Belle. Datos misteriosos. -
Belle. Datos misteriosos. -
Las leyendas urbanas hablan de sitios recónditos y lugares misteriosos
El pequeño dormía en un cuarto cerca de la planta baja. Lo había llevado conmigo, aunque sabía que no podía hacerlo. Pero debía tener alguna pista más sobre Lucius. No podía creer que hubiera alguien así aquí en ese lugar tan inhóspito y fuera de contexto de la sociedad. También sabía que debía llevarlo al centro de asistencia social. ¿Pero qué harían con él?
En el medio de la noche el niño despertó al oír unos sonidos. Entre sombras vio una de mis mascotas. Prefiero decirle así para no mencionar proyectos.
- ¡¡¡Ahhhh!!! – corrió temeroso a una puerta
- ¿Eh? ¡¡Oh no!! – fui directo a la planta baja. Al encender la luz aquel estaba temeroso de cuclillas. – ¡Ey! Todo está bien
- Eso…eso..da miedo..lo vi..
- ¿Te refieres? – Y en el techo una suerte de arácnido con forma de perro y de su mismo tamaño se posaba - No te preocupes – No atacan. Solo está allí - ¡¡No debí dejarlo suelto!! Es un perro, solo que tiene varis patas peludas y algunos ojos de mas – Bueno no podía darle una explicación al niño de lo que hacía un monstruo quimera aquí – Eso cortaba todos los contextos de la desaparición de Lucius. -
- ¡Lo hé visto!
- ¿Cómo que lo has visto?
- ¡¡Ejem!! – Asiente.
- Imposible.. Es una criatura creada por mí. -
- Lo he visto – y se le entumecen las piernas con cierto temor a una reprimenda. -
- ¿Cuándo y dónde?
- Cuando se desdibujó todo..y el señor se fue
- ¿Eh? ¿Te refieres a Lucius? ¡¡Dime más!!
- No recuerdo..
- Mmm..lo siento debes seguir descansando. Iré a llevarme a la mascota para que no te moleste ¿Sí? Y de repente una puerta se abrió sola
- ¡¡Ahhh!! –
- No te preocupes.. a mí también me asusta. – Eso es causa de Lucius. –
Llevé al niño a la habitación, y me aseguré de que no hubiera nada que lo molestará. Cosmos apareció justo
- ¡Gatito! – Dijo
- Cosmos..Quédate con él – Le ordené, y el gato ronroneaba al lado de Leandro. Por suerte a diferencia de otros felinos, Cosmos es muy sociable.
Aseguré todo, y luego fui a mi móvil. Una y otra vez veía el mensaje que le había enviado. Nada de señal.
Al otro día desperté, y me dispuse a comentarle al doctor. Él tenía muchos conocidos en los ambientes del gobierno para ayudarnos en su búsqueda. La policía debería realizar los rastrillajes indicados, ¿Pero sino encontraban nada?
- Doctor, tengo un problema
- ¿Es sobre Lucius no? ¡¿No hay noticias?!
- ¡Nada aun!
- No te preocupes. ¿Vendrás a la oficina?
- Estaré allí al mediodía
- Te espero, hija – Y cortó
A veces el doctor me decía hija. Era cuando se suscitaba un problema de mi parte. Es como un padre, a pesar de ser mi mentor. Debía pensar en donde dejar al niño. En principio vendría conmigo. Luego debía llevarlo a asistencia social
Despertaba así que le preparé el desayuno. Unas tostadas con dulce de leche y otras con mermeladas. Un vaso de leche con chocolate, y para mí solo un té verde para calmarme un poco
- ¡¡Gracias!! – Sus ojos brillaban como si nunca hubiera probado algo así
- No te preocupes. ¡¡Come lo que gustes!!
Como en media hora recibí una llamada de la policía.
- ¡Hola!
- ¡¡Buenos días!! ¿Doctora Inosanto? Soy el oficial Petersen
- ¡Si oficial!, ¡buenos días! – Pensé esperanzada por alguna buena noticia
- Solo le quería comentar que ya terminamos las pericias en el automóvil. No hay rastros de terceros. Solo sus huellas, y las de su marido. Tampoco en el perímetro. Lo único que tenemos es una pisada de calzado, que suponemos que es de él, como huella cerca del plantío donde se entrecruzan los arboles. Allí antiguamente estaba el parque. El carro debe venir a retirarlo.
- ¡Está bien! ¿Alguna hipótesis?
- Nada.. no tenemos sugerencias, ni conjeturas. Podía decirse se cayó en algunas de las grietas, pero los rastreos de los perros, indican que no.
- ¿Caerse?
- No se alarme..
- No..Lucius, es un tipo inteligente. Jamás tendría ese tipo de accidente.
- Que fuera un accidente, está descartado. Tampoco es que hubo actividad sísmica señora. Así que no debe preocuparse, si su esposo pudo llegar a caer en algunas de las grietas. La hipótesis más factible es que se haya ido por su cuenta. Hay personas que suelen hacerlo por determinados motivos. ¿No sé? ¿Ustedes tenían problemas? Algo que suponga ruptura de pareja..oh.. perdone que pregunto esto
- No nada de ello..
- Solo podemos conjeturar eso. Que el señor Gunnes decidió irse. Y nada más. Cuando venga debe firmar unos papeles, para el retiro del auto y otros asuntos. ¿Está de acuerdo?
- Está bien. Estaré allí
- ¡Gracias, y disculpe, no poder darle una solución!
- De nada. Adiós – Colgué
- Adiós. – Colgó
- ¿No hay remedio? ¿Pero por qué Lucius desearía irse? - ¿Con otra? – Ladee la cabeza – No seas estúpida Belle – Eso no es posible – tengo una llamada de él perdida, luego de que se callera la señal. ¿Ahí está la señal? ¿Eso tendría sentido? – Volví a ladear la cabeza de manera negativa. -¡¡Uf!! Nada tiene sentido. – Me dije
Los oficiales que me preguntaron por la familia de Lucius. La realidad es que él fue adoptado por una pareja., la cual pereció en un accidente. No tiene hermanos, ni allegados. Era un lobo solitario. Incluso si no fuera por mí, nadie sabría de su existencia, ahora que lo pensaba. Podría haber sido peor, sino avisará a nadie, pues él siempre estuvo solo hasta antes de conocerme. Era terrible, pensar que no existes en éste mundo, aunque no le daba importancia a ello. Solo cumplía su trabajo. Él. Y sus voces internas. De alguna manera me enamoré de Lucius, y no lo dejaré jamás, por eso Belle Inosanto hará lo que sea para encontrarlo. -