Olvidaste Dejar Una Carta De Despedida

CAPÍTULO 15

Después de recibir la gran noticia de que soy uno de los clasificados a competir en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 la felicidad recorría todo mi ser, no lo podía creer, después de todo no estaba poniendo atención a lo que hacía en la pista, le tome más importancia a mis emociones en ese momento, aunque no es momento de recordarlo, no quiero recordarlo.

Lena también estaba muy feliz por mí, incluso podría decir que más feliz que yo, hizo de todo para felicitarme, y aunque han pasado ya varias semanas del anuncio de mi clasificación ella aún sigue celebrando, aunque no me molesta en lo absoluto, es más, lo estoy disfrutando como no tienen idea

El primer día de celebración me hizo un gran festín, todo era de mis platillos favoritos, el puré de papa exquisito que preparaba en ocasiones, la ensalada de zanahoria y manzana que combinaba perfectamente con el pollo horneado, el jugo de naranja natural era de lo más delicioso, pero ella siempre se quejaba que era mucho trabajo hacerlo todos los días, pero en esta ocasión me consintió con él, tanto que comenzaba a aburrirme de él, el postre de tres leches frío del cual no tenía ninguna idea de cómo lo hacía para que quedara firme ya que no tenía consistencia de la gelatina, pero que aun así estaba maravillado con su sabor.

El segundo día además de la comida, me invito a un pequeño parque, estaba rodeado de árboles y flores, había un gran campo, en lugar de pasto tenía flores blancas y amarillas, se veía hermoso, no lo voy a negar, no soy de las personas que admiren tanto la naturaleza, pero en esta ocasión no podía apartar la vista del lugar

-es hermoso- le dije a Lena con emoción

-lo sé, pero no es exactamente esto lo que te quería mostrar- dijo con una gran sonrisa, me tomo de la mano y comenzó a jalarme, por supuesto, la seguí, no importa cuántas veces tome mi mano, se sigue sintiendo como la primera vez. Después de unos minutos de caminata ella se colocó detrás mío y puso sus manos en mis ojos, comenzamos a caminar lento, demasiado lento diría yo, después de unos minutos la escuche decir

- ¡sorpresa! - mientras quitaba sus manos de mis ojos

-esto es increíble- dije sin dudar, el lugar estaba repleto de gradas, bancas, ceras, barandales, todo parecía como si hubiera sido diseñado para que una patineta circulará por este lugar

-verdad, lo primero que pensé cuando lo vi fue "este sería el paraíso para Jake y su patineta"- decía Lena con una gran emoción, haciendo que mi corazón latiera con más fuerza, era como si me enamorara más y más de ella, no pude evitarlo, la tomé de la cintura y la levante por unos segundos

-gracias por pensar en mi- me emocionaba el hecho de que al ver este lugar pensara en mi como un skater, no todos lo hacen, no personas ajenas a este deporte, la mayoría de chicas con las que han salido mis amigos y no tienen conocimiento de este deporte o simplemente no tienen interés suelen reprochar constantemente que pierden el tiempo haciendo lo que hacen, así que siempre pensé que una persona ajena a esto nunca lo entendería, pero Lena, es diferente a pesar que ni le llama la atención nada que lleve algún esfuerzo físico ella me apoya a su manera en este sueño que tengo desde la niñez, así que la felicidad que siento es inmensa, puede que muchos no lo puedan entender, pero aun así

-siempre pienso en ti, incluso cuando encuentro pequeñas escaleras por la calle me empiezo a preguntar si tu los considerarías obstáculos los cuales te interesarían afrontar- decía mientras caminaba en una de las ceras queriendo mantener el equilibrio

-es extraño, en mi mente siempre estaba solo mi trabajo, era lo único que encontraba interesante e importante para mí, es más, es vergonzoso decirlo pero también encontraba insignificante lo que otros hacían, aunque no me vas a negar que varios de los que están en tu grupo piensan lo mismo que yo, aunque creo que eso es común en todas las personas, pero cuando te vi haciendo lo que haces con la patineta, se formó un mundo de posibilidades cada vez que veo la calle, y se comenzó a hacer divertido- lo podía escuchar en su voz, ella no mentía, era como si disfrutará lo que yo hago, no le entiendo del todo

- ¿eh? ¿Por qué estas llorando Jake? - decía Lena con un rostro un tanto preocupado

-no lo sé, pero te aseguró que son lágrimas de felicidad- era cierto, eran lágrimas de felicidad, aunque no entendía mis emociones era más fácil haber sonreído

-tonto- decía Lena mientras que sus manos suavemente me secaban las lágrimas

-bien, comienza a hacer uso de este lugar, por ello te dije que trajeras la patineta, además, quiero ver que es lo que puedes hacer con ella en estos obstáculos- decía como si tratara de desafiarme

Asintiendo con la cabeza comencé a recorrer el lugar, me subía en las pequeñas ceras que se encontraban en el lugar y bajaba de ellas haciendo pequeños trucos, podía ver a Lena aplaudir y sonreír cada que hacía alguno, cuando comencé a querer hacer trucos más complejos o saltar por los barandales altos de las escaleras comencé a fallar en todos ellos, a pesar de ello Lena seguía entusiasmada, a pesar que estaba fallando en casi todo, nada podía quitarme la felicidad que sentía en este momento. Después de un buen rato tomé un pequeño descanso Lena tomó la patineta, coloco su pie izquierdo y después el derecho, comenzó a avanzar empujándose con el pie derecho

- ¿cuándo aprendiste a subirte en ella? - pregunte un tanto emocionado y a la vez confundido



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En el texto hay: romance, deporte

Editado: 03.09.2022

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