LA BAYADERA

— ¿Michael? Por fin me llamas, amor ¿Qué fue lo que pasó contigo?

— Lamento no haber podido hablarte antes bebé —Dijo con una voz un tanto triste—

— Te oigo muy raro, Michael ¿En verdad todo está bien? ¿Tu tía enferma se encuentra bien?

— Ja, ella se encuentra mejor. Es solo que... me dio una gripe horrible aquí y ni siquiera pude salir para buscar un lugar con más cobertura en la Zona y se me hizo imposible llamarte, pero no es nada malo. No quiero que te preocupes.

— Quería abrazarte antes de venir aquí.

— También yo y lo siento. Hoy comienza tu gran noche y no debes sentirte triste ¿Estás lista?

— Lo estoy y me siento muy ansiosa —sonreí al teléfono-

— Eres la mejor, Gina y brillarás sobre ese escenario. Te amo y deseo todo lo mejor para ti ésta y las otras noches.

— También te amo, y me sentiré más tranquila ahora que he oído tu voz.

Al colgar la llamada, no supe si sentir alivio o quedar igual de preocupada tras oír a Michael pues a pesar de haberme prometido que todo estaba bien, yo no me creí toda esa historia. Algo había sucedido, algo que de modo a no preocuparme, no me lo iba a contar y me sentí dividida en medio de la angustia y la felicidad.

Por dentro deseaba que todo culminara lo más rápido posible para volver a casa del mismo modo que deseaba que toda esa magia no acabara jamás.

Prestos para salir a escena, el elenco principal ya aguardábamos detrás del escenario. Los nervios se disparaban hasta el cielo nocturno de Viena pero debíamos ignorar los sentimientos internos que nos carcomían.

Al salir a escena no debía ser yo, ni Giuliano Pasutto (Solor) debía ser él, ni ninguno de los demás miembros del elenco. Poseíamos roles que cumplir y era el momento de salir a brillar ante una multitud que nos elevaría a la cima con sus aplausos si las cosas resultaban perfectas o nos aplastaría con sus críticas en caso de cometer errores.

Giuliano: No tengas miedo —Me dijo con una tranquilidad envidiable—

Giuliano Pasutto, alumno de último año de la Academia estatal del Viena quien obviamente cargaba más experiencia que yo, presentaba unos de sus últimos desafíos antes del concurso que lo llevaría a una de las metas de todos los bailarines y bailarinas. Ser reconocido y contratado por alguna Compañía de Ballet que lo llevara por todo el mundo viviendo de su arte.

ACTO I

ESCENA I: "EL BOSQUE SAGRADO DELANTE DEL TEMPLO"

Los guerreros regresan de una gran casería y Solor el más noble de todos se une a ellos, el mismo reclama minutos más tarde que lo dejen solo para así orar ante la llama sagrada, pero una vez que han partido los guerreros, Solor pide al Fakir Magdaveya que organice un encuentro con Nikiya, la bayadera del templo. Al mismo tiempo los sacerdotes y el gran Brahmán ingresan y ordenan a Magdaveya que reúna a los otros Faquires con el fin de preparar la llama sagrada para las inminentes celebraciones.

Las Bayaderas hacen su aparición y entre ellas, Nikiya quien ha sido escogida para alcanzar el rango de "Gran Bayadera". Al verla, el Gran Brahmán quedó fascinado por su belleza siendo así que le declaro su amor pero esta lo rechaza por ser el un hombre de Dios. Las ceremonias comienzan y las Bayaderas llevan agua a los Faquires, aprovechando la ocasión Magdaveya comunica a Nikiya los deseos de Solor. La joven consiente el encuentro pero el Gran Brahmán advierte esa conversación y comienza a sospechar que la joven guarda algún secreto.

Al finalizar la ceremonia los asistentes retornan al Templo y Magdaveya aconseja a Solor que se oculte en el bosque para esperar a Nikiya. Cuando ambos jóvenes se encuentran, deciden jurarse amor eterno ante la llama Sagrada sin ser visto, el Gran Brahmán observa desde el interior del Templo espiando a los amantes quienes luego de separarse, éste, furioso invoca a los Dioses para que Solor sea destruido.

ESCENA II: "UNA SALA DEL PALACIO"

Los guerreros son invitados al Palacio para rendir homenaje a Solor, ocasión en el cual el Rajah anuncia que en recompensa por el valor del joven le entregará a este la mano de su hija Gamzatti, en matrimonio. Al serla presentada, Gamzatti se retira el velo quedando Solor deslumbrado ante su belleza, el joven no puede resistirse a su encanto y a pesar de estar unido a Nikiya por un juramento, acepta el ofrecimiento del Rajah.

La fiesta comienza con la llegada del Gran Brahmán quien revela al Rajah los lazos entre Solor y la Bayadera. El Brahmán supone que el Rajah eliminará a Solor, sin embargo para su sorpresa el propósito del gobernante es dar muerte a Nikiya. Gamzatti escondida oye toda la conversación y decide entonces encontrarse con Nikiya para tratar de persuadirla en que abandone a Solor.