CAPÍTULO 14

Esa noche, después de la competencia no me quedé en el departamento de Lena, me quedé en el mío, creí que ella vendría a dar alguna explicación, pero no fue así, la frustración y arrepentimiento se mezclaron en mí, a pesar de ello pude dormir bien. Desperté ya muy tarde, eran ya las 10am, por supuesto, no tenía salida ni nada por el estilo, pero,aun así, era demasiado tarde para levantarme, mi estómago comenzó a hacer ruidos por el hambre, tendría que salir a algún lugar a comer.

Al abrir la puerta había un recipiente en el suelo y encima del recipiente se encontraban varios sobres sellados con una figura en forma de sombrilla, esto me recuerda a algo, tomé el recipiente del suelo y entre nuevamente a mi departamento, lo coloque en la pequeña mesa que tenía, le quite la tapa al recipiente dentro de el había hotcakes de vainilla y chocolate, tenían fruta y crema chantillí encima, se veían deliciosos, también había jugo de naranja, mi estómago seguía pidiendo comida así que tome los cubiertos y comencé a cortar los hotcakes, estaban muy suaves, tomé el primer bocado

-¡delicioso!- no pude evitar decirlo, me devoré los hotcakes en un instante, mi estómago se sentía satisfecho en ese momento, es cierto lo que se dice, la comida dulce puede calmar y alegrar tu corazón.

Tomé los sobres y comencé a abrir uno por uno, las hojas nuevamente tenían sombrillas y lluvia en su diseño, dicen simples palabras como

"Perdón"

"Te extraño"

"Te amo"

"¿Puedes regresar?"

Eran simples palabras, palabras que me hicieron sonreír y terminaron de calmar a mi corazón, tomé las notas y los sobres, también tomé el recipiente donde venían los hotcakes y salí del departamento. Tome la llave y abrí el departamento de Lena, creí que no la encontraría ahí pero ahí estaba ella, dormida en el sillón de la pequeña sala. Había una cobija también, ¿no me digas que se quedó a dormir toda la noche aquí?

Coloque el recipiente en la mesa, me hinque y comencé a observar el hermoso rostro de Lena, se le veían ojeras demasiado oscuras, inconscientemente comencé a rozar su hermoso rostro con mis manos, al rozar su piel mi piel se erizo toda, esa sensación solo ella podía provocarla en mí, mis cambios de humor solo ella tenía control de esos cambios inexplicables para mí, que me irritaba en ocasiones pero me hacía feliz, porque confirmaban que ella es la única en mi corazón, y no sé qué pasaría conmigo si ella no esta

-jake, regresaste- dijo en un tono sorprendida, en cuanto me vio me abrazo por el cuello

-así es, aquí estoy- tomé su cuello con una mano y le acaricié el cabello con la otra

-disculpa, tenía planeado llegar luego, pero todo se salió de control en la editorial, no me dejaron salir a la hora acordada- me decía con una voz temblorosa como si estuviera a punto de llorar

-bien, ya paso, ya no estoy molesto, solo necesitaba tiempo para calmarme- le dije, trataba de tranquilizarla

-creí que no regresarías, creí que me odiabas, creí que te había perdido- seguía diciendo Lena en un tono asustado, era la primera vez que la veía así, nunca demostraba este tipo de sentimientos.

-lo siento, es solo que necesitaba tiempo, perdón por haberte ignorado- le dije, a todo esto ¿por qué nunca se acercó a felicitarme?

-merecía que me ignoraras, después de todo tampoco me acerque a felicitarte- Lena seguía aferrándose a mí con todas sus fuerzas, puede que sea mi imaginación, pero incluso sentía como temblaba, como si estuviera asustada por algo

- ¿por qué no lo hiciste? - pregunte

-yo tampoco lo sé, simplemente me paralicé en esa enorme puerta, después no pude evitar ver a toda esa gente alrededor tuyo que te felicitaba de corazón, puede que tal vez en ese momento sentía envidia- ¿de qué habla? ¿Por qué sentiría envidia?

- ¿por qué sentirías envidia? A quien esperaba que me felicitara era a ti-

-porque era la primera vez que veía a otros felicitar a su competidor, en la editorial no es así, es todo lo contrario, por eso no pude evitar quedarme a lo lejos y observar esa hermosa vista- decía Lena en un tono más calmado, era la primera vez que ella me hablaba de algo que pasaba en su trabajo, siempre contaba las cosas buenas nada más, creí que todo era de maravilla en su trabajo, pero veo que me equivoque

-la próxima vez, espero verte ahí, felicitándome y siendo parte de mi triunfo- le dije, Lena separo su cuerpo del mío con sus dos manos tomo mi cabeza alejándola poco a poco de ella, me vio a los ojos y con una gran sonrisa dijo

-si-

Mi seguridad en que podía lograrlo todo comenzó a elevarse, mientras ella estuviera ahí sabía que podía hacerlo todo, sabía que podía hacerlo de maravilla en los Juegos Olímpicos y que tomaría alguna de esas medallas y se la dedicaría a ella.