CAPITULO 34

EMILY 

Entre sueño siento muchos besos pasar por mi rostro y cuello, causándome un poco de cosquillas, haciéndome despertar.

Buenos días, mi amor.- lo escucho decir entre mi hombro y cuello pegándome a él sintiendo su cabello mojado.

Buenos días, guapo.- le digo con voz ronca y sin poder abrir bien los ojos.

No te vuelvas a dormir.- me dijo asiéndome cosquillas porque si me estaba volviendo a dormir.

Es que tu cama es muy cómoda, te la voy a robar.- le contesto aferrándome a su almohada.

Si es muy cómoda y si quieres te la llevas, pero con la condición que también tiene que llevarte al dueño.- me respondió riendo contagiándome a mí también su risa.

Mm... no tengo ningún problema en llevarme el paquete completo.- le respondí ya con mis ojos abiertos por completo, pero algo adormilados.

Me parece una buena idea, ya está el desayuno que, ¿Te parece si bajamos?.- me propuso levantándose de la cama dándome cuenta de que solo tiene una toalla puesta haciéndose marcar la parte "V" de su abdomen, dándole un aspecto muy caliente y sexi.

Eh....- nerviosa y sonrojada, pues no podía dejar de verlo.- si, pero no tengo nada aquí y quisiera darme un baño primero.

Cariño, ya sé que soy irresistible, pero tampoco es para que te pongas nerviosa, todo esto es solo tuyo.- habló dándose cuenta para luego caminar por la cama y llegar hacia mí dándome un beso.

No me beses, no me he cepillado aún.- le recuerdo tapándome la boca con una mano.- y para tu información no te estaba viendo.

Si claro.- dijo sin creerme.- y sobre cepillarte y bañarte no te preocupes, puedes usar el baño y ahí encontrarás cepillo de dientes nuevo y me di el atrevimiento de pedirla a Luca que te traiga ropa.

¿En serio?.- pregunto, sorprendida y sin creer lo que él había dicho.

En serio amor.- me afirmo acomodando mi cabello que estoy más que segura que es todo un caos.

Bueno, entonces iré al baño.- digo parándome de la cama para poder ingresar al baño.- ¡auch!.- me queje acariciando mi trasero porque Max me dio una nalgada sorprendiéndome su actuar, cosa que no me enojó al contrario me gusto que lo hiciera y espero no ser la única a que le guste que le hagan eso.

Lo siento, me provocaste.- se encogió de hombros, para luego levantarse y llegar hasta mí dándome un beso.- ¡auch!.-se quejó porque en el beso le mordí su labio carnoso.

Lo siento, me provocaste.- le dije encogiéndome de hombros de la misma manera que él lo hizo y sin dejar que diga algo, me metí al baño cerrando la puerta detrás de mí, escuchando su risa detrás de la puerta.

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MAXIMILIANO 

Esa mujer me provoca írmele encima y he estado aguantando la tentación de tirarla a la cama y hacerla mía, pero soy un caballero y la respeto y esperaré hasta cuando ella se sienta preparada porque una relación de pareja no se basa solo en sexo, sino que con amor, fidelidad y respeto.

Bajando hasta el comedor, ya vestido con un traje de color azul oscuro, verifico que todo esté bien con el desayuno porque resulta que mi pequeña es alérgica al café y a cualquier Té que pueda existir, así que solo habrá para ella jugo de frutas natural.

No tuve que esperar tanto a mi pequeña, pues la veo bajar ya vestida con un traje de sastre de mujer de dos piezas color negro con sus zapatillas blancas, dándole un aspecto elegante con algo Sport, sin decir que mi pequeña se ve muy bien con todo lo que se ponga.

Luca tiene buen gusto.- dijo ella llegando hasta mí y sentándose a mi lado izquierdo de la mesa.

Si tiene buen gusto dímelo a mí, muchas veces le he pedido de favor que me haga la maleta.- le contesté dándole la razón.

Si ya me di cuenta.- me respondió para luego mirar la mesa llena de comida.

Como sé que eres alérgica al café y al té, ordené que pusieran jugo natural de frutas para ti.- le dije luego.

Oh, gracias no te hubieras molestado con tan solo un poco de fruta, bastaba.- respondió.

Para nada amor tienes que alimentarte muy bien, ese cuerpecito necesita mucha energía para trabajar y sobre todo para mí.- conteste agarrándola de su mano que se encontraba en la mesa y guiñándole un ojo, ocasionando a que ella riera. 

Bueno a desayunar.- dije para luego ambos empezar a comer juntos nuestro desayuno hablando de muchos temas, pero sobre todo temas de trabajo.

Buenos días señor, buenos días señorita.- saludo Luca ingresando al comedor.

Buenos días.-  saludamos ambos atentos a lo que él quería.

Señor, ya tiene todo listo y le recuerdo que tiene que confirmar su presencia en el matrimonio del Señor Valdivia.- me recordó Luca, ya lo había olvidado, mi amigo me mandó su invitación un mes atrás y lo olvidé por completo por estar ocupado.