Ha pasado un año y medio.
Tenías que ver que ya te había olvidado para darte cuenta de que me habías perdido completamente.
¿Que tan ciego estabas? ¿Que tantas mentiras me dijiste?
Los te quiero, lo te amo. ¿Eran también fingidos?
Estaba saliendo con Theo del cine, cuando te vi.
No negaré que mi corazón latía a mil por minuto.
Eres y siempre serás mi primer amor, fuiste a quien me entregué por completo, te cuidé el día que te dio gripe a causa de ver una película y ambos querer imitar la escena dónde la pareja bailaba bajo la lluvia, fuiste la razón por la cuál le mentía a mis padres. Hice muchas cosas que jamás imagine hacer por alguien y cosas que jamás volveré hacer, no repetiré el error y el dolor dos veces.
Caminabas un poco desequilibrado y entonces lo supe, estabas ebrio.
— ¡Elena!—Gritaste.—¿Sabías que al principiosolo fuiste un juego? —Reíste.—Debo decir que tu pequeño cuerpesito es realmente excitante. No negaré que sentía celos cada vez que algún idiota te miraba, te quería solo para mí, pero yo no quería ser solo tuyo.—Theo estaba furioso, pero le dije que no hiciera nada, que te dejara terminar.—¿Sabes que fue lo más difícil de irme? Tener que dejarte. Pero, me di cuenta de que te hacía daño. Luego de nuestra primera vez, me di cuenta de que me enamoré de ti, pero no, tu no fuiste mi primera vez. Por eso busqué una beca lejos, con la esperanza de pensar sobre todo ese tiempo juntos, de poder madurar y así poder volver y ser mejor hombre para ti. Pero, empece a conocer chicas y me acosté con cada una de ellas para tratar de encontrarte. Ahí supe que nunca cambiaría y que merecías a alguien mejor.—Limpiaste una lagrima de tus ojos.—Theo, fuiste mi mejor amigo en la infancia, lamento haber mandado nuestra amistad a la mierda. Solo quiero pedirte que la cuides y que no la lastimes como yo lo hice. Se merece lo mejor, así que debes darle lo mejor. Y, Elena, las últimas palabras escritas en la carta aún siguen siendo reales.
Juro que en ese momento quise largarme a llorar.
¿Como pudiste hacerme eso?
Te he olvidado, no completamente pero, lo he trabajado en ello. Y vienes y me dices todo esto y es como si retrocediera los mil pasos que me propuse avanzar.
Pero, ¿sabes qué? Creo que era necesario saber la verdad. Me siento un poco liberada, me hubiera podido haber sido mas valiente en ese momento y haberte dicho gracias, porque justo ahora he conocido al hombre con el que me he sentido tan feliz, tan tranquila. Aún no hacemos planes para el futuro, pero con solo saber que despertaré cada mañana y va a estar ahí a mi lado, es más que cualquier futuro.