Capítulo 16

–Ni te atrevas Guapo –Steven sale de la piscina y vine hacia mí –Steven no –Él se acerca a mí y comienza a mover su cabello tirando pequeñas gotas de agua –Bueno, ya me mojaste ya cálmate –Él me sonríe y se acerca a mí, me levanto de donde estaba y comienzo a correr alrededor de la alberca

–Si te agarro no te vayas a enojar conmigo amor –Sigo corriendo y me paro haciendo como que ya me canse, tocándome el pecho y “Quejándome” de algún dolor

– ¿Estas bien? –Me pregunta cuando se acerca a mí y niego –Me comenzó a doler el pecho –Él se acerca más a mí y hace como que me mira, de pronto se abalanza sobre mi haciendo que los dos caigamos a la piscina

 – ¿Estás loco o que te pasa? –Digo con algo de dificultad –Casi me ahogo baboso –El comienza a reír y yo trato de salir de la piscina pero Steven no me deja –Si no me dejas juro que no duermes conmigo-El me sigue agarrando y me dejo llevar

– ¿Ya fue todo lo que peleaste? –Pregunta enarcando una ceja –Es muy difícil ganarte –Le digo sonriendo

–Liam mamá y papá están mostrando amor en la piscina –Eli nos mira y Liam llega corriendo agarrando a su hermana y tirándola también a la piscina

–Ahora si todos estamos juntos –Dice Steven abrazándome por detrás

Abro mis ojos y tardo un minuto en saber dónde estoy ¿Cuánto tiempo llevo aquí?, poco a poco me levanto, agarro mi celular y miro la hora 23:23, lo recuerdo llegan a mi mente, como Adrien le daba RCP y Nath le daba toques

Me levanto rápido y voy al cuarto, ya no está, le marco a Héctor y rápido me contesta

– ¿Dónde estás? –Es el primero que dice –Fuera del cuarto de donde estaba Steven –Digo –Okey, quédate ahí –Cuelga y miro a todos lados

–Me asuste cuando no te mire –Dice abrazándome – ¿A dónde se lo llevaron? –Pregunto dolida –Dijeron que necesitaban continuar con el procedimiento, que en unas horas llamarían para entregarnos el cuerpo, me estoy haciendo cargo yo de todo –Asiento –Todos fueron a tu departamento, fui y los deje y me vine rápido, pero cuando entre a tu despacho no estabas

–Lo siento –Digo mirando al suelo –Vamos a tu departamento, necesitas ducharte y descansar un poco –Dice y comenzamos a salir, en el primer piso se encuentran varios doctores, los miro en cuanto las puertas del elevador se abren, no tengo ganas de ver a nadie agacho mi mirada

–Andrea –La voz de Nath hace que voltee a verlo –Lo sentimos mucho, en verdad, hicimos todo lo que pudimos, en verdad, lo siento –Lo abrazo y comienzo a llorar –Tú  no tienes la culpa de nada, nadie la tiene, es algo que no podíamos evitar –Digo como puedo

–Lo siento, me disculpe la primera vez que despertó –Adrien se pone a mi lado –Me dijo que no tratara nada con tu sobrina y le dije que solo te quería hacer enojar –Me perdono e hizo que yo lo perdonara, realmente no sé por qué pero lo hice, extrañare pelear con él, lo siento tanto –Me abraza y le sonrió un poco

–Está bien –Le digo –En cuanto sepa del funeral les avisare con alguien por si quieren ir, lamento dejarlos con mucho trabajo pero en verdad no sería de ayuda si estoy aquí –Nadie dice nada y doy vuelta para ir afuera, por primera vez mirare donde fue que mi esposo tuvo el accidente

–Tranquila, no te preocupes, hemos cuidado de este HospitalClinica por varios años, no te decepcionaremos –Nath pone su brazo en mi espalda y decido enfrentar la realidad de una vez

Héctor me abre la puerta y comienzo a recordar

–Está loco, quiere hacerme enojar nada más, vámonos –Lo jalaba para salir de la clínica y Steven quería regresar –Vamos guapo –Salimos de la clínica y no me llegue a percatar de que había muchas personas afuera

–Steven, necesito que vengas conmigo –Lo jale y para mi desgracia se me soltó de la mano, haciendo que casi caiga al suelo, Steven se percata y me trata de levantar pero de un momento a otro, de  un abrir y cerrar de ojos ya no lo veo, escucho muchos gritos ¿Qué está pasando?

Me levanto como puedo y me percato de que hay mucha sangre, hay muchos cuerpo Dios mío, busco a Steven –STEVEN –Grito para ver si me escucha –STEVEN –No oigo respuesta alguna, Doctores y enfermeras comienzan atender a los heridos, como si alguien me llamara volteo hacia mi izquierda y miro un auto impactado en un poste de luz, comienzo a caminar buscando a Steven y para mi gran mala suerte lo llego a encontrar Jesucristo no por favor

Agarro mi cabeza, y comienzo a llorar, Héctor se percata y me abraza –Vamos Andy, tranquila –Yo caí ahí y él quiso levantarme cuando ya no lo mire

–Shhh, ya no digas nada, vamos, cierra los ojos si quieres –Lo hago pero no dejo de llorar, enfrente de la clínica esta su auto, rápidamente me sube y no abro mis ojos, no puedo, todo me duele

–Ya puedes abrirlos, ya estamos lejos –Los abro y en efecto ya no está cerca el hospital, ya casi llegamos a mi departamento –No quiero ver a nadie, quiero estar sola, no dejes que se me acerquen por favor