EPÍLOGO

24 AÑOS DESPUÉS. 

No, no y no, me niego de que mi hija tenga un novio.- gruño furioso de celos, caminando de un lado a otro delante de mi mujer, quien se reía de mí al verme en esta situación.

¿De qué te ríes?.- pregunto enojado.- no es para nada gracioso.

Max, apenas están saliendo, ni siquiera sin algo, por ahora.- contesto, murmurando lo último.

Ah, sí, claro, no son nada, pero lo va a traer en nuestro aniversario.- digo sarcástico.

Max, tu hija ya no es ninguna niña, ya tienes que entender que tu hija está por cumplir 23 años.- me dice mi mujer, acercándose a mí.

Ella siempre será mi niña, mi bebé y por tu culpa no la puedo meter a un convento.- le reclamo.

No somos católicos y no tienes ningún derecho de meterla a un convento.- me responde ella ya enojada.

¿Entonces qué hacemos?.- pregunto, sirviendo un poco de whisky para relajarme un poco.

Nada, no haremos nada.- contesto.

Esto no podía estarme pasando a mí, lo que más temía ya está aquí y es que mi pequeña princesa, ya tiene un saliente, maldigo el día que la deje ir a esa estúpida fiesta de universidad.

Pero, antes de eso, quiero ponerlos en contexto de todo lo que ha pasado, hoy cumplimos mi mujer y yo 24 años de casados y pareciera como si fuera ayer el día que nos casamos.

Han sido los mejores años de mi vida al lado de la mujer que amo y de los dos hijos maravillosos que tenemos, junto a un perro que por nombre es kalu, fue una total pelea entre mi mujer y mis hijos contra mí, por tener a un perro que ya tiene ocho años con nosotros, yo me negaba a tener uno, pero una noche llena de cositas deliciosas que me hizo mi mujer dentro de un hotel en nuestro viaje a Perú, acepte, pero bueno ya no voy a hablar de eso.

Se preguntarán, ¿Qué pasó con los demás?, y pues es una larga historia.

Franco y Alanna nos ganaron, teniendo cuatro hijos, y dos gemelos y dos mellizos, todo por partida doble.

Mi hermano Lío, ya es padre de dos hermosas y lindas niñas, un año menores que mi hija que son el dolor de cabeza de su padre y las causantes de los casi infartos de mi padre junto con Macky al saber todos que ya salen con chicos y un varón de 19 años quien es una copia de su padre.

Sobre los dos amigos de mi mujer, pues William es padre de un niño que es de la edad de mi hijo, Theo que ya tiene 20 años y Carter quien ya es padre de un niño y papá adoptivo de una linda niña de África, quien es todo un amor que se ha ganado de amor de todos, ambos están casados siendo los dolores de cabeza de sus esposas, que hasta yo me pregunto como los soportan.

Por qué sí, tengo a mi hijo quien llegó por gran sorpresa a nuestras vidas, nos esperamos que él venía cuando mi esposa tenía 5 meses de embarazo.

Fue una total sorpresa para nosotros, pues ya habíamos intentado varias veces en tener otro hijo, quien aparecer no era posible, hasta que un día mi mujer se asustó, pues sintió que algo se movió dentro de ella y como sabrán me hice yo miles de ideas de que pueda ser alguna bacteria o enfermedad incurable, pero no, era mi hijo Theo quien venía en camino.

Mis dos hijos son unidos, pero son las dos caras de la moneda, Mackye es una chica hermosa, amorosa, inteligente, social y extrovertida chica de 23 años que estudia administración de negocios, economía y finanzas, pues ella quiere ser CEO de su propio Banco continental.

Y Theo es un chico muy atractivo, como su padre inteligente, antisocial e introvertido chico que no le hace caso a ninguna amiga de Mackye, pues según él, lo único que quiere es estudiar para que algún día trabaje en la nasa como licenciado en física y otras cosas más, ya está por ir a los Estados Unidos para hacer su carrera por haya, cosa que le está afectando a mi mujer por tener que soltar a su hijo, para que estudie en otro continente lejos de Portugal.

A ella no le gusta hablar mucho de eso, pues ella dice que sería capaz de subirse a un cohete espacial con tal de ir con su hijo.

Y hablando de ella, la amo más cada día y se ha puesto mejor, es la tentación andante para todos esos idiotas que la ven pasar, pues ella no aparenta la edad que tiene, solamente no te atrevas a preguntarle su edad si es que quieres seguir viviendo.

Y yo, pues, ya me jubile de mi empresa, dejando a cargo a Giacomo un hombre de 30 años, muy bien capacitado en todas mis exigencias que pido como dueño y CEO de mi empresa.

Mis padres, aún siguen con vida, pero ya no como antes, pues ya tiene una edad avanzada, al igual que Lilly y Carlos.

Ellos cuatro tomaron la decisión de pasar sus últimos años juntos con nosotros en familia, pues según ellos la vida ya es impredecible.

¿Qué tanto piensas viejo loco?.- pregunto la voz de mi mujer detrás de mí.

¿Viejo?, eso no decías anoche mi amor.- digo yo enarcando una ceja.

Pues, tienes razón...estás mejor que el vino mi amor, mientras más años pasa más rico estás.- me dice la muy sinvergüenza, ocasionando que ría por sus ocurrencias de mi amada esposa.

Al mirarla, puedo ver que valió la pena pelear por ella y no darme por vencido, aun contra la muerte.

¿Ya te he dicho que te amo?.- digo acercándome a ella y abrazarla.

Sí, muchas veces mi amor.- contesto acariciando mis mejillas.

¡Papás!, ¡Ya llegó Mack con su novio.- grito Theo detrás de la puerta de mi despacho.

¡Cállate Theo!.- oí gritar a mi hija.

Nuestros angelitos ya llegaron.- dijo mi mujer.

Si y aquel imbécil que se quiere llevar a mi bebé.- digo enojado.

Ni crea que la tendrá fácil, tendrá que pasar por mi para querer tener algo con mi hija, jamás me niego.

Por qué si él le hace algo a mi hija, no dudaré en ir por su cabeza y lo desaparece de la faz de la tierra y nadie sabrá de él.

Deja esos pensamientos, asesino Max.- dice mi mujer, sacándome de mis pensamientos.