-Nueva casa-
Jungkook me observaba en silencio, trataba de decir algo pero parecía arrepentirse. Era la primera vez que compartía con alguien lo que sentía al respecto de esta boda, lo mejor es que fue con él, así no habría más problemas.
JK: T/N… Yo… realmente no sé cómo te sientes, yo sabía que debía casarme de esta manera, pero tú… tu esperabas una vida diferente, solamente por los enredos de nuestros padres estás así, yo nunca llegué a pensar sobre conformar una familia solamente por amor, quizá por ésa razón te he tratado tan mal, solo… te pido que me disculpes por lo que dije anteriormente, tratemos de ser amigos ¿ok? Haré todo lo que esté a mi alcance para hacer que estés bien, por favor, sé paciente conmigo, no soy bueno tratando con las personas a no ser que sean asuntos de negocios.
En sus ojos pude ver sinceridad, puede que él no sepa como relacionarse, pero al parecer es mi deber ayudarle, debemos trabajar como equipo, no quiero llevarme pésimo con la persona con la que debo estar el resto de mi vida, por más aterrador que suene esto.
JK: Entonces… ¿Amigos? –Me miro sonriente y extendió su mano-
T/N: Amigos –dije correspondiendo con un apretón de manos-
Una semana después…
¡Por fin terminó el crucero! Tengo un leve problema con el agua pero es tolerable, hoy veremos la casa que mi suegra preparó para nosotros, ésa era la costumbre que ésa familia tenía, lo cual me aliviaba un poco porque no quería tener que hacerlo yo.
M/J: ¿Y les gustó? –nos cuestionó después de darnos un pequeño recorrido en lo que sería nuestra nueva casa, Jungkook me miró esperando mi respuesta a lo que yo asentí felizmente.
Era una casa de dos pisos, muy iluminada, sólo había un pequeño detalle que se le escapó a la madre de Jungkook… Sólo había una habitación instalada.
M/J: Querida, ¿Podemos hablar un momento? – Dijo tomando mi mano y llevándome al patio trasero- Mi niña, cuando me casé con el padre de Jungkook, no nos conocíamos, es más, nos llevábamos pésimo los primeros tres meses de casados, él estaba enamorado de otra persona y yo… no tenía ganas de una relación, así que cada uno estuvo haciendo su vida sin el otro, independientes, como dos desconocidos viviendo bajo el mismo techo, pero… ya no podíamos seguir así, hasta que decidimos hablar y comenzar a interesarnos en las cosas del otro, me refiero a, intentar ser amigos, conocernos más, hasta el punto que nos enamoramos, nadie podría creer ahora nuestro pasado, lo amo demasiado… a lo que me refiero con esto, es que traten de darse una oportunidad antes de que sea tarde, a su padre y a mí nos llegó a costar bastante, debimos casi perder al otro en un accidente, para que supiéramos lo felices que éramos juntos, además… no los hemos elegido al azar, más bien, para que se complementen, tienen más en común de lo que han pensado y su pasado está más conectado de lo que pueden imaginar.
T/N: Madre… sé que usted está preocupada por su hijo, agradezco muchísimos sus consejos, pues, usted conoce mejor a su hijo. Estoy dispuesta a hacer lo que usted me diga, confío en que sus consejos serán de grandísima ayuda.
M/J: estoy mil porciento segura de que eres la esposa perfecta para mi hijo, me siento segura al saber que cuenta y contará con tu ayuda… cualquier pregunta o cosa que quieras compartir conmigo, aquí estoy, espero que veas en mí una segunda madre –Dijo esto con una enorme y encantadora sonrisa-
Tu suegra salió después de hablar con su hijo, los dejó solos para la cena… y… ahí estaban, sentados el uno frente al otro, no podrían haber estado más incomodos de lo que ahí estaban. Comían en silencio, evitando cruzar miradas.
JK: T/N… Mañana en la noche habrá una reunión de empresarios e inversionistas, como futuro CEO de lo que será nuestra empresa debo ir –Te observó fijamente- y… me gustaría que fueras conmigo, quiero presentarte a todos como mi esposa, mamá me contó lo difícil que vivió con papá y que ella vivía prácticamente aislada del mundo, no quiero eso para ti, quiero ser un buen esposo –te regaló una bella y sincera sonrisa-
Realmente no esperabas ése detalle de parte de Jungkook, sentiste un gran alivio, y sus ojos expresaban mucha sinceridad, después de una semana de casados, él ya se estaba mostrando un poco más abierto y sincero, lo cual apreciabas en gran manera.
T/N: Gracias Jungkook –dijiste con una enorme sonrisa- realmente no tienes idea de cuanto lo aprecio, yo… también espero ser una gran esposa para ti.
Jungkook te sonrió y siguieron comiendo, ésta vez con una gran sonrisa en ambos rostros. La hora de dormir llego, sólo había una habitación y una sola cama, al entrar ambos cruzaron unas miradas algo apenadas, rieron levemente y desviaron sus miradas.
T/N: sonará extraño, pero duerme en la cama –Sonríes- yo dormiré en la hamaca que mi padre me obsequió hace un par de años, realmente he querido utilizarla pero no había podido –Revisas una de las cajas que estaban en el armario y encuentras la famosa “hamaca”- ¡Aquí está! –Dijiste alegre, atrayendo la curiosa atención de Jungkook-
Editado: 14.05.2021