Miré nuevamente la comida sin querer dar un mordisco a lo que se encontraba en el plato, mayormente no tengo estómago como otras veces para devorarme la comida, es demás, no sé si últimamente he perdido el apetito o solo es otro de mis descontrolados horarios de comida que me impiden desayunar, almorzar y cenar a la hora correcta.
— ¿Qué te sucede Liv? —miré de reojo a mi hermana quien se encontraba preocupada.
—Nada pequeña, solo estoy cansada. —Le sonreí de manera corta.
De nuevo jugué con la comida en vez de comerla, aparte el brócoli de los frijoles y el arroz al ver que empezaba todo a combinarse haciendo que no me apeteciera comer nada, me encontraba en un estado de disgusto y depresión, que apenas en ciertos tiempo pruebo la comida solo para que mis padres no se dieran cuenta que he dejado de comer; por un lado me siento mal en mentirles cuando ellos piensan que mi vida sigue de lo normal después de comentarles que la señora Veronika me despidió del trabajo pero en realidad, todo ha sido lo contrario, ha pasado ya una semana y siento como si las cosas de mi vida, se hubieran descontrolado en tan solo un día.
No sabía cómo se encontraba Leopold, simplemente temía que si preguntaba por él, las cosas se volvieran demasiado complicadas para mí ya que no tenía idea de cómo no sentirme culpable después de haberme ido sin despedirme de él o por lo menos dejarle un mensaje, aunque eso solo provocaría en él un enorme enojo por no darle la cara como se debe pero es mejor por ahora no reunirle más problemas y molestias cuando en la persona que más confió se fue sin darle aunque sea una explicación y si él jamás quiere verme otra vez, estará en todo su derecho, después de todo, lo que he hecho es imperdonable.
Selene por supuesto se ha mantenido en contacto con Elin y eso quiere decir que sabe el estado en que se encuentra Leopold, muchas veces en el desayuno o en las salidas de la universidad ella trata de decirme algo sobre los dos hermanos Engström pero siempre terminó cortando sus palabras por medio de cambiándole el tema o simplemente ignorando sus palabras para decirle que no tengo los ánimos suficientes para continuar con el tema. Por ahora solo trato de olvidar mi propia traición como también de eliminar mis propias promesas rotas porque todo fuera más fácil si yo no hubiera sido muy específica en cambiarle la vida a Leopold cuando no tomé en cuenta todas las desventajas que podía tener con este trabajo, con el comportamiento de Leopold o de los problemas que llegaría a tener con el proceso de las terapias sin decir con los humores malos y de la desconfianza de su madre.
Escucho como suena el claxon del auto de Arath, así que me dispongo a desaparecer para no seguir comiendo antes que mis padres me pregunten si llegué a comer toda la comida; me levanto y tomo el plato y antes de poder huir, observó como mi hermana me vigila, esperando a que deseche la comida así que antes de que dijera algo, me puse el dedo índice encima de la boca y le hice la señal que guardara silencio antes que nuestros padres se enteraran de lo que he hecho.
Ella asiente y se baja de la silla para darme su plato y ponerlo en el fregadero; mientras ella va en busca de sus zapatos, yo terminó por guardar mi comida en un recipiente para sándwich y al final lavo los platos de mi hermana y los míos.
Como mis padres siguen almorzando, solo me acerco a ellos y les aviso que saldré con Arath y que me llevare a Aline conmigo para que vaya al parque, así que ellos al decirme que tenga cuidado, voy en busca de mi bolso y de mis sandalias para salir junto con mi hermana quien ya se encuentra lista con una mochila llena de juguetes y un par de dulces Nerds de la marca Wonka. Tomé su mano y caminamos juntas hacia el auto de Arath; quien parece estar revisando su celular mientras nos espera; abro la puerta trasera de su vehículo y hago que Aline entre primero para luego irle en la parte del copiloto; por supuesto al no ver a Selene acompañarnos me imagine que aún sigue resentida por las palabras que le dijo nuestro amigo la última vez, así que solo suspiré y me subí al auto sin preguntarle a Arath que le había dicho Selene al final.
— ¡Hola Arath! —mi hermano saludo a mi mejor amigo de la infancia.
—Hola princesa, ¿lista para ir al parque? —Arath empezó a conducir.
—Claro, he quedado con una amiga en vernos. —Mi hermana se puso el cinturón de seguridad al ver que el auto se movía.
— ¡Qué bien! —Le respondió Arath.
En el camino preferí quedarme callada mientras Arath y Aline seguían hablando sobre la escuela y la caricatura de Bob Esponja, donde mi mejor amigo le comentaba uno de los episodios a mi hermana de cuando tenía la edad de ella lloro cuando Gary se marchó de la casa de Bob y él fue en su búsqueda. Sería fácil decir que Arath además de tener un buen don para llevarse bien con las demás personas hasta con desconocidos, podía adecuar buenas conversaciones con los niños, haciendo que se volviera algo muy fácil para él como también agradarles algo que a mí no se me da con cualquier niño.