EMILY
¿Qué piensas hacer?.- pregunto Alanna sentada frente que mi en la cafetería de la clínica.
Aún no lo sé, pero esta noche también me he ofrecido para cuidarlo, ya veré que pasara, sus papás no estaban tan convencidos, pero Lío me ayudó a que accedieran a volverme a quedar.- le contesto mirando mis manos y jugando con ellos.
Aún no puedo crees que esto esté pasando, todo parece una novela.- dice ella negando y dando un suspiro fuerte.- ¿Vistes como se puso esa loca?.- me pregunto ella riendo refiriéndose a Jimena.
Sí, casi hace un escándalo.- le digo preocupada a que pueda volver.
FLASHBACK
Aquí tienes mi número de celular, yo estoy dispuesta a ayudarte y vengarme de esa loca.- me ofrece su número Estefanía.
La verdad dudaba en recibir su número, pues no quiero que haya problemas y más con la exesposa de Max, sin contar que la loca de Jimena está embarazada y aún todo el mundo piensa que el bebé que ella espera es de Max.
Ok, yo te llamaré.- le miento, pues no pensaba hacerlo, creo que su tiempo ya pasó y por más que lo haga de buena voluntad, ya no es parte de esto.
Bien, tengo que irme, cuídense, esa mujer es capaz de todo.- se despidió solo de mí, pues ella no era muy bien vista por los demás.
Yo los entiendo, pero también sé que Max descuido la relación y, por lo tanto, ambos son culpables.
Si quieres, nos vamos ya.- me dice mi mamá muy seria, pues no estaba muy contenta que digamos.
No, no, Faby por favor deja que se quede.- dice Lío interviniendo detrás de nosotras.
¿Qué?, ¿Acaso nos ha estado escuchando todo este tiempo?.
Mamá y yo nos quedamos mirando, muy sorprendidas, por la manera en la que se metió en la conversación Lío.
¿Por qué tendría que dejarla?, tu hermano solo piensa que esa mujer es su esposa, ¿Acaso quieres que a mi hija la humillen o que piensen que ella es la que se metió entre ellos dos.- le responde mi madre duramente a Lío.
No, Faby, ¿Cómo crees?, yo jamás voy a dejar que eso pase, es más, yo sé que Emily no es una mujer de estar rogando, pero también tienes que entender que mi hermano ha perdido la memoria.- le contesto él alarmado y asustado por la forma en la que mi mamá le hablaba.
Quédate si, por favor.- me rogó Lío con suplico y con ojos de gatito triste.
Yo…- fui interrumpida.
Hola buenas tardes.- dijo una voz detrás de todos nosotros.
Marco Ferreira.- dijo el Sr. Bruno muy serio.
Hola Bruno.- dijo el hombre serio, pero tranquilo y avergonzado a la vez.
Esperen, acaso dijo, ¿Ferreira?, él es el padre de Jimena.
Supongo que vienes por tu hija.- le dijo muy enojado el Sr. Bruno parándose frente a él.
Sí, en verdad lamento el accidente de Max.- dijo calmado y bajando la cabeza.
Mm, Jimena está en la habitación con Max y Franco.- dijo la Sra. Eliana detrás de su esposo.
Si vengo por ella, ¿Podría pasar?.- pregunto con algo de temor mirando a Los Thalassinos papás.
Sí, entre conmigo.- le respondió el Sr. Bruno, ya caminando hasta la habitación de Max con el Sr. Ferreira atrás de él.
Ambos pasaron por mi lado llegando hasta la habitación de Max, ingresando sin tocar la puerta.
A mí me gusta el chisme, vamos.- me jalo del brazo Lío hasta llegar a la puerta, pero sin asomarnos.
Pero, papá, ¿No ves que estoy cuidando a Max?.- le dijo Jimena muy enojada a su padre mientras que esta acariciaba su mano de él.
No voy a mentir que no me molesto ni dolió ver cómo él se dejaba hacer por ella.
No te vayas quédate.- me susurró Lío al darse cuenta de lo que vi.
¿Por qué?, ¿Cuál es tu insistencia?.- pregunto yo mirándolo a los ojos, buscando una explicación.
Es complicado, pero sé que luego lo entenderás ya te diste cuenta de que está loca.- contesto él dejándome con más dudas.
Jimena tienes que ir a casa, este no es lugar para una mujer embarazada.- dijo su padre tratando de que entre en razón.
No, yo me quedo a cuidar a mi prometido, ya que hemos decidido casarnos al salir del hospital .- dijo ella muy ilusionada y como si fuera verdad lo que ella decía.
¿Verdad mi amor?.- le pregunto mirando a Max, quien solo estaba callado observando todo.
Eh...sí.- contesto dándole una sonrisa que más parecía una mueca.
¿Qué?, ¿Es en serio?, no puede ser, él no puede hacer esto.
Mi corazón se partió en más pedazos, mucho más de lo que ya estaba.
¡Papá no quiero irme!.- grito y chillo como una niña con berrinche.
Jimena por favor.- le pidió su padre agarrándola de su brazo.
¡Papá no!.- grito otra vez.- Maxin has algo.- le suplico a Max con ojos llorosos, quien veía la escena como si nada este pasando y llamando la atención de todos.
Esa mujer sí está loca.- susurró Alanna detrás de nosotros asustándonos.
Jimena es lo mejor, tienes que descansar por el bebé y yo también, me duele la cabeza.- le dijo con voz seria y sin nada emoción.
Jimena, mi hijo tiene razón, ve a descansar, yo me quedo con él.- le dijo el Sr. Bruno muy serio mirando a Jimena.
¿No me quieres Maxin?.- pregunto ella llorando y triste mirando a Max, mientras que su padre no la soltaba del brazo.
Claro que…- me acerque más para escuchar su respuesta.- te... quiero, por eso tienes que ir a descansar.- le respondió.
Ok, tienes razón, nos vemos luego.- dijo ella muy feliz acercándose a él y dándole una beso en los labios, que tuve la mala suerte de ver.
Vámonos a la cafetería.- dijo Alanna jalándome del brazo y sacándome de ahí, dejando a Lío parado mirando a donde nos íbamos.
FIN DEL FLASHBACK
¿Dónde se habrá quedado Franco?.- pregunto Alanna tomando de su café.
Aquí.- dijo apareciendo frente que nosotras.
¿Dónde estabas?.- pregunta ella mirándolo.
En el baño de la habitación de Max, me quedé hay para escuchar el chisme.- respondió el muy chismoso encogiéndose de hombros.