Capítulo 84: El diario de Katia, parte I.
15 de agosto.
Querido diario…
Mucho gusto en conocerte, mi nombre es Katia Ortega.
Te he comprado el día de hoy porque es mi cumpleaños, cumplí 15 años, y como al parecer mi mamá lo olvidó de nuevo, quise darme algo especial de mí para mí.
Falta poco para convertirme en una estudiante de preparatoria, estudié muy duro, mucho más de lo que suelo hacer, y no lo hago porque tenga expectativas qué cumplir, es más bien que no hay muchas otras cosas que pueda hacer, no tengo ningún amigo, ni uno solo, por eso, en vez de pasar el rato afuera divirtiéndome como la mayoría de las personas de mi edad, me quedo en casa y estudió, aunque estudiar también es divertido.
Eres el primer diario que tengo, pienso que será un poco complicado escribir en ti, mi vida no es nada interesante y cada día hago exactamente lo mismo que el día anterior, mi vida es muy monótona y aburrida, a veces quiero creer que eso cambiará cuando entre a la preparatoria y conozca personas y un ambiente nuevo, pero en el fondo sé que siempre será lo mismo, seguiré siendo una persona que no existe para los demás, porque soy una persona invisible.
Incluso lo soy para mamá.
Mi papá fue hospitalizado desde el año pasado, sus riñones no están funcionando bien, antes de eso, mi relación con mis papás era buena, especialmente con mi papá, desde siempre fui más apegada a él porque él era muy cariñoso conmigo y me consentía, decía que yo era su princesa, en cuanto a mi mamá, aunque también me daba mimos, a veces parecía cansada y estresada.
Constantemente la llamaban a la escuela porque los profesores nunca me veían asistir a clases, pero yo lo hacía, lo juro, y yo de verdad no entiendo por qué todos son así, las personas jamás se percatan de mi presencia aun cuando yo siempre estoy presente, y mamá comenzó a creer más en los profesores que en mí, así que me volví una molestia para ella por «no obedecerla y saltarme las clases», y las cosas se volvieron peor cuando mi papá fue hospitalizado, ella ya no tenía tiempo para preocuparse por mí, así que se volvió muy distante, y ahora ya no es capaz de verme.
¿Será que yo de verdad soy invisible? Si nadie me ve, ¿tan si quiera existo en este mundo? A veces pienso que un día, cuando tenga el valor de hacerlo, lo mejor sería morir, no creo que a alguien le importe de todos modos, es más, apuesto a que ni siquiera notarán que yo ya no estaré.
23 de agosto.
Querido diario…
Me quedé en la escuela que quería, pero navegando por internet vi la convocatoria para la realización de un examen para una escuela llamada Marilyn, esa escuela es famosa por ser la escuela privada con el mejor nivel del país, incluso tiene profesores extranjeros.
Es la primera vez que Marilyn va a realizar exámenes, al parecer este año bajó la tasa de alumnos interesados en ella, debido a eso, bajaron el precio de inscripción y darán becas completas a los chicos que obtengan los más altos puntajes en los exámenes que serán realizados por el consejo estudiantil y algunos profesores de Marilyn.
He decidido intentarlo, creo que en una escuela tan increíble como esa podré encontrar una forma de permanecer menos tiempo en casa.
El otro día, mientras leía un libro en la sala, mi mamá se sentó en el sillón de enfrente y se puso a hablar por teléfono, ni siquiera notó que yo estaba ahí, así que regresé a mi habitación para no escuchar su conversación, pero aun así alcancé a oírla decir que a veces le gustaría que yo creciera más rápido para volverme independiente y por fin irme de casa.
Y en realidad la entiendo, desde que mi papá fue hospitalizado, ella la ha pasado duro, tiene que trabajar todo el día y en las noches va a visitar a mi papá, siempre está muy ocupada y aun así siempre me prepara algo de comer, todavía se preocupa por mí en ese aspecto, así que, si yo no estuviera más en casa, pienso que ella podría descansar un poquito más.
6 de septiembre.
Querido diario…
Perdón, no he podido escribir en mucho tiempo, he estado muy ocupada estudiando.
Hoy presenté el examen para la escuela que te había mencionado, en realidad ya han iniciado las clases en la escuela en la que me había quedado originalmente, pero le mandé un correo electrónico al director para explicarle mi situación y él aceptó darme un tiempo en lo que salen los resultados del examen en Marilyn.
12 de septiembre.
Querido diario…
Aún me cuesta creerlo, pasé el examen de admisión a Marilyn. El siguiente lunes será mi primer día de clases, tengo que ir con unos papeles que me han pedido, algunos de ellos necesitan la firma de mi tutor, así que se los dejé a mamá en la mesa para que los firmara, y hace un rato, cuando bajé a la cocina por un poco de agua, la vi leyendo los papeles con una sonrisa en la cara, creo que tomé la decisión correcta al apuntar a Marilyn.
14 de septiembre.
Querido diario…
Hoy fue mi primer día de clases, tomé un autobús que me deja en la esquina de la escuela, como suele suceder, varias personas no se percataron de mi presencia e intentaron sentarse en el asiento en el que yo estaba, y luego se molestaron porque creyeron que yo había corrido y les había ganado el lugar cuando yo estuve ahí desde el inicio…