Oculta Verdad

37. La relación

Capítulo 37 

Derek

En total silencio observo que todos comienzan a murmurar y es obvio que hablan de la invitación, en la mesa no se encuentra nadie más, excepto Sandy y yo.

Veo que saca un dulce de su bolsillo llevándolo a la boca.

– Linda invitación – exclamo con el semblante serio.

Ignorando el hecho de que eligió todo y luego me lo comentó y no es que eso me haya molestado, si yo mismo le dije que no tenía ningún problema.

Sólo que…

Esta situación me está cansando.

Quiero hablar de la relación, llevamos años saliendo, pero esto ya no es lo mismo…

Ya no siento nada por ella, me refiero a que ya no están las mariposas en el estómago cada vez que la veo, ya no estoy enamorado.

Creo que debo esperar, al menos a que pase la fiesta y luego aclarar toda esta confusión que hay en mí.

No quiero lastimarla, eso es obvio. No importa la actitud de los demás, nadie merece ser lastimado.

Y aunque ella sea algo especial, no se lo merece.

Hace un momento avisaron que habrá una reunión y que por esa razón las clases seguían mañana.

¡Qué bueno!

– Mi madre está aquí – avisa Sandy y visualizo a la Señora Kemy esperando a su hija al otro lado de la calle.

La saludo moviendo las manos y ella repite el mismo acto.

Observo a Sandy y es idéntica a su madre, no hablo del parecido físicamente, hablo de lo que aparentemente es, muestra una cara totalmente diferente, pero la realidad es otra.

Se marchan dejándome fuera de la Universidad, busco a Emily con la mirada, pero no la veo.

¿Dónde se habrá mentido?

– ¿Hablar? Eso suena muy serio – escucho a Emily saliendo del establecimiento.

No me ha visto porque está hablando por teléfono y a la vez buscando algo en su bolso.

– Mama… voy para allá – exclama antes de colgar, mirando unos segundos la pantalla de su móvil.

Recién al levantar la mirada se percata de mi presencia.

– ¿Todo bien con tu Madre? – cuestiono sin dejar de mirarla.

– Emmm, no lo sé – exclama guardando su celular en el bolso que trae.

– Dice que… tenemos que hablar y no sonaba muy bien – habla bajando el tono de voz.

– ¿Te llevo? – indago, ella asiente con la cabeza dirigiéndose a mi coche, yo hago lo mismo.

Poco a poco volveré a ganarme esa confianza que teníamos, nuestra amistad no puede desvanecerse como si nada, recuerdo cuando éramos niños, prometí nunca cambiarla por otra mejor amiga. Fue una promesa estúpida lo sé, pero ella ha sido siempre la única con quien puedo abrirme tal cual soy.

– ¿A tu casa? – vuelvo a preguntar entrando al coche.

No me responde, se queda un momento inmóvil antes de abrir la puerta como si estuviera observando algo o a alguien.

Volteo mirando hacia la entrada de la Universidad…

Y al único que veo ahí es a Luca parado mirando a Emily.

¿Raro?

Muy raro.

¿Acaso me estoy perdiendo de algo?

Siento que me estoy perdiendo demasiadas cosas. Se que el tiempo que perdimos ya no lo vamos a recupera, es decir no es tiempo perdido, porque yo elegí a Sandy, a lo que voy es que, si hubiera pensado más de una vez antes de cambiar una amistad por la relación que tengo, lo hubiera hecho.

Ya ni se en lo que estoy pensando.




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