Obsession [libro #1]

Capítulo 30

-30-

El anónimo, otra vez.

A la mañana siguiente escuche mi alarma a lo lejos, pero no quería levantarme, me encontraba cómoda, sintiendo pequeñas caricias en mi cabello reconociendo rápidamente a la persona que estaba a mi lado. Abrí mis ojos un poco acostumbrándome a la claridad que había entrado por las ventanas y el balcón de mi habitación.

La alarma volvió a sonar.

Mire mi escritorio notando que ahi habia dejado mi teléfono la noche anterior, suspire. De un momento a otro sentí unos brazos rodear mi cuerpo por completo atrayendo rápidamente hacia él, sonreí un poco al sentir los pequeños besos de Ian sobre mi cuello.

—¿Cuánto llevas despierto?

—Lo suficiente como para mirarte mientras duermes.

Me giré rápidamente encontrándome con su rostro, una pequeña sonrisa me recibió de su parte, su cabello desordenado y sus ojos achinados gracias a que estaba recién levantado me hizo sonreír un poco. En definitiva se sentía bien despertar con él.

—Eres un acosador.

—Si hablas de quien acosa a quien…—Susurro alzando sus hombros—. Creo que terminas perdiendo.

Aquello me hizo sonreír un poco para alejarme y darle un leve golpe en su hombro logrando que riera. Sabía que en cualquier momento lo diría nuevamente, no se quedaría tranquilo hasta reclamar y hacerme un pequeño recordatorio que sabía que lo acosaba.

Escuché mi puerta sonar por lo que decidí cubrir la boca de Ian evitando que se riera nuevamente o que dijera algo, podrían escucharlo. El me miro frunciendo el ceño, pero aun asi no se quejo a mi agarre.

Mire la puerta levantando un poco mi cuerpo que estaba cubierto por mis sábanas.

—Ki, levántate, hoy nos lleva James, tiene que llegar temprano. —Escuché la voz de Luke detrás de la puerta.

Ian con una de sus manos libres quitó mi mano de mi boca haciendo un ligero apretón en mi mano lo que me hizo girar un momento para mirarlo.

—Si quieres puedo llevarte. —Susurro.

—¿Qué? No, no, sería peor. —Susurre nuevamente negando mientras me relamía mis labios buscando una respuesta para Luke—. Si, está bien. —Hable un poco más fuerte—. Dame unos minutos.

—Bien, no tardes, si no James nos mata. —Y al decir eso escuche sus pasos alejarse.

Suspire algo más calmada, para luego mirar a Ian que me veía divertido.

—¿Qué te da risa?

—¿Kiara le tiene miedo a sus hermanos? Eso sí que no me lo esperaba.

—Ay, callate, Ian. —Resoplé molesta pero él solo se limitó a dejar un beso en mi cuello para luego levantarse recogiendo su ropa.

Lo mire unos segundos mientras se colocaba sus boxers, la pequeña idea de que había pasado la noche entera con Ian paso por mi cabeza haciéndome sonreír un poco en mis adentros. Suspire un poco apartando mi vista de la espalda de Ian para colocarme algo de ropa.

—¿En serio no quieres que te lleve?

—¿Y llegar contigo? —Reí un poco—. No.

—¿Te da vergüenza ahora? Anoche no dijiste nada, recuerdo que tuve que cubrir tu boca un par de veces.

Y al decir eso le di una mirada de pocos amigos mientras él se rió un poco terminando de atar sus zapatos. Se levantó de la cama agarrando su camisa que estaba en el suelo, solo llevaba sus vaqueros dejando su torso descubierto, lo que me hizo detallar la araña que se había tatuado sobre la cadera. Cuando ya estaba cerca de mi por un momento no me sentí nerviosa por su presencia, los nervios habían desaparecido de un momento a otro.

Ian miró mis ojos de manera curiosa, quizás buscando algo en ellos, pero finalmente a los segundos agarró mi mejilla y me dio un beso el cual continúe dejando mis manos sobre su pecho desnudo. Pero aunque me gustara besar a Ian, no me podía demorar, sabía que mis hermanos me esperaban.

—Debes irte. —Hable al separarme de él un poco.

—Quizás con otro beso me pueda ir.

Rodee mis ojos divertida para luego empujarlo un poco.

—Ian, es en serio.

—Yo también te estoy diciendo algo en serio. —Me miró con una pizca de diversión haciéndome empujarlo nuevamente, pero este se mantuvo firme.

Me había dado por rendida, pero si él me hacía perder más tiempo, mis hermanos me matarían. Ian me regaló una sonrisa divertida.

—Me gusto que hayas sido buena enfermera anoche, me cuidaste muy bien.

Entendí el doble sentido en sus palabras así que lo empuje un poco, pero este me dio un beso corto, que yo también se lo devolví haciendo que el beso durara más de lo que debería, pero a los minutos se separó de mi para ponerse su camisa rápidamente.

—Nos vemos dentro de un rato, Foster.

—Claro. —Asegure en un tono sarcástico y este solo me sonrió para luego irse por mi balcón.

Agarré mi teléfono rápidamente que se encontraba en mi escritorio, donde lo había dejado anoche. Revise por encima de quien me había escrito tanto anoche mientras me encontraba entretenida ligándome a mi vecino.



#255 en Thriller
#97 en Suspenso
#2844 en Novela romántica

En el texto hay: amor, suspenso, dramas.

Editado: 21.02.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.