64. Te quiero

Capítulo final 

Emily

Estaba completamente segura de que, no iba a llegar. Luca me llamo unas 15 veces al igual que Joshua, pero no lo escuche porque deje mi celular en silencio. Si no fuera por mi madre que llego en la mañana no hubiera venido.

Si, llegó en la mañana.

Mamá pasó la noche con Robert, ella dijo que era muy tarde para volver y que habían tenido un problema con el coche, entonces se quedó en el apartamento de Robert que quedaba cerca del restaurante que estaban anoche...

Ella dijo que la pasaron genial, y yo no quise pedir detalles.

Y la veo bien, a pesar de lo que está pasando con el hombre que en algún momento quiso y hasta tuvo una hija...

A pesar de eso, está bien y está intentando rehacer su vida, es lo que importa.

Ahora nos estamos dirigiendo a, no sé a dónde vamos...

– ¿A dónde vamos? – indago sin mirar al chico que tengo en mi costado.

– Es sorpresa – habla en la misma posición en la que me encuentro yo, Luca también tiene una almohada negra y su cabeza ligeramente hacia arriba.

No digo nada, cierro los ojos levemente y los vuelvo a abrir al sentirlo tomar mi mano, volteo la cabeza para encontrarme con su mirada, me sonríe por un momento luego vuelve a mirar hacia el frente, sigo mirándolo, admirando su rostro...

Me dejo llevar por mis pesados parpados, cerrando los ojos.

– Ya llegamos... Oye llegamos – escucho a Luca hablar, pero lo ignoro.

– ¡Llegamos! – el sonido de una trompeta, esos que se llevan en los estadios lastima hasta lo más profundo de mis oídos. Volteo para mirar quien fue, y veo a Joshua sonriendo, bajándose del autobús.

– Imbécil – espeto bajando mis cosas detrás de Luca.

Son las 11 de la mañana y aún no he comido nada, no puedo creer que me dormí todo el trayecto.

– Buenos días – habla Luca. Estamos todos afuera del bus con un montón de bolsones a nuestro costado. Estamos en frente de una casa de madera, es enorme...

Está rodeada de árboles y flores por todas partes. No es un lugar aislado, de hecho, hay una carretera con doble avenida.

– Aquí dejaremos algunas cosas y caminaremos – Luca se adelanta metiendo algunas cosas al igual que las demás personas. Joshua sigue con el ruido de la trompeta como si estuviera festejando algo.

Saco una bolsa de papas fritas ya que vamos a caminar. Derek mete sus manos sacando un montón de mi desayunoalmuerzo. – ¡Ey! – reprocho a la vez que veo a Joshua pasar a mi lado con la cosa que hace ruido, lo tiene en la boca porque las dos manos las tiene ocupada.

– ¿Te ayudo? – hablo colocándome en frente de él, Josh asiente con la cabeza. Estiro la trompeta que traía en la boca y lo meto en unas de las bolsas que tenía por el brazo.

– Mis oídos ahora van a descansar – hablo caminando hacia otro lado con mis papas fritas.

– Exageras... – espeta continuando su camino hasta el interior de la casa.

Lo ignoro al ver a unos guías turísticas indicando por donde debíamos ir, me adelanto dejando a los chicos metiendo las cosas que habíamos traído, detrás de la casa hay un camino que solo se puede seguir a pie, es un largo puente de madera rodeado de árboles, como un bosque y es totalmente seguro porque no está colgado al aire, solo es un camino normal, pero de madera.

Me asegure de traer la cámara fotográfica que llevo a cada paseo que hago, mientras nos vamos adentrando al monte, tomo varias fotos de los lugares que me parecen llamativos...

Mientras más caminamos, más tranquilo es el ambiente. Un letrero de madera me llama la atención...

"Sigue adelante...

Aun no llegas"

Le tomo una foto y continuo, volteo a mirar hacia atrás viéndolos acercarse, Luca y Derek se cambiaron de ropa, en cambio Joshua solo se puso una gorra de su entrenamiento.

– El lugar es bellísimo – comento al ver a Luca cerca de mí. – Sabía que te iba a gustar – habla poniéndose un gorro idéntico al que trae Josh por su cabeza.

– Quédate justo así – hablo tomándole una foto acomodándose la gorra. – También hay para ti – espeta Joshua dándome otro gorro igual al suyo.

– Tan lindo, pero no me... – al instante soy interrumpida. – Me lastimaras si no te lo pones – exclama poniendo su mano sobre su pecho, como siempre exagerando la situación.

– Tómanos una foto – Luca le pasa la cámara que traía colgado por el cuello y se pone a mi lado, me agarra de la cintura y me atrae hacia él.

– Digan... Joshua – espeta a la vez que Luca y yo soltamos una carcajada, nos muestra las fotos que tomo y todas salieron borrosas.

– Trae acá – Derek le quita la cámara y se prepara como si fuera un fotógrafo profesional.

– Ahora digan, pitsaaa –

– Pitsaaa – exclamamos al mismo tiempo, revisamos las fotos que tomo y todas salieron bien.

– No es tan difícil – Derek molesta a Joshua, él se adelanta conversando con la chicas que van enfrente de nosotros.

El camino de madera termina en la orilla de un lago, a unos pasos más hay varias tiendas de camping ya armadas.

Llegamos...

El recorrido hasta aquí fue demasiado entretenido, nos dirigimos a unos de los camping y empezamos a dejar todas las cosas que traíamos.

Antes de irse por donde vinieron los guías turísticas nos dijeron que debíamos ir a buscar leñas para hacer unas fogatas en la noche y eso estamos haciendo ahora...

Nos adentramos al otro lado del bosque en busca de leñas, en realidad los chicos son quienes están buscando, yo solo estoy tomando fotos de ellos mientras me dicen que no lo haga.

Caminar cansa, realmente estoy cansada, pero las fotos que he tomado vale todo mi cansancio.

– ¿Podemos descansar? – espeto recostándome por un árbol. – Pero, si no hiciste nada – habla Joshua poniendo ambas manos en su cintura.