UNA PLATICA PENDIENTE  

CAPITULO DIEZ 

Me senté de golpe en mi cama y vi a mi par estaba Vicky en un plácido sueño, pero debí haber brincado mucho en la cama porque se despertó  

-¿Qué pasa Lucí?  - busco su celular de la mesa de noche – es de madrugada 

-Si, duerme – pero mi voz no está bien y por más que luche que sonora normal falle 

-Rayos mujer, tienes una cara y estas sudando, como si hubieras estado en el gimnasio tres horas – se sentó a mi par y me rodeo con su brazo sobre mis hombros - ¿pesadilla? 

-Si – afirmo con la garganta seca 

-Bien vamos por un vaso de agua – di un largo suspiro, pero salí de la cama y me puse las pantuflas, (bueno una de ellas, tomo las muletas, sin ellas no puedo caminar), bajamos las gradas en total silencio, sacó los cristales y los llenó con agua de la jarra que estaba sobre el desayunador, tomé dos grandes tragos y sentí como el agua fría recorría todo mi cuerpo y las venas de mi cuerpo se enfriaban - ¿Qué fue esta vez?      

-Ése maldito día que me perseguirá por el resto de mi vida 

-Bien, pero ya lo sobreviviste Lucí, no se puede borrar, pero lo puedes dejar de cargar – sacudí la cabeza, - bien poco a poco, ¿te pasa a menudo?  

-No, solo cuando pienso en… - doy otro trago a mi agua y siento el frio nuevamente, tan reconfortante – en porque nunca voy a poder ser feliz o tener una vida normal 

-Eso no es cierto ¿algún chico que te guste de la universidad?  

-Ninguno que me agrade 

-Demonios Lucí, debes superar lo de Erick 

-Erick, es la muestra perfecta que los chicos son estúpidos y no pretendo pasar por la misma vergüenza otra vez, y tampoco romper mi corazón en añicos 

-Vamos chica, ese tonto era un niño de diversificado con todas las hormonas a todo lo que da y con poco seso, si no te valoro por lo que eres no es tu problema, es suyo, debe haber un chico, para ti– hace una pausa recordando  

-No existen los hombres adecuados para nadie Vicky, ¡deja de soñar mujer!  

-Eres necia y cabezota, hay personas buenas en el mundo 

-Vicky no quiero hablar de eso, - muevo uno de mis dedos frente a ella para hacer énfasis en el “NO” - no es un tema de discusión, las razones te las puedo numerar – su mirada es de “vamos dime cuáles son tus estúpidas razones” e inconsciente mente le pongo los ojos en blanco, ella solo me da una risa divertida  

-Uno – le digo alzando un dedo frente a ella – al enterarse de lo que me paso me odiara 

-Dos, tengo que cuidar de mis hermanos 

-Tres, no se va a fijar en una chica que viste como chico – trato de no mostrar ninguna expresión de que es la razón más falsa en este argumento, pero fallo rotundamente y sus labios forma un puchero que no puede evitar - 

-Cuatro – y pongo cuatro dedos frente a su nariz - no pretendo cambiar mi vestimenta por llamar la atención de un chico – me da una sonrisa que no logro descifrar del todo y le levanto una ceja para dejar claro mi punto y ella solo se encoje de hombros para restarle importancia  

-Cinco, mi tipo de trabajo no me permite una relación 

-Seis, si por alguna razón el omitiera todas las anteriores, su seguridad estaría en riesgo por salir conmigo, - siento una gran frustración recorriendo todos mis músculos que van alcanzando mi rostro y para evitar que se note me cubro poniendo mis manos en el rostro, doy un suspiro para continuar  

-Siete, todas las mujeres que trabajamos en ese tipo de clubes siempre son señaladas por la sociedad y no creo que él lo soporte o viva de acuerdo que una cantidad muy alta de hombres me vea con un mini short, un top, súper maquillada en tacones altos – doy un respiro pues solo de recordar como todos los hombres que llegan al club nos comen con los ojos y nos quitan la poca ropa que tenemos, me dan arcadas. 

-Y si para ti no son razones suficientes, lo son para mí – me señalo con el pulgar - No quiero seguir con esta plática, porque no voy a cambiar de opinión  

-¡Demonios Lucia!, ¡te quiero un montón! – y me frunce la frente -  pero tus razones son estúpidas, todas ellas son la misma cosa y no me pongas tu trabajo de escusa porque si fuera cierto que te preocupas por la seguridad de alguien empezarías por la de tus hermanos o la tuya, ellos son el primer foco de atención no con el que salgas - Si lo que me dice fuera cierto dejaría que alguien llegara a mi vida pero hay más que solo el trabajo, que ella cree que tengo y dejar ese trabajo seria la menor de mis preocupaciones, dado que el tiempo culmina en poco  

-¡No es justo!, - digo y somato con mi puño la barra de desayuno -  ¿sabes que lo hice?, busque en otros lugares antes de aceptar ese trabajo, pero sabes que es una mierda conseguir un trabajo decente que me ayude con los gastos de la casa, los medicamentos, comida y no es que me duela pero los estudios de mis hermanos tampoco se pagan solos, ¡no es el mejor trabajo! – me encojo de hombros -  pero me ayuda con todo eso y me está dando la oportunidad de ahorrar un poco para cuando salga de eso definitivamente y pueda buscar un trabajo respecto a mi carrera sin tener que viajar a la capital ¡demonios Vicky lo sabes! – digo la última frase unos cuantos decibeles más alto – mi amiga debe de seguir creyendo mi cuartada y la sostendré hasta el final 

-Se todo eso y más, ¡te conozco maldita sea! – me grita y extiende los brazos al cielo de forma dramática - Y sé que ese chavo te gusta  Lucí, ¿Por qué no lo aceptas? – tomo las muletas a la par y me pongo de pie, sin poder evitarlo me las quita y me sienta nuevamente en la banco – no, no te dejare salir corriendo, siempre lo haces cada vez que tocamos este tema y se queda en una plática pendiente me vas a escuchar ¿te guste? o ¡no! – me pone un dedo en el pecho y después se cruza de brazos – no la has pasado fácil, no lo niego pero haz salido, ese imbécil te hizo daño te corto las alas como dices tú, pero fuiste lo suficiente mente valiente para salir, enfrentar el problema y alejarte e intentar una nueva vida, te enamoraste de un estúpido niño de quince años – hace una pausa - eso no lo voy a negar, Erick fue eso solo un estúpido niño, que cuando le conté la razón por la cual no iba a tener relaciones con él, salió corriendo a decirles a todos lo que me paso, no puedo negar que el que Vicky lo traté de forma despectiva me recuerde al par de cachetadas que le dio en el patio central del colegio, me hace sonreír y siento esa sonrisa formarse en mis labios -  como todos y fue tan poco hombre que dijo lo que te paso a la escuela cuando se enteró, pero seguiste adelante y los enfrentaste por el resto de la carrera, cuando tu mamá te necesito  - me sentía mal por haberla dejado y culpable por haber hecho que la custodia les perteneciera a mis abuelos y yo me negara a que me llegara a ver, solo ser visitada por mis hermanos durante las vacaciones de fin de año y dos llamadas semanales con ella, la odie por un tiempo por no haberme cuidado de su marido, no fue hasta que me enviaron  aquí que me entere que ella lo había echado de la casa por intentar golpearla que me di cuenta que si tal vez le hubiera contado nunca hubiera salido de mi casa, pero los años que viví con mis abuelos fueron geniales, pero ahora tengo que enfrentar su enfermedad por mis hermanos - de nuevo regresaste a ser su apoyo, su ayuda a cubrir sus responsabilidades y me estás diciendo que no puedes pensar en un opción de formar una vida que no dependan de tus hermanos, no estoy diciendo no te hagas cargo de ellos, te estoy diciendo, busca una razón más para luchar – solo niego con la cabeza