Capítulo 5

Capítulo 5

            Los tres chicos bajaron a desayunar. Mientras Lance bromeaba con Mina y Ángel, se les apareció por detrás Eve, Michelle que en brazos tenía un gato blanco y Cooper.

            –Hola chicos –saludó Michelle amablemente–. ¿Van a entrar al equipo de patinaje artístico?

            Ángel y Mina quedaron sorprendidos, pues nunca escucharon hablar de que había tal equipo en el colegio. Los dos, indignados, miraron dudosos a Lance.

            –Lo siento, olvidé comentarles. En el colegio se puede participar en el patinaje artístico, tanto hombres como mujeres, o en parejas. Mi hermana participa.

–Mina, ¿piensas participar? –le preguntó Eve de mala gana, como siempre–. ¿Acaso piensan que van a ganarnos el sábado? Yo digo que van a quedar como perdedores y destrozados gracias a nuestro equipo –dijo viendo a su amiga Michelle y con voz de vanidosa–. Nosotros vamos a ganar porque Mishi es una de las mejores de Locatux –pasó su mirada de desprecio a Lance y Ángel.

–Aparte tenemos a Leo Tarín con nosotros, es un excelente y espectacular patinador –dijo Michelle peinándose su cabello con los dedos de la mano. Luego se marcharon.

–¿Leo Tarín? –preguntó Mina. Lance pasó enfrente de Mina y los dos se quedaron viendo, asombrados. Michelle volvió con Leo. Mina vio al chico; estaba muy sorprendida, no sabía que decir.

–Leo, te presentamos a los perdedores –dijo Eve abrazando a Leo por los hombros.

–Sorpresa –dijo Leo y se empezó a reír. Luego de unos segundos se detuvo.

–Pero Daniel me dijo que no estudiabas aquí.

–¿Leo, conoces a esta tonta? –preguntó Eve un poco confundida.

–Claro que si –dijo viéndola–. Y no es ninguna tonta.

Mina y Leo se dieron un abrazo. Eve y Cooper miraron a los chicos algo confundidos.

–En fin –dijo Eve separándolos.

–Ya basta, Eve; no seas celosa y vanidosa. No tienes derecho a hacer lo que se te dé la gana. No te soporto cuando eres así –dijo Michelle un poco enfadada al ver la actuación de su amiga. Eve se sorprendió.

–¿Qué has dicho? ¿Cómo te atreves a hablarme así? –la miró enojada–. ¿Desde cuando estás a favor de esta clase de idiotas?

–Desde que noté lo idiotas que ustedes dos son –dijo señalando a Eve y Cooper– frente a la gente que no les ha hecho nada. ¿Por qué se comportan así?

–Eso no te incumbe –dijo Cooper que se empezaba a enojar mucho.

–¿Sabes qué? Eres un caso perdido, un fraude. No sirves para nada, nunca nos serviste en nada– dijo Eve.

–No tienes derecho a hablarle así –dijo Leo que ya se estaba hartando del asunto. Se paró al lado de Michelle–. Michelle tiene razón; ustedes no tienen derecho a decir mentiras de uno y menos tratarlos mal.

–Ahora tú también estás en contra… –dijo Cooper que empezaba a acercarse a Leo. Michelle le agarró el brazo a Leo para que no se pelearan.

Sebastián había escuchado el alboroto y entró al comedor a ver que sucedía.

–¿Qué está pasando aquí?

–Tú no te metas, no eres nadie para defenderlos; esto es entre ellos y nosotros –dijo Eve tan enojada que miró al chico con odio.

–Un poco más de respeto, Eve –le dijo Sebastián.

Eve y Cooper se dieron la vuelta y se marcharon enojados.

Michelle dejó escapar un suspiro y soltó el brazo de Leo que ya estaba más tranquilo.

–¡Vaya! Que pelea –dijo Alex tocándose la cabeza–. Felicito a Michelle por una buena conclusión.

–Gracias –dijo Michelle haciendo una pequeña reverencia y sonriendo.

–No sabía que podías defenderte tan bien de ellos –le dijo Leo.

–Siempre les he querido decir lo que pienso de ellos. Ya no me importa su amistad si no pueden tratar bien al resto de la gente. La verdad, se lo merecían.

–Bueno, por lo menos no te quedarás sin amigos. Ahora estás en nuestro grupo –dijo Mina amablemente y sonriéndole.