Capítulo 2
El inició del desastre.
Miró el positivo con una angustia terrible ¿Acaso no tengo ya suficiente con tener que lidiar con el abandono? Pues parece que no, ahora también tengo que lidiar con esto.
Respiro y tomo la segunda prueba de embarazo, con la fé de que esto haya sido solo un error. Intento controlar mi pulso tembloroso, y sigo las instrucciones al pie de la letra, está vez no quiero errores.
Abro la según prueba, le quito la tapa rosa que lleva en la punta, y la introduzco en el mismo envase de pis que recolecte un par de minutos antes, cuento 8 segundos para sacarlo, le colocó la tapa y la dejo en forma horizontal y espero. No se tarda ni un minuto en aparecer la segunda raya, y está vez estoy convencida que mi vida perfecta se ha convertido en una absoluta y total desgracia.
De repente todo los sonidos a mí alrededor desaparecen y solo puedo escuchar latir mi corazón, fuerte y desbocado. El aire comienza a faltarme y en mi peso siento el peso de un elefante. No puedo llorar, no puedo gritar, no puedo decirle a nadie. No Tengo idea que hacer... ¿Dios que voy a hacer?
Apenas voy a cumplir 18, acabo de terminar el High school hace unas cuantas semanas, aun estoy esperando los resultados de las solicitudes que aplique para entrar a la universida, ni siquiera trabajo, vivo con mis padres, y Kylian... Kylian no solo me ha dejado sin ningún razón, también me odia e incluso me ha sustituido por alguien mejor: una rubia despampanante, que tiene el cielo en los ojos.
Dejo caer mi cuerpo al suelo y está vez comienzo a llorar con una fuerza tremenda. Estoy privada, ahogada en el caos que ocasionó haberme enamorado hasta la médula de alguien a quién aparentemente yo nunca le importé un carajo.
No controló el nivel ni el volumen de mis sollozos, no controló ninguna emoción, no controló nada. He perdido completa y absolutamente el rumbo.
La rabia me invade y golpeó con fuerza las baldosas de suelo del baño una, dos y hasta tres veces.mi manos están rojas por los golpes, pero no me importa sentir dolor físico, al menos este se lleva el dolor interno que éstoy sintiendo ahora.
Dustin golpea la puerta del baño con fuerza —Emilia, abre la puerta ahora.
Su tono de voz es alto, suena preocupado. Quisiera responderle algo pero no puedo dejar de llorar.
—Voy a tirar la puerta sino abres, sabes que hablo enserio.
Le da dos golpes fuertes con el cuerpo a la puerta, y eso es suficiente para hacerme levantar y abrirle rápido.
Dustin entra como una bala y me mira con absoluta preocupación.—Joder Emilia mírate —Dice y luego me cubre en un abrazo. Estoy simplemente inmóvil. Petrificada, sin alma, sin nada.
—¿Pero que...? —Exclama
Yo caigo en cuenta de que la he cagado otra vez. He abierto la puerta sin tirar las pruebas de embarazo a la basura.Me desespero, comienzo a temblar mientras respiro con rapidez..parezco un chihuahua en invierno. Temblorosa y asustada de que saber que mi hermano se ha enterado y se lo dirá a mis padres... ¡Van a matarme! Aunque en el fondo esto no me importa mucho.
—Dustin ¿Está todo bien? ¿Emilia está bien?
La voz de Nathan se escucha a lo lejos, es evidente que también viene para acá. Dustin sale del shock y coge las dos pruebas, las cajas y hasta el envase con pis y lo tira en la basura. Incluso le da tiempo de sacar la bolsa.
—Voy a matar ese imbécil, lo juro.
Me da un inesperado beso en la frente y coge la bolsa para salir furioso del baño, tanto que en el camino se tropieza con Nathan y ni siquiera se da cuenta. Despierto por fin, el miedo que Dustin y Kylian se lastimé entre si es más fuerte que el miedo de la noticia. Corro tras él y me encuentro con Nathan en a mitad del pasillo.
—¿Que sucede?— me pregunta confuso.
Yo no sé qué responder. Más que — ¡Algo muy malo!
Luego corro tras mi Hermano, y Nathan tras los dos. Agradezco que al menos papá y mamá hayan decidido no cancelar sus planes en el Spa, pues de lo contrario está situación fuese aún más catastrófica.
Corremos sin parar al menos 4 minutos hasta llegar a la playa. Vemos a Dustin divisar con ira entre la gente, es evidente que busca a Kylian y espero la verdad que hoy él no se encuentre en ese lugar.
—¡Dustin! Por favor volvamos a casa— le suplico, mientras le tomo del brazo. Nathan se incorpora a nosotros.
—¡Voy a darle su merecido! Y Nadie va a detenerme—
Dustin se suelta de mi agarré apenas divisa a Kylian dentro del agua abrazando a Selene. Ella está sonriente, besa sus labios tiernamente al menos una cinco veces, las cuento no porque quiera, sino porque cada beso se siente como un disparó a mi corazón.
—Oh no, esto pinta mal— Nathan me saca de mis pensamientos. Y corre en dirección hacia donde Dustin está. Justo frente a Kylian, yo les sigo.
— ¿Creíste que te burlarias de mi hermana y se quedaría así ?— Dustin golpea el agua y está le cae a Kylian y a Selene en la cara. Esto hace que se separen de inmediato y que Kylian se reincorpore para hacerle frente a Dustin.
—No quiero problemas Dustin, lo de Emilia y yo no funcionó, ella estaba al tanto de la situación y ya debe aceptarlo de una vez por todas, no te metas por favor.
Agrega apartándose de Selene, para protegerla y yo siento envidia de ella, también una rabia descontrolada. Que cede un poco cuando ella se acerca a Kylian y se prende de su brazo para evitar que esté avancé y de enfrenté a mi hermano. Yo sigo su ejemplo y hago lo mismo con Dustin, odio la violencia en todas sus expresiones.
—Esta bien, Dustin, estoy bien... Voy a solucionarlo sola, yo puedo ¿Si? Volvamos a casa — le suplico mientras lo halo del brazo. Pero mi hermano está firme, mirándole fijamente a los ojos con rabia y sin ápices de querer irse.
Nathan permanece espectante, quiere intervenir pero siento que también quiere que Dustin le dé unas buenas ostias a Kylian.
—Vez, ya escuchasteis a tu hermana. Parece que poco a poco va recuperando el cerebro. Vuelve a casa, y asunto olvidado para to..—