me saco de lugar y se me nublo la mente cuando pregunto sobre nuestra habitación.
La arrincone a la pared con una de mis manos que ejercían presión en su cuello, estaba fuera de sí. Le dije palabras fuertes y no me interesa saber si ocasionaron algo dentro de ella, de igual forma ambos sabíamos las circunstancias de este matrimonio.
Desde el mueble donde estaba sentado le indique cuál sería su habitación, inmediatamente subió las escaleras, me levanté y busque en el bar una botella de whisky, necesitaba tomar algo fuerte, esto me estaba matando, se que le dije que ya había una mujer que ocupaba un lugar en mi vida y es así, porque yo aún seguía guardando sentimientos por Belén.
Luego de una hora, subí las escaleras y me dirigi a mi habitación, había sido mucho por hoy, mientras caminaba por el largo pasillo, escuchaba unos sollozos, supe que habia sido ella, pero no hice el intento por disculparme, sabia que si mamá se enteraba de como la habia tratado, seguramente me daria una cachetada, ella siempre me inculcó que por mas fuerte que sea la situacion jamás debía faltarle el respeto a una mujer, y prácticamente era lo que qje estaba haciendo.
Esa noche mientras me encontraba acostado en mi cama, me dije a mi mismo que la iba a hacer arrepentirse por haber accedido a este compromiso, la pensaba a orillar hasta que ella abandonara la casa y solo aparentariamos con nuestras familias, pero por lo pronto cada quien podia vivir por su cuenta.
Mañana era domingo y tenía entendido que debíamos presentarnos en casa de papá, iba a ver una reunión con ambas familias para hacernos saber nuestras posiciones desde este momento.
*****
Me levanté alrededor de las diez de la mañana, fui un rato al gimnasio y después me duche para bajar a hacerme algo de comer.
Mientras bajaba las escaleras escuchaba que alguien trasteaba en la cocina, se me hizo raro, hoy no era el día que debía venir nana a ayudarme, ella se encargaba de mi casa de lunes a viernes y los fines de semana le daba dias libres para que se reuna con su familia, a ellos los consideraba como mi segunda familia, teníamos muy buena relación.
Cuando iba a ver quién estaba en la cocina, me fijé que en la mesa habían dos platos para desayunar, habían tostadas francesas, huevos revueltos, café y jugo de naranja. Pensé que tal vez nana quería ayudarnos el día de hoy, por eso me senté en una de las sillas, me metí un bocado y gemí de lo bueno que estaba, pero inmediatamente me arrepentí cuando vi que por la puerta de la cocina aparecía Gabriela sin una gota de maquillaje y con un vestido suelto de flores, llevaba el cabello suelto.
-Hola buenos días, preparé el desayuno para ambos ---dijo mientras tomaba asiento en la otra silla
Inmediatamente me levanté furioso y vote todo lo que se encontraba en la mesa al piso, le dije las siguientes palabras mirándola con fuego en los ojos.
-Qué eres estúpida, está comida está mala, no sirves para nada ---dije en voz alta, sentí que se estremeció con el golpe de los platos al caer al suelo.
No le di tiempo de nada y me acerque hasta donde estaba, la levanté de un solo tirón de la silla y grité con un tono de voz fuerte.
-Espero que sea la última vez que se repite esto, métete en la cabeza que no es un matrimonio normal, no quiero que te aparezcas en mi camino.. --mencioné mientras ejercía fuerza en su brazo, la solté cuando ví que se le estaba haciendo morado, por último lance la siguiente daga para luego salir de casa e irme a un bar.
-No quiero que utilices y toques nada de lo que hay aquí, y claramente eso incluye la cocina, tienes que ver si comes en tu habitación o te encargarás de comer en restaurantes. ---puntualice mirándola directamente, note que en sus ojos se acumularon lágrimas y bajo la cabeza.
-Quedo claro lo que dije? ---pregunte agarrándola fuerte de la barbilla, no dijo ninguna palabra solo asintió con su cabeza y salió inmediatamente para las escaleras, asumí que fue a la habitación.
Salí más atrás de ella, y me dirigí a la puerta y cerré fuertemente, subí al carro y busque el contacto de Andrés, después de varios tonos, contestó
-Hola, podemos vernos en el restaurante de siempre ---pregunté
-Hola Sebas, está bien, en unos segundos salgo para allá ---respondió y colgó
Maneje hasta llegar al restaurante, me baje y le di al encargado del lugar las llaves para que ubicará mi carro en el garage, avance y me senté en una de las mesas del final.
Mientras esperaba a Andrés, la mesera me cogió la orden y por lo pronto había pedido un jugo de naranja.
Después de diez minutos Andrés se estaba sentando en la mesa, estuvimos conversando mientras esperábamos que llegará la orden que habíamos pedido.
-Pense que estarías disfrutando de tu primer día de casado ---dijo mientras brotaba fuertemente una risa
-Qué, ahora eres chistoso? ---respondí con mal humor
-Bueno y como les fue en la madrugada que llegaron a casa pudieron conversar ---preguntaba
-No, no me interesa tener una conversación con ella, solo le dije algunas cosas ---me miraba atento, se que deducía que algo habia pasado y ya me preparaba para el interrogatorio.
-Dime la verdad de lo que sucedió, porque se y te conozco que algo bueno no ocurrió ---puntualizó poniendose una mano en la barbilla
Le comenté todo, desde el momento que la acorrale en la pared, las palabras que le dije, no le omití nada de lo que había sucedido e incluso le mencioné lo que pasó hoy antes de venir.
-Sebastián, te desconozco sinceramente, tu no eres así, nose que este pasando por tu cabeza en estos momentos para que la estés tratando de esta manera, te recuerdo que es una dama y se merece respeto. ---dijo molestó
-No entiendo porque la quieres defender, se supone que debes estar conmigo, apoyándome a mi, no a ella ---le dije tomando un poco de jugo
-Tu bien sabes que te he apoyado en todo, pero en ésto no, jamás he sido partidario de la violencia, yo me pongo en el lugar de ambos, se que para ninguno de los dos es fácil esto que está ocurriendo en sus vidas, pero no entiendo el por qué hacer mas complicadas las cosas cuando pueden llevarse bien.... dime algo, que tienes en mente con todo ésto que estás haciendo ----habló
-Lo que busco es llevarla al límite para que abandone la casa, si por mi ya me estuviera divorciando, pero se que debo esperar dos años para poder llevarlo a cabo, además quiero retomar mi vida anterior y eso incluye a Belén.