Gaby
Después de tanto porfin había acabado el tratamiento de quimioterapia, incluso ya tenía en mano los exámenes que me mandó el doctor a penas finalizaba el proceso.
Por supuesto que aquello me tenía tensa y muy nerviosa, no había pegado ojo en toda la noche por lo mismo, mi vida estaba dependiendo de estos últimos resultados.
En este momento estábamos esperando entrar al consultorio y vernos con el doctor, a mi lado se encontraba mi esposo mientras teníamos nuestros dedos entrelazados.
-Estoy nerviosa amor ---le dije mirándolo
-Todo saldra bien ya verás ---dijo dandome un beso en la frente
Después de varios minutos el médico nos llamo y permitió nuestra entrada, ya el tenía los resultados en mano y estaba leyendolos detenidamente. Entonces alzó su mirada y ví esperanza.
-Bueno Gabriela déjame decirte que estos exámenes han salido muy bien.
-Entonces que significa eso ---pregunte con el corazón en la mano
-Qué las células cancerígenas se han matado de raíz ---dijo finalmente
Inmediatamente empecé a llorar, Dios no me había abandonado a pesar de que muchas veces le reclamé, hoy estaba aquí libre de la enfermedad. Mi esposo me estrecho entre sus brazos y me besaba lentamente.
Después de disfrutar de esta victoria mía, el doctor me dijo que debía hacerme chequeo cada seis meses para ver qué todo marchara bien.
Salimos del hospital y Sebastián dijo que me llevaría a un restaurante a celebrar. Efectivamente almorzamos y después de tanto porfin pude tomarme una copa de vino, estaba muy feliz. Después de salir del restaurante nos encontrabamos en el carro hasta que hablé....
-Amor puedes llevarme a la iglesia del centro ---tenia que ir a agradecer a Dios por ésto.
-Lo que tú quieras princesa ---dijo giñandome un ojo
Llegamos a la iglesia y entré, me arrodille y entre palabras y lágrimas le agradecía tanto está nueva oportunidad que me estaba brindando.
-Dios así como vine hace mucho tiempo a reclamarte y hacerte preguntas del porque a mí, hoy vengo para decirte y agracerte que jamás me dejaste sola, no niego que el camino fue muy difícil, sin embargo tu me sostuviste entre tus manos cuando sentía que mi vida caía a un pozo oscuro. Hoy quiero agradecerte por haberme sanado, por haberme dado una nueva oportunidad y por haberme dado un hombre para que camine a mi paso y sea mi apoyo de vida. ---dije con lágrimas en los ojos, no eran lágrimas de tristeza, estás representaban que porfin veía al sol después de tanta oscuridad.
Pasaron las semanas y hoy era el evento de la empresa, por supuesto todo salió y como empresa estábamos creciendo grandemente. Fue un evento magnífico en el que asistieron nuestras familias y muchos socios. Este fue considerado por la prensa como el mejor evento del año.