Odio que te Amo

7.

Capítulo 7

Infernus.

La soledad suele ser una cruel compañía cuando tienes muchas cosas malas en las que pensar.

Después de que mis padres decidieron quitarme su apoyó la herida por abandono creció. Había días en los cuales no sabia si lloraba por Kilyan, por mi madre, por mi padre, por Stanford, por el bebé o por todo.

En el transcurso de la semana Maya me llevo un montón de libros de autoayuda que tenía apilados a un lado del sofá del antiguo salón de Nathan. Y mi nuevo lugar favorito. Del cual no salía amenos que tuviera que comer, o ir al baño.

— Tienes que intentar hacer algo, buscar un trabajo, estudiar, hacer deporte... No puedes encerrarte aquí a echarte a morir, Espabila Emilia, tú no eres así.

—Pero la gente en el pueblo hablará de mi Maya, seré el hazme reír de todos—

Muchas chicas sentían envidia de la vida acomodada que tenía, y en su momento de que estaba con Kylian. Porque por muy cliché que suene, éramosa pareja perfecta: el chico guapo y la rica nerd.

— Ya hablan igual — Maya soltó. Le tomo un par de minutos darse cuenta de que la había cagado.

—¿Que es lo que dicen?— cuestioné curiosa.

—¡Puras tonterías! Eso no importa.

Maya sonrió con nerviosismo e intentó restarle importancia al tema. Pero yo no iba a dejarlo asi, quería saber que estaban hablando de mi.

—Prefiero enterarme por tí, que salir y encontrarme con un comentario de mal gusto — use psicología inversa. Maya cayo en mi trampa.

— Pues te diré, pero por favor no tomes nada en serio, esa gente no vale la pena.— me advirtió.

— Vale ... — agregué.

—Pues Margaret Gray fue la que esparció el chisme en uno de sus lives de Instagram, allí hablo de que cómo Kylian se había aburrido de ti, Conto que te había dado calabazas el día de tu graduación, y que tenía una nueva novia que no solo era realmente bonita sino además dulce y educada.

—¿Cuantas personas había en el live?—

—20 mil... — apreté el puño con fuerza y golpee el mueble

— Perra asquerosa— musité y Maya trago saliva. Me levanté del mueble y comencé a buscar un buen vestido entre las pocas cosas que mi madre me había mandado con Maya.

—¡¿Que haces Emilia?!— Maya me miró impactada.

—Me voy a vestir, y tú deberías hacer lo mismo.

—Vale ¿Pero a donde vamos ?— Cuestionó con dudas.

—A infernus — Maya abrió los ojos con sorpresa.

—¡¿Estas Segura?!— cuestionó casi que infartada.

—¿Te da vergüenza acompañarme? porque si es así puedo ir sola, no te preocupes —

—¿vergüenza? ¡JAMÁS! Iria contigo al fin del mundo y lo sabés, tú comentario me ofende — Se quejó.

— ¿ Entonces porque mierda tienes esa cara?— agregué sacando el vestido Negro despierta pasiones.

—Porque Kilyan, Selene h los demás frecuentan ese lugar.—

—Me da igual esa mandada de pendejos, voy a ir a bailar, si quieren hablar de mi que hablen con gustó—

—Me gusta pero me asusta como vaya a terminar todo esto—Maya contesto con voz baja.

—Solo vístete y apóyame. Quiero ser feliz al menos una noche, antes de que la barriga me crezca y todos se den cuenta de que no solo me dieron calabazas en la graduación, sino que además me dejaron con un premio sorpresa.

—Vale, vale. No pensemos más en eso vamos a divertirnos. —Maya agregó cambiando su actitud miedosa por una divertida...

****************************

Llegamos a Infernus, aprovechado que era noche de chicas. Las mujeres entraban gratis y con un trago de regalo. Por razones obvias no iba a beber así que le regalé mi tiquet a Maya quien parecía una niña con juguete Nuevo.

—Me encanta que no puedas beber, porque eso significa que yo si y que tengo chófer designada — Maya chilló y yo sonreír. Estaba decidida a pasarla bien con mi mejor amiga. — Voy a la barra por una margarita ¿ me acompañas?—Agrego entusiasmada. Asentí.

Caminamos entre la multitud hacia la barra y mientras lo hacíamos me di cuenta que varios chicos me miraban.

—¿Me queda mal el vestido?— le pregunto a Maya porque la situación está tornándose incómoda.

—¿Pero que dices ? Te ves increíble, pareces una diosa griega, por eso todos te miran — Maya agregó eufórica dándome con el codo.

—No creo que sea por eso, pero hoy voy a ignorar todo lo que me moleste y vamos a disfrutar— musito. Maya no me responde porque está concentrada coqueteando con el chico de la Barra.

—¡ehh Emilia!— Benji me saluda con alegría. Yo intento disimular, y mantenerme calmada, porque se que si él está aquí Kylian también está, y el resto de su pandilla también.

—Hola Benji ¡Cuanto tiempo! — finjo emoción.

—Si, joder estás muy ¡hermosa! —Agrego mirándome de arriba a abajo sin disimular.

—Todas siempre te parecen guapas, eso es típico en ti — le dejo saber que le conozco bien y que no voy a creer sus labias baratas.

—¡Que no Emilia! De verdad tía, que bien te ha sentado la separación— agregó colocando su mano encima de mi hombro. Estaba preparada para apartarla cuando Benji empezó a gritar —¡Ey chicos! ¡Mirad! Ha venido Emilia — Scarlett y Logan fueron los primero en mirarme. Ambos estaban estupefactos.

Aún así, me saludaron con "cortesía". Yo estaba temblando, y quería solo buscar la forma de salir corriendo antes de que Kilyan apareciera con Selene por ahí. Pero Benji me tenía casi que presa con su agarré.

—Hola Emilia, que gusto verte por aquí — Scarlett musitó, y me regaló una sonrisa fingida. Siempre super que yo no le caía tan bien, porque decía que era mimada y muy creída.

—Hola Scarlett, lo mismo digo— le regalo la misma sonrisa hipócrita y retiró la mano de Benji de mi hombro. Pero este vuelve a ponerla.

—Hola Emilia - logan se acerca y me saluda con un beso en la mejilla. — me alegro muchísimo de Verte— agrega y sonrió nuevamente de forma forzada.

—¿Y donde está Kilyan? Quiero preguntarle una cosa — Benji agrega y Scarlett señala en dirección hacia la barra.




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